Gemelos.

23.

Acompañe a Phoebe a su casa después de nuestra “cita” si la había pasado muy bien con ella. Es una chica divertida, linda y cariñosa ahora comprendo porque mi hermano Jake se fijo en ella desde el comienzo hasta yo la había notado lamentablemente él la reclamo como suya, no podía hacer nada para contradecirlo a veces me sentía como un verdadero cobarde por tenerle miedo pero se las cosas horribles que Jake es capaz de hacer no va a dudar hacerlas conmigo aun si llevamos la misma sangre.

Me gustaría decirle a Phoebe que soy Tate y contarle los planes de mi malvado gemelo pero no podía hacerlo de todos modos si lo hacia quizás ella no iba a creerme me llamaría loco y luego llamaría a la policía.

Siento un escalofrió en el cuerpo cuando escucho su voz en mi cabeza.

“Ni se te ocurra, Tate”

Trago saliva con dificultad poniéndome nervioso sin darme cuenta por donde voy tropiezo con la acera casi me voy de boca contra la acera pero Phoebe me agarra del brazo antes de que pase, malditos lentes de contactos no veía una mierda con ellos.

—   ¿Estas bien?—Ocultando una pequeña sonrisa.

—   Si, es que no vi el muro—Me encojo de hombros.

—   Creo que necesitas lentes también—Dice bromeando.

—   No ¿Parecerme al nerd de mi gemelo? Ni de chiste—Sacudo la cabeza.

—   ¿Por qué eres tan malo con Tate?—frunce el ceño molesta cosa que me sorprende.

—   Porque lo es ¿Por qué te importa?

—   Eres muy cruel con él, Jake. Tate también merece respeto independientemente que sea nerd o no, es un chico inteligente y dulce además es tu hermano deberías quererlo y apoyarlo no tratarlo como una basura.

Quedo boquiabierto en la manera de como Phoebe me defendía por un momento desee de que estas mismas palabras se las estuviera diciendo a Jake y no a mi. Porque esa es la forma como él todo los días me hace sentir como una basura como si me odiara. Siento que mis ojos se llenan de lagrimas rápidamente agacho la cabeza avergonzado no quería que ella se diera cuenta.

—   Lo siento, Phoebe. He sido un estúpido se que Tate es mi hermano, no debería tratarlo de esa forma pero tu no sabes lo que pasa realmente entre nosotros.

—   ¿Qué pasa entre ustedes?—Pregunta confundida.

—   No quiero hablar de ello— Por suerte llegamos a su casa la acompañe hasta la puerta, suspiro largamente—La pase bien contigo lastima que tuve que cagarla con lo de Tate, en serio perdóname.

—   Esta bien, Jake—Sonrió levemente— Yo también la pase bien contigo—Se inclina para darme un beso en los labios—Gracias por todo.

—   Hasta luego, princesa—Le sonrió esperando a que ella entre a su casa.

Tiene después llego a mi casa que comparto con mi gemelo, él esta sentado en el sofá bebiendo una cerveza con los pies montados encima de la mesa viendo seguramente algún partido de futbol americano había dejado de ir a la cita con Phoebe para estar todo el día echado en casa, aprieto la mandíbula disgustado.

—   No es cierto, fui a recolectar a Minnesota mientras estabas con Phoebe.

—   Odio que hagas eso—Gruñe irritado.

—   ¿Crees que me importa?—Dice indiferente dándole otro trago a su cerveza—La gente es patética, me tocaron dos suicidas—Sacudiendo su cabeza—Un imbécil se lanzo a los rieles del tren si vieras como quedo su cuerpo echo mierda—Se ríe a carcajadas como si fuera lo mas divertido del mundo.

A veces me sorprendo de lo insensible que era Jake respecto a la forma de morir de los humanos.

—   ¿Cómo te fue con Phoebe?

—   Bien—Digo encogiéndome de hombros tomando de la nevera un envase de agua.

—   ¿Bien? ¿No te la follaste, cierto?—Frunciendo el ceño.

—   No me la folle—Digo molesto.

—   Mas te vale a esa nena la quiero en la cama para mí pero me imagino que la besaste.

—   Si nos besamos ¿Qué esperabas? Odio cuando me haces pasar por ti cuando sales con mujeres.

—   ¿No serás gay, no?—Dice bromeando—Lo digo porque aun no te follas a Jazmín eso que esta bien buena la muy perra.

—   No hables de ella de esa forma—Apretando su mandíbula.

—   ¿Por qué no?—Arqueando una ceja aun con una sonrisa burlona en su estúpida cara— ¿Estas enamorado de Jazmín?

—   No es de tu incumbencia—Digo mientras iba a subir las escaleras, Jake llego a mi lado en un segundo tomándole del cuello apretando sus dedos con fuerza.

—   Todo lo que hagas es mi problema, si tu fallas yo fallo. Perfectamente puedo meterme en esa cabecita tuya y leer tus pensamientos—Dice tocando mi frente con su mano desocupada— Mas te vale que no le digas a Phoebe lo que es y lo que le haremos.

—   Ella no tiene la culpa—Digo tratando de zafarme de su agarre pero él es mucho más fuerte que yo.

—   Tampoco nuestra sin Phoebe nosotros estaremos muertos, Tate.

—   Ellos entenderán. — Queriendo que entrara en razón.

—   No entenderán, si pagamos nuestras deudas con un alma más. Seremos libres y podremos volver a casa.

—   Jake nunca volveremos a casa, nos desterraron. Estamos condenados a estar en la tierra ¿Por qué no lo entiendes? Ahora somos mortales.

El golpe llego de forma inesperada tumbándome al suelo puedo sentir el sabor de mi sangre en mi labio, Jake frunce el ceño al notarlo se había dado cuenta que podía lastimarme que poco a poco nos hacíamos mortales.

—   No quiero ser un maldito mortal no quiero morir como los patéticos humanos, recolectare todas las almas necesarias para volver a casa con o sin ti.

Luego sale de la casa cerrando de portazo, dejándome totalmente adolorido pero no es un dolor físico sino emocional, me dolía a veces ver que mi hermano se sentía infeliz porque a pesar de que quería aparentar lo que no era, él también es débil.

¿Que les parece? ¿Se lo esperaban? Alguien por ahi comento ayer que creia que eran angeles o vampiros mmmm. ¿Les gusta la idea? ¿Que creen que sean en realidad? Si comentan y votan subo otro capitulo en un rato ;)