capítulo 23

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Ariana con suma tranquilidad tomaba una taza de café, cuando llegamos ella estaba dormida.

- ¿Qué los trae por aquí?

Dijo mirándonos a todos, desde las gargolas detrás de mi hasta Ashton, ella se rió un poco, maldita sea todos se reian de mi estatura a comparación de las gargolas.

- Ariana Drake, años han pasado hermosa.

Las voz de Ashton sonaba coqueta, ella rodo los ojos y miró al cielo.

- Deberían entrar no quiero sobras de vampiro en la parte delantera de mi casa.

Entramos a la casa la cual estaba totalmente silenciosa y ordenada, Apolo dormía plácidamente en el sofá. Logan y Cristal estaban en una habitación cercana y Mateo en otra.

- ¿Eres la única que estás despierta?

Ariana bostezo.

- La verdad es que estábamos dormidos todos ¿qué los trae por aquí?

Tomo un largo trago de su café. Y nos dio otra mirada.

- Nos dijeron que tenías la guadaña del Anubis.

Ariana alzó una ceja mientras se amarrada el pelo.

- Si, creo que la gane en un juego de poker hace unos cuantos años.

Sonrió con diversión haciendo que las gargolas detrás de nosotros gruñeran, a veces Ariana podía ser una completa cabrona.

- Esto es serio Ariana.

Dijo Ashton apoyándose en la mesa.

- mmmmmj.

La voz de Apolo llegó a mis oídos haciendo que yo lo mirara confundido.

- ¿Qué le pasa?

- Tiene pesadillas, pero volviendo al tema ¿qué pasa con la guadaña?

Ashton tomo aire para despues mirarla mejor, se veía que estaba preocupado por si era verdad que esa era la guadaña que el pensaba.

- ¿Sabes lo que significa que tengas esa guadaña?

- Podre recuperar o condenar a un alma, soy una diosa de los muertos, lo sé Ashton.

¿Recuperar almas? ¿eso quiere decir que...

- ¿Puedes salvar a Victoria?

- Si, siempre y cuando esa alma no esté vinculada a algo externo a ella.

¿Externo a ella?

- Más tarde hablaremos de tu mate ahora necesito que me muestres esa guadaña.

Ariana se levantó con lentitud de la silla, su mate llegó y la abrazo de cintura.

- Traeme ropa amor esto se va a poner feo.

Mateo la miró confundido y salió al cuarto.
Ella empezó a salir de la casa a paso lento, se paró a una distancia prudente de la casa y se estiró.

- Guadaña del Anubis.

Colocó su dedo debajo de su barbilla como buscando en su mente lo que Ashton había dicho. Se estiró un poco y miró el sol.
Mateo salió con un abrigo de cuero largo y se colocó a un lado de mi.

- Listo, odio tener cara de chacal pero si quieres ver la fabulosa guadaña lo haré.

Los símbolos en su piel se empezaron a mover por todo su cuerpo, ella cerró los ojos mientras una fuerte corriente de aire se dirigia hacia ella, su cuerpo empezó a flotar, mientras una luz violeta se colocaba a su alrededor.
Mis pelos se colocaron de punta y las gargolas a mi lado miraban con terror a mi prima.
Tan rápido como la luz vino se fue y pudimos ver a Ariana.

Sus pies tocaron el suelo dejándola ver bien.

Su cabeza era la de un chacal, mientras su cuerpo era el de ella, su ropa no dejaba mucho a la imaginación, un pequeño sostén y una falda hasta el suelo con sus enormes aberturas a los lados, Mateo se acercó a ella y le dio el abrigo, ella se lo colocó.
Un largo báculo negro descansaba en su manos.

- ¿Guadaña del Anubis? Con mucho gusto.

El báculo empezó a soltar una potente luz blanca y se convirtió en una enorme hacha, el filo cayó haciendo que se formará una grieta a su alrededor.

- Acercate no muerde.

¿Cómo lograba hablar sin abrir la boca? Me di un golpe mental por la pregunta tan estúpida que se había formulado en mi cabeza, estaban pasando millones de cosas y yo sólo pensaba en por que no movia la boca.
Ashton se acercó con cautela hacia Ariana con sus dos trogloditas detrás de ella.
Iba a tocar la guadaña pero Ariana la movio haciendo que todos dieran un salto lejos de ella, ella empezo a reir con fuerza mientras yo me acercaba.

- ¿Es esa?

Pregunte a Ashton mientras tocaba su hombro, el pego otro saltito y me miró enojado.

- S-si pero ¿c-como la tienes?

Logan, Cristal y Apolo salieron de la casa y nos miraron confundidos, Ashton abrió los ojos asombrados.

- ¿¡QUE DEMONIOS ESTÁ PASANDO AQUÍ!?

Grito Ashton, cuando una muy agitada Aila llegó frente a mi.

- Ellos son Apolo y Aila Drake, tu debes conocerlos Ashton.

Dijo Cristal acercándose a Aila y tendiendole un vaso con agua.

- Ellos están muertos, maldita sea, fueron quitados de los brazos de Lainus.

Cristal me miró y yo asenti.

- Ven yo te contaré todo lo que debes saber.

Ashton me miró y salió con Cristal que entró a la casa junto a Logan. Apolo nos miró a todos para después salir directo al bosque detrás de nosotros.

- ¿Estas bien?

Aila asintió, mientras trataba de recuperar el aliento que había perdido.

- ¿Dónde está mi hermano?

- Salió al bosque, no se exactamente a que.

Sus ojos reflejaron preocupación haciendo que la mirara confundido y preocupado.

- Estoy aquí para decirte que Marc llegó y tu madre está como una loca preguntando por ti.

La mire divertido, Marc era un caso muy especial.

- ¿Te mando a comprar cerveza?

Ella asintió haciéndome reír un poco.

- Vamos, seguro mi madre está preocupada por mi.

Ambos salimos a paso lento hacia la manada.
Ella no paraba de verme con atención, cuando mi vista se volteaba hacia ella, apartaba la mirada sonrojada.

- ¿Que tanto me ves Aila?

Pregunte cuando estaba exasperado de su inusual interés hacia mi.

- Eres muy guapo. E-espera no era eso lo que trataba de decir. T-tu...

Le sonreí con sarcasmo.

- Sabes Aila, eres guapa pero a cambio de mi tu eres una bonita persona por dentro, yo estoy podrido y dañado. Así que sólo soy una cara bonita.

Ella no dijo nada y empezó a caminar con la cabeza gacha totalmente apenada.
No debía fijarse en mi, primero por que mi corazón sólo le pertenecía a Victoria y más importante es mi familia.
Llegué a la entrada cuando ella cruzó para irse hacia el área de entrenamientos.

- Los chicos y yo saldremos está tarde a retocar nuestros tatuajes, ve a entrenar por que Marc se enojara y no te dejará salir hasta muy tarde.

Le tendí una caja de cerveza que trajo el mayordomo.

- Siempre pide corona y supongo que no te específico que clase de cerveza. Suerte Aila.

Me di la vuelta y entre a la casa donde me esperaba un buen dolor de cabeza.

Te Encontraré. #segundo LibroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora