Parte 1: East End

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NOTA DE LA AUTORA: ¡Holaaa! aquí os dejo otro de mis fics terminados, de temática omegaverse, muuuy oscuro y dramático, no apto para corazones sensibles XD que tiene su segunda parte en el proximo fic que subiré titulado "Dioses a medias", espero que a pesar del drama, disfrutéis de este retorcido fic en el que toda sorpresa en cada capitulo es poca.

*Contiene mpreg, lemon, lenguaje explícito. Lo publiqué anteriormente en AY, y ahora para wattpad.


"La voz prohibida"

1-East End

**Renji**

Es curioso....pese a que ya han pasado siete años desde aquello, aún acaricio el hueco vacío al lado de mi cama como si aún pudiera sentirle. Lo primero, un gruñido, después, la decepción. Y por último la soledad.

Me incorporo meneando la cabeza para intentar no pensar en mi propia desgracia y entro al aseo para coger un paño húmedo del barreño que tengo con agua. Lo paso por mi piel desnuda notando cómo mi piel se eriza por el frío hasta dejarme entumecido, aunque me importa poco. Ya pocas cosas me hacen sentir alguna emoción. Dolor, angustia, tristeza, alegría...

-¡Papá! Buenos días- lo único que me obliga a sonreír tanto que me duelen las comisuras de los labios al estirarse, es ver los preciosos ojos azules de mi hijo que me observan con un cariño arrasador.

-Buenos días, Nova ¿has podido descansar?- mi hijo de apenas doce años asiente mientras empieza a recoger mi ropa tirada por el suelo. No me gusta que actúe de criada conmigo, pero sé que su intención solo es ayudarme.

-Anoche llegaste muy tarde, papá.-

-Siento haberte preocupado, hubo muchos clientes en el burdel-

Sí, lo he dicho sin tapujos, un burdel. El único negocio en el que he podido escalar a lo más alto y solamente porque es la herencia que me dejó su antiguo dueño. Desearía no haber recibido nunca un regalo así, pero en su memoria...tengo que mantenerlo a flote por todos los que trabajan bajo mi protección.

-Hoy vendrá Kisuke para la lección de japonés. No me marcharé hasta que venga-

-Papá ya no soy un niño, puedo quedarme solo....- no, no puedo dejarle solo. No en esta edad tan delicada en la que tiemblo al pensar cuando estallará. Cuando mi hijo dejará de ser un niño para convertirse de golpe en un hombre. Un hombre...especial.

-¡Ohaiyo familia!- se me pone un tic en la ceja al recibir en mi pequeño apartamento a un hombre realmente extravagante como Urahara Kisuke. Lo poco que sé de él es que es un gran científico y adivino que le ha dado en estos últimos años por enseñar a los niños de nuestro barrio algo de cultura. El que más le conocía cuando aún vivía, era él...

-Estás muy guapo esta mañana, pequeño petirrojo- me crispa cuando Urahara acaricia el pelo rojo de mi hijo haciéndole sonrojar tanto que nos extraña a ambos. Urahara me mira de reojo y yo chasqueo la lengua mientras camino a la salida para coger mi abrigo.

-Renji ¿ya ha empezado, verdad? Son los primeros síntomas, es cuestión de tiempo que...-

-Ya lo sé. Llevo preparado para esto desde hace años-

-¿Temes que sea un omega?- siento como el corazón se me encoge en el pecho y niego cerrando los ojos.

-No. Así sería más como su madre-

-Aunque tú los admires, sabes que son una lacra para la sociedad- el estómago se me revuelve con ese insulto y encaro a Urahara pese a que éste ni se inmuta por mi reacción. –Deberás estar preparado para defenderle ante las adversidades de este mundo, Renji-

"La voz prohibida"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora