Mariposa Azul

Despejate y Centrate

Me acerqué con disimulo hasta la entrada y dejé la moto parqueada y empecé a caminar rápidamente en busca de ella. Tenía que ir hasta la pista de aterrizaje y se me había olvidado preguntarle a Victoria sobre que vuelo iba a tomar y eso me iba a causar problemas, no tenía mucho tiempo antes de que ella desapareciera de mí vista y me sentía presionado. Empecé a correr por los pasillos buscandole pero no encontraba nada, bajé una planta y logré verla salir por unos de los pasillos que dirigía hacía la pista, ella seguía junto a su guarda espaldas. Empecé a correr hasta acercarme más pero mí vista se desvío, una silueta llamó mi atención era ¡¿Jade?!
Mi mente se quedó en blanco y no sabía como reaccionar ¿Tenia que ir tras ella o tras de Vaneza? Era un trabajo versus la persona a la que realmente he estado persiguiendo desde que me recuperé desde que trabajaba para Raúl. El sentimiento de ira y venganza no me hacía pensar claramente y no podía llamar la atención en medio aeropuerto, ambas se estaban marchando y en direcciones totalmente distintas, una que estaba a punto de tomar un avión y otra un ascensor. Mi mente divago sola por un momento y mi cuerpo tomó por impulso salir tras Jade. Quería reventarle y devolverle todo el mal que me había hecho, estaba cegado. Jade logro subirse al ascensor por lo que me tocó devolveme por las escaleras en busca de ella. Iba decidido pero algo dentro de mí gritaba que era incorrecto, que estába equivocandome y podía costarme mucho si no pensaba bien pero igualmente ya estaba tomando el riesgo. Corría y trataba de quitarme a las personas por delante, no podía creer también, si finalizó aquí, mi vida podrá tomar el rumbo que tanto he querido, no tendría que esperar más tiempo y me estába emocionando por eso. Cuando logré llegar le ví, estába saliendo, y tomé más fuerzas para acercarme hasta a ella, mientras estába por tomar un taxi e irse. - ¡Esta vez no ibas a escapar.! - Salí y logré detenerla. Este era mi momento, el que tanto había esperado.
- ¡Hola Jade.! - Le tomé del hombro y le voltee
- ¿Disculpa? ¿Te conozco? - Mi corazón se detuvo en ese momento, pensé por un momento... ¡No, madita sea! Me había equivocado
- No, lo siento, te confundí con otra persona. -
Le solté y me dirigí de nuevo hacía dentro. - ¿Como no pudo ser ella? Eran tán identicas cuando le vi, pero no, su voz, ojos y boca eran diferentes. Me dirigí de nuevo hasta dentro, ahora tenía que correr hasta la pista, no había tiempo para evitarlo, solo un pequeño grano de esperanza podría hacerme llegar hasta ella. Se veía completamente lejos y empezaba a dudar si podría llegar pero, si pierdo esta pieza del rompecabezas, no podría encontrar más pistas hasta que ella o Saúl volvieran y no tenía ni la menor idea de cuándo volverían acá o si volverían alguna vez más no sé si acaso a dónde se dirigían. Vaneza tiene su propio avión privado por lo que puede evitar dar de más información sobre su destino. De nuevo, corría de nuevo, detrás de mí nueva víctima, esta que está a punto de salir ilesa de mí ¿Iba a permitirme eso? Mi mente quedó en blanco - ¿Enserio piensas rendirte y dejarlo así? ¿Tu no eres así o sí? - Esas palabras surgieron de pronto, y era cierto, no soy esa persona que deja ir algo tán fácilmente al menos sin darle a conocer mi verdadera persona. Estába fijado y el tiempo también, ya no tenía el control sobre esta situación, por lo quebme estaba empezando a emocionar cada vez más y más, la adrenalina recorría mis venas, en busca del desahogo total de ella. Las nuevas experiencias o un recuerdo a breve de algo que me jodió y dió vida a un nuevo ser, esto estaba siendo de nuevo el palpitar, mí verdadero éxtasis. Aún tengo preguntas que necesito responder, emociones que liberar con las personas que fueron las primeras en algo, que aunque no esperaba que sucediera, y pasó. El caos se puede desvordar cuando tratas de controlar lo incontrolable, y aunque mo hayas creado, no sabés de lo que es capaz si nunca terminaste de ver el experimento y ponerlo a prueba.