Ya que Nico dice que Brickson es más real que Jasper... Pues, chicos, aquí lo que hizo Nico con Will el otro día:
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Reyna había llegado de visita al Campamento Mestizo por las juntas ocasionales que se tenían. Después de los deberes, fue a buscar ansiosa a Nico, a quien encontró sentando a fuera de la cabaña de Apolo.
—Hola Nico.
Saludó la pretora al azabache, acerccandose a él con una sonrisa, en cuanto estuvo a su lado no dudo en abrazarlo.
Nico correspondio a este abrazo fuertemente.
—Oh, hola Reyn...—fue lo único que alcanzo a decir ya que Will salió de la cabaña.
—Es mío. Sombritas, vamos a adentro, órdenes del doctor. —tomó a su novio por la cintura llevándolo dentro de la cabaña sin darle tiempo de despedirse de la pretora.
Reyna se quedó extrañada, sin embargo tenía más amigos a quienes saludar. Al dar la vuelta a la cabaña encontró a Jason, Percy, Piper, Annabeth, Frank y Hazel espiando por la ventana. La curiosidad de saber le invadió.
—Eh... hola, chicos— susurró la romana acercandose al grupo.
—Shhhhh. Solangelo–respondió Percy, tratando de ver algo.
—Bah, no hay nada interesante—Dijo Hazel, bajando de los hombros de su novio— Hola, Reyna.
Quienes estaban fuera de la cabaña, comenzaron a hablar con Reyna, hasta que después de unos minutos se comenzaron a oir gritos en italiano.
Los chicos, al escuchar aquellos gritos, todos sin excepción, se quedaron estupefactos por unos segundos y comenzaron a pelear para obtener el lugar en la ventana y poder ver que era lo que sucedía.
—¡Bro!—chilló Jason, entusiasmado controló los vientos para observar por aquella ventana— Nico no trae polo ni pantalon, esta boca abajo sobre la cama.
Todos se volvieron locos en ese momento, querían saber que era lo que estaba ocurriendo con aquellos dos dentro de esa cabaña.
—Vamos, ¿Qué hay de Will?—Preguntó Annabeth, algo curiosa.
Frank volvió a subir a Hazel a sus hombros. — Wow... Está igual sin camisa, esto se pone interesante.
Piper estaba evitando gritar de emoción mientras que Reyna se acercaba a la puerta para escuchar lo que ocurría.
—¿Por qué habrá gritado si aún no hay acción? —Preguntó, entre risas, Leo—Así como yo con Calipso... Ah, que, eso no era...
Todas las miradas se dirigieron hacia Leo y su mejor amiga susurro —Picarones... ¿No que no habían hecho nada aún?
—Mira quien lo dice, tus gritos se escuchan por doquier—Dijo el latino para defenderse.
Por un momento habían olvidado lo que hacían y se centraron en aquella discusión. Cuando de un momento a otro se abrió la puerta. Nico venía tocandose el trasero y un gesto de molesto, a su lado el semidios que era su novio tomando su mano con una sonrisa en el rostro.
—¿Qué paso ahí?—Percy corrió ansioso a verlos.
—Si, di Angelo, exigo una explicación—Gritó la pretora— Soy tu mejor amiga, debo saberlo.
De inmediato, todos los rodearon pidiendo saber que era lo que ocurría, Will solo reía y Nico lo vio con una mirada asesina, pero se animó a hablar —No es de su incumbencia.
El hijo de Apolo soltó una carcajada —Le puse una inyección a Nico, como no quiere comer frutas ni verduras de alguna manera debe obtener vitaminas para estar sano.
El silencio albergó al resto de los chicos pero de inmediato comenzaron a reír al tiempo que el hijo de Hades se ponía completamente rojo, así que su novio acunó su rostro con sus manos y lo besó tiernamente mientras los demás, entusiasmados, pronuncianron un "Awwwww" y fueron dejándolos solos frente a la cabaña 7, dandoles el espacio que debían haberles dado.
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