Te Encontraré. #segundo Libro

capítulo 27

Solté un fuerte bostezo y estire mi cuerpo para mirar el río.

- ¿Listo?

Ariana apretó mis hombros para después empezar a quitarse la ropa.

- ¿A qué hora se abre el portal?

Pregunte mientras me inclinaba un poco hacia el río.

- Cuando el sol aparezca por esa montaña.

Dijo señalando la montaña frente a nosotros, los rayos del sol se empezaban a ver haciendo que chocaran con el cielo nocturno, era un espectáculo hermoso que quería ver con Victoria.

Ariana se sentó en la orilla y hundió sus pies.

- Tenemos dos horas para ir y venir, si no lo logramos quedaremos atrapados ¿entendido?

La mire.
Dos horas para saber si lograría conseguir a mi hermosa gatita.

- Si.

Su cuerpo se transformó en el de una sirena y miró hacia el horizonte donde el sol empezaba a salir.
El río empezó a brillar con una potente luz violeta y haciendo que se empezará a formar un remolino, las aguas se agitaban con violencia y giraban alrededor de un vértice era totalmente espeluznante, sentía como una energía externa me empujaba hacia allí.

- ¡HASTER TRAMPEI!

Sentí algo, como un hierro caliente me quemaba la espalda haciendo que callera de rodillas, mis piernas empezaron a crujir y a cambiarse en cola.

- Muévete no tenemos tiempo.

Grito Ariana jalandome del brazo empujandome al agua con ella detrás.
¿Cómo demonios usaba está cosa?
Ariana tomo mi mano y empezó a arrastrarme mientras nadaba, pronto salimos del remolino y mi espalda impactó sobre una roca haciéndome gemir de dolor.

- Alex, muevete no tenemos mucho tiempo.

Dijo Ariana nadando frente a mi.

- ¿Como? Ni siquiera se como moverme.

Ariana rodo los ojos, por amor a la santa Selene si que era una sirena, su larga aleta rojo carmín era todo lo que resaltaba añadiéndole la hora palidez de su piel y su largo cabello negro que flotaba sobre su cabeza con gracia y sus ojos color ¿qué demonios era ese color?

- Arriba y abajo. Mueve la aleta y podrás nadar ¡APURATE NO TENEMOS TODO EL TIEMPO DEL MUNDO!

Su grito me hizo salir de mi análisis y empecé a hacer lo que decía, a medida que nadabamos ella me iba explicando las cosas.
El mundo submarino del bajo nilo era totalmente asombroso desde las extrañas plantas hasta los miles de animales y seres que nadaban uno al lado del otro, captamos rapidamente la mirada de los pequeños seres, las sirenas no vivían aquí o eso fue lo que me dijo Ariana.

- Ariana ¿aún falta mucho?

Me miró de reojo para después negar con la cabeza.
Un pinchazo de dolor llegó a mi, pero no era mío era como si viniera de algo externo a mi pero lo sentía como si fuera mio totalmente ¿qué demonios era esto? Sentí como si el agua se tornara más espesa a mi alrededor, sentía que nadaba en sangre.

- Llegamos.

Sólto Ariana haciendo que fijará mi vista en el enorme acantilado submarino frente a nosotros, era profundo lo notaba por la oscuro que era, tanto como el color de la aleta que poseia.

- ¿Qué hay abajo?

Ella me miró asustada.

- Aquello a lo que todo ser sobrenatural teme, ningún ser o animal se acerca a este lugar ni siquiera por equivocación.