🐺The End of a beginning🐺

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—¡JiMin! —. El Alfa soltó el arma y corrió hasta el Omega, quien luchaba por sentarse. — ¡Por la puta, JiMin! —. Abrazó fuertemente al castaño. JiMin escondió su cabeza en el cuello del rubio, abrazándolo.

Extrañaba eso.

Extrañaba el aroma a Menta y Canela, Extrañaba el calor de su Alfa, Extrañaba a su Alfa.

—Yoonie —. Susurró, las lágrimas caían sin parar, el nudo en su garganta era tan grande. Su corazón latía fuertemente como si corriera una maratón, seguía asustado.

—Ya estoy aquí, amor, ya estoy aquí —, Besó la frente del castaño. Bajó las manos hasta el abultado vientre de JiMin, Tragó en seco. 

—Lo siento...—. Sollozó.

—No, amor, amor. No te disculpes —. Puso sus manos en el bulto, sintiendo como la patean. Sonrió nostálgico.

Alzó la mirada, viendo detrás de JiMin.

El cuerpo tirado de JiSoo.

— Mamá...—. Susurró incrédulo.

—¡Mamá! ¡Mamá! —. La voz de YoonJi se escuchó, los gritos que soltaba, los gritos y los sollozos de lamento. Su madre estaba tirada sin vida. — Mamá...—. Se arrodilló con miedo, con miedo de que todo fuera una mentira. Tomó el cuerpo. — No,no,no,no...—.  YoonGi veía todo, estaba congelado, su madre estaba muerta.

—Ella me salvo —. El Alfa miró a su Omega, y lo abrazó con fuerza, siendo correspondido.

—¡Maldito! ¡Eres un maldito! —. YoonJi se levantó con furia y pateó el cadáver de JaeSeok, que estaba en un mar de sangre. — Eres un maldito ¡Espero que te pudras en el infierno! —. No paro en patearlo. Algunos agentes la sostuvieron para tranquilizarla.

—Jóvenes Min —. Un agente apareció en el umbral. — Una ambulancia ya viene en camino —.

—Gracias —. Susurró YoonGi. No quería despegarse de JiMin para nada, no quería abandonar ese calorcito que lo hacia sentía tan bien.

Jimin estaba igual.

No quería alejarse de la protección que le brindaba su Alfa, no quería salir del cuello y alejarse de nuevo de ese rico aroma de Menta y Canela. Las manos del Alfa y las de él estaban entrelazadas en su vientre, estaban juntos.

—Perdón por ser un mal Alfa, minnie —. Susurró en su oído. JiMin negó.

—No, no lo eres. Yo fui malo por nunca decirte la verdad — Su voz delataba el nudo que tenía en su garganta. Se sentía como un peor Omega para su Alfa. Su Alfa merecía a un Omega igual de espléndido como él.

—Eres un Omega valiente JiMin, te defendiste bien con un bebé dentro —. Las suaves caricias que le brindaba YoonGi en su barriga era tan satisfactorio, su bebé patio. — Nuestro hijo...—

—Nuestro —. Repitió. — Perdón por lo de JiSoo — YoonGi suspiró, su vista se poso en el cuerpo sin vida de su madre siendo abrazada por YoonJi, quien estaba destrozada.

—Pense que eras tú...—. Susurró con evidente miedo. — No digo que estoy felíz que fuera ella, por no lo es y nunca lo sera, porque al fin y al cabo es mi madre, y ella tuvo que mentir para salvarnos —. Besó las hebras castañas de JiMin .

—Ella lo planeó todo, quería dar su vida para salvarme a mí —. Otro dolor en su parte del vientre le sacó un jadeó. Los dolores no pararon hasta que sintió un dolor colosal que lo hizo gemir del dolor.

[1] αgυѕтᎠ|| ym. [OmegaVerse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora