Una Noche [LayHo]

1

Un joven caminaba por las calles obscuras de Seul; iluminadas únicamente por la luna llena y ciertas lamparas; era una noche tranquila por dicha llovizna que hizo a todos huir e irse a la tranquilidad y calidez de sus hogares.

Estaba tranquilamente caminando hacia su departamento pensando en todos sus problemas personales y también en ciertas tonterías que debía arreglar regresando a su departamento, ya eran aproximadamente las 10 de la noche, y aun no había cenado, por arte de magia su comida había desaparecido y ya no tenia absolutamente nada de alimentos, estaba seguro que toda la culpa la tenia su amigo Jongade mejor conocido como Chen y su lindisimo híbrido Minseok; esta semana pasaban todo el día en su departamento con el grandioso pretexto que siempre estaba solo, quizá tuvieran razón... pero no era motivo para devorar su comida y dejarlo sin nada con que alimentarse.
Ya estaba caminando hacia su departamento con todas sus compras cuando al pasar por un callejón escucho lamentaciones eso lo alerto, inmediatamente comenzó a dirigirse hacia el sonido, al acercarse mas noto a un chico aproximadamente de su edad, mojado, con algunos moretones en los brazos y piernas; le escurría sangre de algunas heridas en sus pies y cara, estaba tenso, temblaba y sollozaba a la vez; tan solo llevaba un camisón blanco que ahora era negro.

Yixing se acerco hacia el chico, y al estar de frente lo cogió para ayudarlo a levantarse, el chico parecía estar en las nubes y al sentir el toque cálido de Yixing se aparto con cara de terror; Yixing se acerco a él y hablo al notar que cada vez el chico se alejaba mas.

-No te haré daño déjame ayudarte, puedo curar tus heridas.- le dijo amablemente.

El chico solo lo miro confundido y al querer contestar algo comenzó a ver borroso y todo su cuerpo perdió la fuerza que tenia, Yixing al notar que el chico se balanceaba corrió la distancia que el chico había puesto entre ellos, tirando todo lo que tenia en sus manos para alcanzar al chico que se veía tan indefenso y delicado, el cual comenzaba a cerrar sus ojos, estaba ardiendo en temperatura, lo cargo y como pudo agarro todo lo que había tirado minutos antes.

Con dificultades llego a su departamento cargando al pequeño chico, lo primero que hizo fue dejarlo en su cama importándole poco si se mojaba e manchaba su cama, rápidamente puso la tina a llenarse mientras sacaba una toalla y alguna pijama para prestarle al chico, preparo un poco de comida para los dos.
Al tener todo listo cargo al chico que aun ardía en temperatura y lo comenzó a desalojar de las únicas prendas que tenia; al verlo con mayor luz se dio cuenta que era demasiado blanco como la nieve, y aunque se le notaban sus huesos su piel era jodidamente suave, en realidad el chico parecía un muñequito de porcelana. Pero pudo notar que en su espalda tenia cicatrices enormes y profundas; cuidadosamente comenzó a bañarlo cuando por fin acabo, lo saco y coloco una toalla mientras curaba sus heridas.
En sus pies a parte de tener las heridas recientes se notaban cicatrices igual de profundas que las de su espalda; al curar todas las heridas de su cuerpo le coloco la pijama y lo llevo a su cama para que estuviera mas cómodo mientras curaba su cara, comenzó a curarlo pudo ver perfectamente su rostro, era igual que su demás cuerpo, blanco como la nieve y suave como el algodón, tenia un rostro fino e hermoso, sus grandes pestañas negras haciendo contraste con su pequeña e fina nariz como la de un conejo, y con sus pequeños pero bultosos labios, color cerezas que arriba de ellos tenia un lindo lunar; era precioso, algo como un ángel aun con la cicatriz que tenia en una de sus cejas.

Al terminar lo mas cuidadoso que pudo cambio las sabanas e las llevo a lavar regresando con las charolas de comida. Pero tan pronto como acomodo las cosas el chico comenzó a balbucear y moverse entre sueños.

-Basta, por favor pare amo, duele, duele demasiado, me comportare lo prometo; no lo volveré a hacer- decía lo suficiente alto como para que Yixing lo escuchara a la perfección.