Esperame |Secuela de Confia en mi|

Capitulo 27

Faltando cinco para las cinco llega Pedro con un vaso lleno de agua y mi pasta, le agradesco antes de recibirle y bebo la pasta. Despues de tomarmela vuelvo a acostarme en la silla para tomar el sol, Annie, Santiago y Nicolas estan en la piscina hablando, Pedro esta en la casa arreglando unas cosas. El sol esta en su punto perfecto, no esta muy caliente para hacerme sentir sofoca, solo esta hay calentando lo suficiente.

-¿Opacando al sol? -abro los ojos y veo a Santiago alfrente mio.

-¿Disculpa? -pregunto mientras me siento en la silla.

-Te ves adorable America - cambia de tema, le sonrio dulcemente y lo miro directamente a los ojos -¿como has estado?

-Bien, ya no tengo mareos, pero ultimamente duermo y como demasiado -el se rie por mi comemtario mientras toma asiento en la silla que hay a mi lado.

-Es porque ya no eres una sola persona - me quedo mirando la piscina, mejor dicho, me quedo mirando a Nicolas, Annie intenta besarlo pero el le busca una excusa -¿como hizo Pedro?

-¿Como hizo que? - pregunto curosa, aparto mi vista de la piscina y miro esos calidos ojos azules, me intimidan un poco asi que vuelvo la vista a la piscina pero ni Annie ni Nicolas estan.

-America seamos sinceros, Pedro podria ser tu padre y aun asi te consiguio - el acerca su mano a mi rostro y acaricia mi mejilla, me siento incomoda asi que disimuladamente me alejo un poco - eres tan viva, tan fuerte, tan hermosa e inteligente, y aun asi estas con el.

-¿Santiago te sientes bien? -lo miro a los ojos y el se acerca despasio -¿que haces?

-Lo que e querido hacer desde que te vi - se acerca mas a mi rostro, me levanto de la silla rapidamente.

-¡¿Que te pasa?! -lo miro confundida, en todo el tiempo que a estado chequeando mi embarazo nunca demostro algun interes, nunca.

-Perdoname, es que -se pone de pie -no se que me pasa America, eres simplemente hermosa y se que con Pedro no eres feliz, quiero hacerte feliz, quiero que seas mia.

-Okay esto ya me esta alterando, no quiero generar una tercera guerra mundial por una estupidez como esta.

-No es ninguna estupidez.

-Oh, claro que si lo es, estoy a punto de casarme y agregale a eso que estoy embarazada, y tu vienes con esas babosadas.

-No me importa, amare a ese bebe como si fuera mio, te hare feliz cosa que ese idiota no podra hacer.

-Ese idiota es tu amigo - siento que mi cara se pone roja, mis musculos se tensionan y las ganas de ahorcar a Santiago crecen - quiero evitar problemas con Pedro por culpa de esto, asi que alejate y deja tanta maricada - me vuelvo a colocar la salida de baño y las chanclas, le doy una ultima mirada a Santiago y me voy.

Llego a la sala, me siento en un gran sofa cafe, es realmente comodo, aiento que mi cuerpo esta mas pesado, en especial mis parpados, cierro los ojos para descansar un poco.

-¿America? -siento que me mueven, me giro un poco para seguir durmiendo pero al sentir medio cuerpo al vavio abro los ojos rapidamente y me acomodo.

-Hola - digo con una sonrisa, Nicolas mira a todos lados antes de agacharse y besar cortamente mis labios -¿que hora es?

-Son las siete, te estamos esperando para cenar - me ofrese su mano la cual tomo como apoyo para levantarme.

-Al fin, estoy muriendo de hambre -toco mi vientre y siento una patada -correcion, estamos muriendo de hambre -Nicolas sonrie y besa mi frente.

-Vamos a comer, tengo que alimentar a mis dos mujeres -el toca mi vientre y en ese momento se siente una patadita.

Antes de llegar al comedor Nicolas suelta mi mano, todos nos estan esperando para comenzar a cenar, Pedro me indica que tome asiento entre el y Santiago, evito hacer mala cara y obedesco. Nicolas se sienta alfrente mio con Annie, ella le dice algo al oido probocando que Nicolas sonria, el le susurra algo al oido pero en lugar de que su sonrisa se vuelva mas amplia y brillante, se apaga un poco y sus ojos demuestran desilusion. Cortez y Aguilar llegan con nuestra comida, Aguilar coloca su plato alfrente mio y le agradesco; el delicioso aroma de la comida que tengo alfrente hace que mi estomago le suplique a mi cerebro que comienze a comer, corto un pequeño trozo de carne y lo meto a mi boca, tiene algun tipo de salsa que es mas que placentera para mis papilas gustativas, corto a mitad una de las papitas al horno con queso que hay al lado de la carne y me la como.