hamerhand (Traducción Excluciva)

capítulo 31: viejo enemigo

"Estamos en el relevo, capitán", anunció Joker. "¿Debo dar el salto?"

"Hazlo, Joker", dijo Malleus desde dentro del CIC. "Kurias, ¿está listo el Thunderhawk?"

"Tan pronto como lleguemos al otro lado", respondió Kurias. "Los motores están calientes y todas las armas están en línea".

"Bien", dijo Malleus. Sintió una conmoción bajo sus pies cuando el Normandía fue acelerado más allá de la velocidad de la luz y regresó en un instante demasiado pequeño para que incluso la mente de un Astartes lo procesara, y Joker anunció; "Ya terminamos. Capitán, tal vez quiera ver esto".

Malleus se dirigió a la cabina y vio de qué hablaba Joker; un mar de restos flotantes, trozos de casco, pistolas antiguas y motores decrépitos girando suavemente en el vacío, algunos de los escombros tan vastos que empequeñecieron la Normandía.

"¿Cuántos años tiene esto?" Joker se preguntó.

"Gran parte no coincide con los patrones de diseño estándar para los buques actuales, o los históricos que conozco", dijo EDI. "No creo que la especie Ciudadela haya sido la primera en intentar atravesar el relé. Capitán, tenga cuidado; actualmente estamos en un lugar seguro, pero estamos rodeados de radiación solar. Demasiada desviación de nuestro curso puede provocar la destrucción. de la Normandía ".

"Ninguno de ellos tenía el IFF", dijo Malleus. "El relevo probablemente los atravesó con demasiada deriva para que estuvieran a salvo. Una defensa astuta. Hablando de eso, ¿Kurias?"

"¿Hermano Capitán?" Kurias preguntó al otro lado de la voz.

"Saca el Thunderhawk y observa la Normandía", dijo Malleus.

"Sí, mi señor", dijo Kurias.

Dentro de la cabina de la nave de combate, movió los diversos interruptores y se recostó en el asiento, levantando la pesada unidad de rebreather almacenada en la nave sobre su cabeza. El Thunderhawk se levantó suavemente mientras se cernía fuera del hangar de Normandía, y él miró las lecturas del instrumento mientras entraba en el vacío. Tan pronto como estuvo fuera, aceleró los motores, voló un lento y suave bucle alrededor de Normandía, se detuvo incluso con la cabina y bajó las alas. Vio a Joker hacer un saludo burlón en su interior, y se apartó, buscando peligros y esquivando los escombros.

"Hostiles entrantes", dijo Joker por la radio. "Tres de ellos, al puerto de Normandía".

"En eso", respondió Kurias, dirigiendo el thunderhawk hacia los tres blips que EDI había alimentado en el radar del thunderhawk. Debajo de él, la Normandía se apartó, con sus potentes motores encendidos, y Kurias golpeó el Aquila que llevaba en una cadena en el pecho antes de activar los quemadores posteriores y atacó la amenaza.

Era el mismo tipo de arte que los Coleccionistas le habían enviado en New London, los esféricos con las armas de rayos, tres de ellos. Podía ver las armas brillando mientras cargaban, y miró la pantalla de apuntado para los cañones láser dorsales del Halcón de Trueno. La retícula seguía parpadeando en naranja, y levantó la vista para ver que las tres naves aún se acercaban a él.

Hubo un timbre cuando el objetivo indicó que las dos grandes armas estaban listas, y apretó el gatillo, alejándose en el mismo momento. La nave central fue destruida por dos brillantes rayos de luz, las otras tres naves se alejaron en su persecución. Una mirada al radar mostró que uno se dirigía hacia Normandía, y Kurias activó la voz.

"Joker, tienes una nave enemiga en camino", dijo. "Estoy persiguiendo, pero prepárate para evadir".

Trasladó la cañonera tras la nave enemiga, los potentes motores encendidos, esquivando los restos y usándolos para interrumpir los objetivos enemigos. Encendió una de las cámaras traseras para ver que una de las naves enemigas se estrellaba contra un trozo de escombros, y desvió la nave para evitar un pedazo de casco antiguo que habría estrellado el Thunderhawk en chatarra.