Capítulo 15: Rosa de los Vientos Parte 2

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Día 8, 7:44 AM.

Las nubes se aclaraban y el frio de la mañana abundaba el ambiente. Me había quedado dormido y ahora sentía mi cuerpo más pesado de lo normal. Con dificultad, logré abrir mis ojos y colocarme en posición fetal, pues el frio se había vuelto insoportable y mi cuerpo no producía el calor que debería.

"Hay más..." Pensaba, mientras mis dientes tiritaban.

La idea de que aun hubiese personas en este sitio era, en cierta forma, agradable, aunque no tengo que olvidar lo que pasó anoche: Alguien le disparó a ese niño.

Recuerdos abundan mi cabeza y me obligan a cerrar mis ojos para contener el llanto: Me veo a mí con un arma en mano y disparándole a aquel infante de anoche. Pero, no pude haber sido yo, de ninguna manera encuentro la forma de que yo lo hubiese matado. Puede que pierda la razón, aun así no sería capaz de matar a un inocen...

"Discord, recuérdalos." Mi propia voz habla por sí sola en mi cabeza.

"¿Qué?" Nunca obtuve respuestas.

Un olor pútrido llegaba a mis narices, mis manos tocaban un charco de sangre que emergía del suelo, una voz gritaba a lo lejos mi nombre y un disparo la cayó sin más. Como pude, me incorporé, con armas en mano, y salí con dificultad de mi refugio. Afuera no había nada, solo el silencio absoluto y un cadáver en el suelo. Fui hasta él y me arrodillé, sus ojos aún estaban abiertos y la parte de atrás de su cráneo ya no existía. Los sesos habían volado a unos pasos y la sangre había estado rodeándolo. Lo único que pude hacer en mi estado, fue cerrarle los ojos y marcharme sin más de ahí.

Entro en mi refugio, coloco unos cobertores en el suelo y me cubro con otros. Noto que la sangre ya no estaba, ni siquiera se veían manchas, era como si se hubiese tratado de una ilusión. Sin darle importancia, me mantuve en mi posición, la escena de aquel niño suplicando que dejara a su hermana era algo que aún me afectaba, ver cómo sus esfuerzos casi daban frutos y al final...

"¿Tienes miedo?" De nuevo mi voz.

"¿De qué?"

"De fallar."

"¿Quién no lo tiene?"

"Yo."

"¿Y tú quién eres?"

"Soy aquella locura que habita en tu ser, soy tu pasado, presente y futuro. Condenado a vagar por los rincones de tu alma, pues buscando a la Flor estoy, mas su luz ha desaparecido en el vil castigo del olvido."

"No estoy de humor para más cosas. He visto como un niño es asesinado ante mis ojos y..."

"¿Y qué? Has matado a varios con tus propias manos, masacraste a naciones enteras y no tuviste piedad en el pasado. Aun con esto, ¿Te atreves a sensibilizarte por ver a alguien morir frente a ti?"

"No fue solo la acción, sino el modo de ejecutarla."

"¿Qué tiene de especial?"

"Ojalá lo supiera. Espera, ¿Por qué dices que he masacrado a naciones?"

"Demian vive en ti. Puedo ver cómo ambos se unen en un solo ser. Maldito estás, pues tus plumas han sido devoradas con éxito. Ahora, sabueso infernal, cazas aquello que se presente ante ti, no eres más que un perro que ha cambiado su naturaleza, construyendo su propia paradoja."

"No sé de qué hablas, nunca he entendido a la perfección las palabras de los que habitan aquí, jamás les encuentro lógica, y ahora mi propia voz ha decidido entrar en aquel juego de los acertijos. ¡Vaya vida llevo!"

"Éste es el lenguaje que nos rige, su encriptación solo está en la negación del receptor. Niegas ver aquello que te suplica ser reconocido, ignoras lo que has perdido, mas anhelas encontrarlo de nuevo. Errores en tu camino hay de sobra, pero el error es de humanos, no existe quien no haya cometido equivocaciones en sus acciones."

"¿Vienes a darme un discurso para que me reanime?"

"Aves me impiden llegar a mi Flor, graznidos ensordecedores ocultan mis gritos en la oscuridad. Elimina aquello que te impide volar, mas no deseches las secuelas que te dejen, pues son las llaves Dimensionales. Tu Que Buscas, encuentra lo que se te arrebató y, siguiendo el orden, evita que llegue la Flor al funesto despertar."

"Eso no me dice nada. Siempre con sus putas palabras sin sentido, como si yo entendiera alguna mierda de lo que dicen. Solo déjame dormir, déjame solo, sal de mi cabeza."

"Te has quejado de la soledad y ahora la quieres de vuelta. Como en aquel día, ella dijo que le prometieras el no desistir. El miedo te consumió y aceptaste sin tartamudear. Dime, ¿Dónde está ella?, ¿Te sientes feliz al haber cumplido tu deseo?"

"¡Cállate! No me importa quien seas, solo cállate. Ya he tenido suficiente por hoy, es más, ya he tenido suficiente de todo esto: Pelear a diario contra criaturas sacadas del culo del Diablo, trabajar sin descanso día y noche, cargarme una melancolía de mierda, que sepa de dónde viene, pues no recuerdo la mayoría de las cosas. Siento que por más que camino, no llego a ningún lado, por más que me esfuerce, siempre hay algo que lo arruine todo. Pido estar solo porque ya estoy cansado de perseguir un caballo que nunca alcanzaré. Por más que lo pienso, siento que ya he vivido esto, siento que hay algo que quiere despertar, pero, cuando está a punto de hacerlo, desaparece, dejando detrás una depresión que intenta consumirme. Hay un fuego que se enciende en mi interior, lo siento crecer cada día que pasa. Dicen sobre una Flor, sobre su posible perdida, cercanía o existencia, como si fuese el objeto más valioso que ha llegado a existir. Yo les digo: Jodanse. Una semana y ya me he desesperado, una puta semana de seguir con su puto juego. Ya no más, ya Nunca más." 2 voces acompañaron a la mía.

Ya no escuché la otra voz, solo el viento que soplaba y el latir de mi corazón. Lentamente, me quitaba los cobertores y me dispuse a comer y beber. Luego, leí mi diario desde el primer día, hasta el ahora. He intentado darle sentido a las palabras que me han dicho, pero solo llego a una sola conclusión:

"Algo pasó y pasará de nuevo. El ayer y el mañana son desconocidos, su misterioso ser está ligado al presente, al aquí y el ahora. Así como los acertijos, mi pasado es confuso, mi futuro se me es mostrado, pero no logro descifrar lo que me dice, como si solo fuesen fragmentos al azar que pueden suceder."

"Todo eso se une en tu presente, puesto que éste es el resultado de tu pasado y el comienzo de tu futuro. Como un lector, pasas las páginas de este libro interminable, consumido entre el tiempo y olvidado por su sucesor. Esto lo logras desde algo tan ajeno, pero a la vez tan familiarizado a ti." Esta vez era el cuervo quien hablaba.

"Dijiste que las hojas en blanco me darían la oportunidad de decidir lo que sería, soy y seré. Escribo con un objetivo sobre este cuaderno, sin detenerme a ver lo que realmente simboliza. Más allá de un simple recordatorio, aquí está lo que fui. En cuerpo presente me encuentro, he aquí lo que soy..."

"Sumado a esto, toma nuestras profecías, las voces que escuchas, los acertijos, el futuro que hemos labrado, eso es lo que serás."

"Pero, ¿Cómo sabré cuál es mi futuro?, ¿Cómo sabré hacia dónde me llevan mis pasos? Ni siquiera sé que significan los acertijos."

"Es cosa de percepción."

"Algo me dice que eso también es un acertijo... Espera, la percepción se da en mí, el ahora. Lo que influye en el rumbo del acertijo, el mañana."

"Ramificaciones divididas auguran el destino escrito, la marca de Caín, el marchitar de la Flor y el renacimiento imperecedero. Decide, pues el ultimo aullido se acerca."

"Espero estar listo para ello, no perecer en el camino y guiarme por el viento."

"Alone, dentro de poco sabrás la verdad de todo. Por el momento, bastará con esto." Un objeto extraño cayó en el centro del refugio. Fui hacia este y lo tomé.

"Esto es..."

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