Te Encontraré. #segundo Libro

capítulo 20

Abrí de golpe la entrada del gimnasio cuando algo se tiró en mi espalda y me hizo impactarme con fuerza al piso.

- Alex, Alex.

Trate de alzar la vista pero unos tacones empujaron mi cabeza hacia abajo.
Escuché un estruendo seguido de un disparo de luz.

- Pero si es Cristal y ¿tú quien eres?

Ariana gruño con fuerza cuando la lanzaron frente a mi, maldita sea no podía ver quien sostenía mi cabeza con tanta fuerza.
Trataba de levantarme pero el pie me empujaba hacia abajo, haciendo que el tacón se enterrara en mi cráneo.

- Es Ariana Drake gran señora.

Esa voz, esa maldita voz no.
Cristal gruño algo haciendo que lo que sea que la estuviera sosteniendo callera al suelo con un estrépito.

El peso fue quitado de arriba de mi y me pude levantar. Pero tan rápido como paso me inmovilizaron, unas cadenas me tomaron haciéndome arrodillar.

- Alex Drake, Cristal Drake y Ariana Drake.
Ustedes Drake puedo decir que son una plaga, una maldita y sucia plaga, e tratado de acabar con ustedes por mucho tiempo.

Maldita sea no. Era el maldito Luxurus en todo su esplendor, su largo cabello color fuego, sus ojos lava y la misma corona.

- A veces me pregunto ¿cómo han durado tanto tiempo aquí?

Ariana seguía siendo inmovilizada en el suelo por un chico, mi vista se fijo en ella.
Mónica, la mujer que alguna vez ame con toda mi alma, sus ojos rojos me miraban con odio. Esto debía ser una maldita mentira, ella estaba muerta yo la vi morir en mis brazos, incluso la había sepultado, esto no podía ser verdad.

- Cuando conocí a Marcus quería que debilitara a los Drake y ¿qué mejor forma que con la última generación? Marcus me dijo que tu estabas totalmente enamorado de una humana así que no fue difícil de que el la sedujera y la colocará a sus pies, simplemente hice que fingiera su muerte en frente de ti Alex.

Me miró divertida mientra yo sentía como mi interior se revolucionaba y se rompia, me había sentido culpable por algo que no había hecho yo.

- Le prometiste miles de cosas mientra ella "moria" así que no fue difícil llenarla de odio cuando se enteró que tenías mate.

- ¡YO TE AMABA!

Grito ella con los ojos encendidos en furia.

- ¿Amarme? ¡ME MENTISTE!

Grité con un nudo en la garganta insoportable, era un maldito hipócrita.

- ¡ME DEJARÍAS CUANDO TU MATE LLEGARÁ!

Se empezó a acercar a mi y tomo mi mentón, mi piel quemó sólo al sentir ese frío contacto.

- No me toques.

Ella sonrió divertida mientras hacía que mirara sus ojos.

- ¿Tan fácil te fue olvidarme?

Dijo ella con fingido dolor.

- ¡NUNCA TE OLVIDE, PASE AÑOS Y AÑOS LLORANDO TU MALDITA MUERTE, ME SENTÍA CULPABLE POR TU MUERTE, TE AMABA CON TODO MI SER! Y tú me mentiste.

Las últimas palabras salieron con veneno.
Mi pecho se opromio al verla sonreír aún más divertida

- ¿Todavía me amas?

Sus ojos cambiaron a ese hermoso tono que yo tanto amaba, me traía tanto recuerdos, desvíe la vista cuando no pude más.

Cristal me miraba con atención.

- Contéstale Alex ¿todavía la amas?

Las garras de la mujer tomaron mi mentón haciendo que mirara a Mónica.

- No. No te amo ni en lo más mínimo, te olvide hace tiempo ya, sólo sentía culpa por tu muerte.

Ella soltó un gruñido y empezó a caminar hacia mi furiosa, algo la lanzó al suelo haciendola gritar.
No sientas nada por ella Alex, no sientas nada por ella. Ariana se levantó del suelo cabreada.

- ¿Tú eres el famoso Luxurus?

La mujer me soltó y miró a Ariana con altaneria.

- ¿Tú eres?

Ariana sonrió.

- Ariana Drake pero como muchos me llaman El ángel de la venganza y la muerte.

El Luxurus la miró de pies a cabeza como si no se lo creyera para después empezar a reír.

- ¿Tú? ¿una simple y triste mujer lobo? Ja. No me hagas reír.

Ariana sonrió con más diversión aún.

- No estoy aquí para demostrarte quien soy así que si me disculpas.

Un destello de luz cego mis ojos y de un momento a otro estábamos en Golden Moon.

- ¿Esa cosa estuvo dentro de ti?

Pregunto Ariana hacia Cristal, la cual solo asintió.

- Mi-er-da.

Me levanté del suelo y empecé a caminar hacia el bosque.

- ¿Estas bien?

- Si, sólo necesito procesar todo esto.

Max tomó el control de mi cuerpo y empecé a correr con todas mis fuerzas por el bosque.
Mi corazón gritaba por alivio, maldita sea no podía más, no quería pelear más.

- ¡ALEX NO LO HAGAS!

Mire el enorme acantilado frente a mi. ¿Por qué no? No quería saber que más cosas tenía la vida para mi, ella estaba con vida, me había mentido, mi hermosa Victoria estaba en manos de ese ser y no podía encontrarla, mi manada estaba contra mi, Lainus no podía dar con el Luxurus y yo tampoco.

- No puedo más.

Mire la enorme caída frente a mi.

- ¿Cuántas veces haz dicho eso y has salido de todo?

Muchas.

- Esta vez es diferente.

- No te conviertas en un cobarde Alex, sabes lo que pasará si tu mueres, Victoria seguirá en las manos de ese ser sufriendo y Lainus morira contigo dejando a tu manada sin protección.

Me voltee encontrándondome con los ojos verdes de mi mejor amigo.

- Esta viva.

Logan me miró confuso.

- ¿Quién?

- Mónica.