[1] αgυѕтᎠ|| ym. [OmegaVerse]

🐺 Capítulo 44:Yoonji and the brand🐺

Un nuevo día, el Alfa se había ido a su ensayo no sin antes dejarle una nota de despedida a su Omega la cual el castaño al despertar recibió gustoso. El día estaba soleado pero el clima estaba frio, el Omega de estatura pequeña y cabellera castaña se levantó para ir a la cocina hacer el desayuno. Cuando salió de la habitación que compartía con el Alfa, en medio del pasillo se oyó sollozos, sollozos lastimeros que venían de la habitación del frente. Desde que YoonJi llegó, la Alfa se había quedado en la casa aunque a veces se la pasaba más en la calle que en el departamento, y eso le extrañó a JiMin. Tocó la puerta suavemente, pegó su oreja a la madera y escuchó más llantos y no podemos olvidar el olor, el aroma era fuerte pero deprimente, ese olor característico de YoonJi, Menta y Té verde, era tan deprimente y tímido.

— ¿YoonJi Noona? —. Frunció el ceño. La puerta no fue abierta y no había señal de que la Alfa estuviera levantada para ir en abrirla.

JiMin pensó, que tal vez, la Alfa estuviera en celo y por ello sollozaba, pero él recordaba que los celos de los Alfas no era tan fuerte como el de los Omegas, y eso lo sabía por YoonGi que pasó su celo con él.

No quiso molestar más y no insistir de más. Se alejó de la puerta y caminó hasta la cocina, después de todo, no era bueno estar con un Alfa en celo, y menos si no es tu pareja.

Preparó algo ligero, hizo el desayuno de la Alfa para llevársela. Fue interrumpido por el teléfono que sonaba.

— ¿Hola? —. Dijo nervioso.

—Buenos días Omega —. Sonrió al escuchar la voz ronca del Alfa, su estómago dio un vuelco.

— ¿Cómo está Alfa? —. Dejó el plato con el desayuno de YoonJi en la mesa y después se sentó en la silla enfrente de la encimera.

—Cansado, las prácticas han estado duros —. Se oyó un suspiro al otro lado de la línea. — ¿Y tú? —.

—Muy bien...Yonnie ¿Hoy es el celo de YoonJi? —. Preguntó. Quería saber si sus suposiciones eran ciertas.

—No sé ¿Por qué lo dices? —.

—Por que cuando desperté y pase por el pasillo, se escuchó un sollozo y pues —. Frunció su naricita. — Además que el aroma es más fuerte pero es algo deprimente —.

—De todos modos no te acerques, si esta en celo no tardará en cesar —. Dijo suave. — Necesito colgar, te llamare después cariño —. Después de despedirse cortaron la llamada. JiMin quedó pensativo, YoonGi le había dicho que no se acercara a donde YoonJi pero quería ayudarle pero si estaba en celo eso significaba estar en zona de peligro.

Tomó el plato del desayuno de YoonJi y subió las escaleras, no sin antes tomar algunos supresores de Alfa que pertenecía a YoonGi. Tocó la puerta, no había sollozos pero el fuerte olor estaba presente.

—YoonJi...—. Puso su oreja en la puerta, esta vez sí había sonidos de pasos, la puerta se entreabrió y vio a la Alfa, podía ver sus ojos rojos señal de que había llorado. — T-te traje tu desayuno —. Tartamudeó.

—N-no tengo hambre...Gracias —. Quiso cerrar la puerta pero la mano de JiMin se lo impidió.

—Te traje supresores...—. Pudo ver, entre la oscuridad de la habitación, el ceño fruncido de la azabache.

— ¿S-supresores? —. Su voz era tan lastimada. — ¡A-ah! —. Gritó, tocándose su hombro.

—YoonJi ¿Qué sucede? —. Estaba preocupado por la Alfa, estaba más pálida de lo normal. Aunque no se la llevara bien con ella por ser la ex de su Alfa, ella era una gran persona y por ende le preocupaba.