No podía moverme, estaba muy agotado. Con suerte podía coordinar mis pasos. Me pesaba el cuerpo de una manera extraordinaria, solo quería dormir un siglo. Arrastrando los pies por el pasillo me encontré dentro de la cocina, el olor a fruta en mal estado me causó arcadas. Debí ordenar la mesada antes de irme. Con el aire contenido en mis pulmones, busqué deshacerme de la piel del cítrico que dejé reposar tres días; me limpie las manos con el primer paño que halle dentro del cajón.
Abrí la ventana con el antebrazo notando mis labios secos. Definitivamente el calor y el cansancio que traigo no es agradable.
Con el vaso apretado en mi mano izquierda, la restante se encargaba de tomar la botella de agua fresca, y llenando el vaso con el líquido mi atención cayó sobre el calendario en la pared: once de octubre del año actual.
Frotando mi rostro bebía del agua con apuro. Faltaban detalles que necesitan de atención; mientras mejor sea nuestra organización menos probabilidades de fallar tenemos. Aun así, ese treinta por ciento es relativo y puede hacernos desembocar en un desastre. No hablo de una rutina, esto es arriesgado. Pensé en ello antes de dedicar el resto del día a recuperar mis energías. Seis meses en este estilo de vida estaban siendo un desgaste para mi cuerpo, las horas de sueño eran casi nulas desde hace tiempo.
Esperaba la primera y única llamada con las coordenadas claves: ubicación, hora y situación del objetivo. Esa información, solo se nos era ofrecida como mínimo nueve horas antes, de esa manera se mantiene el perfecto orden. Minutos más tarde el teléfono comenzó a vibrar dentro de mi bolsillo; conteste la llamada.
—Revisa a tus colegas: mantenlos a raya, dispuestos y atentos. No quiero ninguna dificultad si puede evitarse ¿Está claro? —guardé silencio mientras me permitía tomar las indicaciones, un poco más de lo mismo hasta el momento.
—Copiado —busqué entre mis papeles un anotador con la carilla en blanco—. Coordenadas —pedí tratando de maximizar mi tiempo, en la hoja estaba escribiendo tal cual él me indicaba.
Finalice la llamada repasando mentalmente lo que no podía olvidar. Doce de octubre; 08:52 am.
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LOBO (+18) [Noches oscuras 1#]
Ficção AdolescenteDos puntos opuestos, un día en especial. Una deuda por saldar los hará encontrar de la forma más oscura e impensable. Stella sabrá desde el primer momento que Cedric es todo lo que tiene. El peligro sucumbe su vida ahogando cada referencia de esp...