Gemelos.

41.

Se que fui bastante brusco al decirlo así pero estaba cansado de mentirle, ella me mira como si me hubiera vuelto loco y no la culpo cualquiera estaría de esa forma en su lugar.

— ¿Que? — Pregunta casi sin voz alejándose un poco de mí, sus ojos se estaban bien abiertos mirándome con confusión.

— Soy un dios inmortal... — Repito nuevamente— Bueno lo era. O eso creo, no lo se— Sacudo la cabeza— Ya no me siento como antes, he perdido casi todos mis dones.

— No entiendo nada— Dice atónita — ¿Eres un dios? ¿Como que eres un dios? — Se levanta del sofá ahora parece asustada—  ¿Por que me mientes con algo tan absurdo? Estoy cansada de esto, Tate. Por un momento te creí ese discurso que me amas, no soy tan estúpida de creerte eso.

— No estoy mintiendote, Phoebe. Es la verdad mi hermano y yo somos dioses nuestro padre es Hades el dios del inframundo.

— Eso todavía es mucho mas absurdo, Hades no tuvo hijos no hay ninguna historia que respalde lo que dices— Ahora esta enfadada y bastante.

— Pues si nos tuvo,  Hades secuestro a nuestra madre la obligo casarse con él con el tiempo aprendió a amarlo bueno a su manera y de ahí nacimos nosotros. Los humanos no saben toda la historia del Olimpo dicen saberlo todo pero no es así.

— Lo siento, Tate. No puedo creer esta cosa tan absurda que me estas diciendo, debo irme aquí definitivamente estas loco y Jake también— Toma su bolso para irse camino detrás de ella agarrándola del brazo.

— Puedo enseñarte que te digo la verdad , solo dame un segundo.

— Por favor Tate ¡Sueltame! ¡Quiero irme a casa!

Me separo de ella rogando que funcionará hace tiempo que no lo hacia pero quería que Phoebe me creyera y confiara en mí.

Retrocedo lo más que puedo coloco mis brazos a lados abriendo mis manos y cierro los ojos con fuerza.

Solo pensando en una cosa ¡Fuego! Cuando abro mis ojos tenia llamas azules y amarillas fluyendo de mis manos comienzan a expandirse por mi cuerpo y los muebles alrededor de la casa se movían elevándose del suelo.

Miro a Phoebe estaba boquiabierta observando como mi cuerpo estaba en llamas en un azul vibrante con reflejo de humo negro era el fuego del inframundo hace tiempo que no hacia esto algo dentro de mi comenzó a doler  y el fuego desapareció rápidamente, no entendía lo que había pasado ahora estaba mareado.

— ¿Estas bien, Tate? — Dice preocupada ahora estaba en el suelo tratando de recuperarme sin duda había perdido mis dones y ahora me estoy convirtiendo en mas humano.

— Si lo estoy— Ella me ayuda a levantarme del piso y me apoyo de la pared buscando aire aun me sentía algo débil.

— No puedo creer lo que hiciste— Me mira atónita y asustada— Pudiste hacer fuego con tus manos y todo alrededor se movía.

— Es uno de mis dones como dios e hijo de Hades puedo controlar el fuego del inframundo.

— Si eres inmortal ¿Que fue lo que paso hace un segundo? Pensé que te habías desmayado.

— Mi hermano y yo tenemos mas de 1,000 años viviendo entre los vivos, fuimos desterrados.

— ¿Por que? — Murmura en voz baja.

— Jake se enamoro de una mortal que conoció mientras recolectaba almas pero se le olvido de ella iba a morir cuando sucedió él trato de recuperarla ya que su alma era pura por ende iría al paraíso. De todos modos logro entrar al Olimpo pero antes de que pudiera ir por ella lo atraparon, Zeus le dijo a nuestro padre que mi hermano merecía un escarmiento por eso lo desterró.

— ¿Por que a ti?

— Me pidió que fuera con él no podía dejarlo solo estaba sufriendo, quiero mucho a Jake mas de lo que quiero a mi padre. Tenemos una conexión muy fuerte puedo sentir cuando esta enojado, triste, alegre o decepcionado es porque somos parte de uno.

— ¿Por que crees que ya no eres inmortal?

— La única manera que teníamos de volver es que Jake recolectara 300 almas puras en la tierra no fue sencillo los humanos se corrompe muy fácilmente con la maldad pero todo tiene su contra mientras mas tiempo estemos aquí nos hacemos inmortales y perdemos nuestros dones.

— Y eso es lo que esta pasando contigo.

— Fue mi decisión dejar de hacerlo.

— ¿Por que?

Me acercó a Phoebe envolviéndola con mis brazos en su cintura me sorprende que deje que la toque por un momento pensé que iba a salir corriendo pero se había quedado conmigo ya no parecía tener miedo.

— Por ti— Susurro inclinandome hacia sus labios que pedían a gritos ser besados no dude en hacerlo, ella me respondió un poco tímida al principio pero sus brazos ahora están alrededor de mi cuello.

Mientras beso a Phoebe, veo a Jake con una daga y Jazmin en el suelo suplicándole que no la matara mientras llora.

— Jazzy — Murmuro asustado cuando me separo de Phoebe y ella frunce el ceño sin entender.

— ¿Que sucede?

— Jake va a matar a Jazmín ¡Tenemos que irnos!

La agarro de la mano salimos corriendo de la casa para subir a mi auto e ir a parar a mi hermano antes que le hiciera daño a mi amiga.