la guardia del leon. Un Amor Inesperado

parte 1

Todos se encontraban en las rocas del rey celebrando que al fin había paz en las praderas y dando la bienvenida a la reina del arbol de vida, Quien dentro de poco volvería a su hogar.

- si que son muy animados en las praderas - le comenta rani a kion, quien estaba sentado junto a ella no prestando atención del todo. El joven se veía pensativo. - ¿qué sucede kion? -

- ¿eh?.... ¿Qué... - el joven se dio cuenta de que rani estaba hablando con él. Al darse cuenta decidió disculparse - lo siento rani... Solo estoy pensando. -

- eso es obvio. - comentó mientras ambos se dirigían hacia la guardia del león. Quienes estaban acompañados de sus respectivas parejas, Bunga y Bunga, Fuli y Azaad, y Ono, Besthe y Anga.

- esta fiesta es de lo mejor - comentó bunga mientras su mejor amigo se hacercaba con rani - tantos animales y deliciosos insectos juntos... No podría pedir algo mejor - dijo llevándose unos cuantos a la boca causando que su acompañante riera.

- te lo creo bunga - dijo kion acercándose a sus amigos.

- y yo creo que debemos volver a mi reino - dijo rani mirando a su guardia real. Quienes se divertían pero ya habian descuidado por mucho tiempo su territorio.

- ¿no pueden quedarse un poco más? - preguntó fuli, ya que la celebración no había terminado.

- una reina no debería abandonar su reino por mucho tiempo - dijo algo triste por tener que irse pero era su deber.

- los voy a extrañar - dijo kion viendo a su nueva amiga.

- no tendrías que extrañarnos si... Vinieras conmigo. - dijo rani mirando a kion a los ojos tomándolo algo desprevenido, aunque no tanto ya que ambos sentían algo por el otro, pero kion no estaba seguro de si era lo suficientemente fuerte.

Todo el ambiente se tensó un poco entre los amigos. La guardia no quería que su líder se fuera. Lo extrañarían pero sabían que algo pasaba entre rani y kion.

- eso no lo esperaba... Que incómodo - dijo bunga pensando en voz alta rascando su pelaje.

- ¡¡¡bunga!!! - gritaron todos los presentes al nombrado.

Kion aunque no quería decidir, sabía que debía hacerlo: rani o las praderas.

- rani ¿podemos caminar un momento antes de que partas? -

Rani le preocupó que dijera eso. Esparaba a que aceptara de inmediato pero sabía que el joven sentía una gran responsabilidad por cuidar de las praderas. - claro kion -

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Ambos jóvenes leones caminaron por unos minutos alejándose de todos los animales que festejaban para poder estar un momento a solas y así poder pensar.

el ambiente incómodo se había suavisado pero no desaparecido.

Kion al fin decidió detenerse, por lo que rani hizo lo mismo - ¿kion, que sucede? -

Kion no quería herirla. Deseaba poder tener una tercera opción pero no la había - rani... No puedo ir contigo, lo siento. -

rani sabía que existía la posivilidad que kion se quedara, pero esperaba a que cambiara de opinión por todo el tiempo que pasaron juntos.

- yo... Lo entiendo kion... - rani estaba devastada y kion lo notaba. No quería herirla, la quería mucho como para hacerlo.

- rani... En verdad me gustas mucho, pero no puedo avandonar las praderas y... A mis amigos y familia. De verdad perdóname - dijo kion habrazando a la joven tratando de ayudar.