Espero que les guste y disfruten de la lectura como yo la estoy disfrutando escribiéndola. Es una historia hot con nuestro dorito Chris Evans, después de intentarlo varias veces, salió esta historia que, creo, no quedando tan mal. Por supuesto, me...
Se acercaba fin de año, y como era costumbre Robert tenía una fiesta preparada para todos nosotros.
Me acerqué a la oficina de Chris y le pregunté:
- Chris! - Sí? - Vienes a la fiesta esta noche?
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- Que? Me miró sorprendido por mi pregunta. - Mía tú sabes que sí. - Bien -fue mi respuesta - Mía?? Mía?? - Te veré esta noche.
Chris estaba confundido pues creía que iríamos juntos a la fiesta, Salí de la oficina, fui a casa de Elizabeth me cambié.
- Como me veo? - Wow! Mía te ves hermosa!, Que estás pensando hacer? - Volver loco a un hombre - dije sonriendo. - nos vamos? - Sí
Llegamos a la fiesta Chris ya estaba allí, se encontraba junto a la barra con una cerveza en su mano, dando la espalda hacia la entrada, hablaba con Robert, Jeremy, Anthony, Sebastián y Marck, reían al verme entrar se quedaron callados.
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- Que pasa? - pregunto Chris - Mira a la entrada - dijo Marck
Chris volteó a mirar y me vió parada en la entrada. Llevaba puesto un hermoso vestido plateado muy señido al cuerpo, los labios pintados de un hermoso color rojo, como a él le gusta.
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Chris me vio allí parada me miró de arriba abajo, sonrió, me dirigí hacia él. Mi respiración se aceleraba como la primera vez que lo ví, me comenzaron a temblar las piernas de solo verlo ahí de pie con con su hermosa sonrisa, y en esa camisa color azul que resaltaba no solo sus hermosos ojos azules sino todo su espectacular cuerpo, se veía perfecto, su cabello bien arreglado, sus hermosos ojos azules, y esa boca color rosa que tantas veces había besado. Un mesero pasó por mi lado con una bandeja con copas de vino.
