Espero que les guste y disfruten de la lectura como yo la estoy disfrutando escribiéndola. Es una historia hot con nuestro dorito Chris Evans, después de intentarlo varias veces, salió esta historia que, creo, no quedando tan mal. Por supuesto, me...
Mientras en la otra habitación me encontraba con Henry no voy a negarlo tenía miedo, mucho miedo, no quería de cierta manera cometer un error, pero ya había tomado la decisión de estar con Henry y ya no podía dar vuelta atrás.
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- Te encuentras bien? - dijo Henry - Sí - Estás temblando. - Algo... - Mía si quieres lo dejamos así. - No, no estoy bien
Estaba temblando, Henry me abrazó y comenzó a besar mi cuello, estaba muy asustada, me sentía como la primera vez con Chris, pero obviamente esta vez era totalmente diferente, cada beso que Henry me daba me hacía recordar a Chris y me estremecía de solo pensar en él. Pero no podía hacerlo ya no estaba con él, frente a mí tenía a un hombre maravilloso que me amaba y me hacía sentir única a su lado.
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Me hablaba al oido.
- Todo va a estar bien. - Lo sé
Henry me acariciaba, podía sentir sus labios en mi cuello, me giró frente a él y me beso, ese beso que me provocó un sin fin de emociones subió mi temperatura, ardía en deseos, quería más, era un juego sutil. Henry se quito la camisa y pude ver todo su pecho.
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Su cuerpo era tanto o igual de perfecto al de Chris con la única diferencia que Henry era más grande y un poco más corpulento, sus brazos fuertes y su pecho firme, su boca perfecta cada vez que me besaba me hacía sentir deseo, sentía escalofríos recorren sin parar mi cuerpo, los latidos de mi corazón eran cada vez más rápidos, Sentir su lengua en mis labios. Un sin número de emociones recorrían mi cuerpo, su mano aprisionaba mi cuello, mi cuerpo contra de él, sentía una montaña rusa de emociones, un sube y baja de pasiones que hicieron que todo mi se estremeciera, así de simple, así de fácil, en un sólo segundo. Llamaron a la puerta era la champagne que Henry había pedido, la recibió sirvio dos copas, me ofreció una, yo la tomé como si fuera un vaso de agua.
