Capitulo 28: ¿Qué mierda tienes en la cabeza?

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Iba de regreso a casa, después de un largo día en el hospital, como residente tenía más responsabilidad, y es más agotador. Uso zapatos cómodos para trabajar, pero estuve corriendo por todos los pasillos hoy, no me siento bien para conducir, así llamé al chofer.

-Hija, al fin llegas.- me recibe con sus brazos abiertos, me deje envolver en sus brazos.

-Estoy super cansada, pero tengo hambre.-recorde que no había dado tiempo de almorzar.

-Le dire a Amanda que suba a tu habitación.- me dijo papá sacando su telefono.-Por cierto quería hablarte algo, contrataremos a alguien más para encargarse del aseo, tu sabes que Amanda lleva años trabajando con nosotros, y necesita una mano para que la ayude con el trabajo.- Me parece perfecto papá, justamente iba a hablarte de eso, repartir todo el trabajo de Amanda no estaría mal.- le dije con una sonrisa.- Estaré en mi habitación, buenas noches, saludame a Yenny de mi parte.- me despedí de mi padre y subí las escaleras. Iba caminando por el pasillo, cuando escucho esa risa, tan contagiosa que es imposible no reconocerla, esa risa es la de Christopher.

"Si preciosa, yo paso por ti a las 5:00, estoy ansioso por verte" escuche su voz, hablaba por teléfono, y evidentemente es con una mujer.

Se muy bien que escuchar conversaciones ajenas es de mala educación, pero me mataba la curiosidad, cuando escuché que empezó a hablar con Joel.

-Joel, adivina quien va a salir con..- puse mi oreja en la puerta para escuchar mejor.-Con Ana.- Por Dios Christopher, no te alcanza con Eliana.-Ya no me regañes, te conseguí a su mejor amiga Dayana.-los escuchaba hablar, sentía enojo, no se si eran celos, o porque Christopher era un imbécil. Sali a esconderme detrás de una de las estatuas que adornaban el pasillo, cuando Christopher iba a abrir la puerta.

El salió, vio a los lados, supongo que iba a bajar a la cocina, cuando de repente se para, mira sus pies, y... Maldición mi arete se cayó, lo recogió y lo analizó, se lo metió al bolsillo y bajo las escaleras. Ahi aproveche param irme a mi habitación, en puntillas llegué a mi habitación, cerre la puerta, me cambie de ropa, me recoste y tome mi telefono para revisar mis redes sociales.

Minutos después, dos toques en la puerta hicieron que me levantara. Dije pase, la puerta se abrió y en el umbral de la puerta se dejó ver a Christopher.

Maldición, seguro viene a devolverme el arete.

-Hola.-rompió el silencio.-Hola.- le respondí nerviosa.

-Creo que esto te pertenece.- sostuvo el arete de diamantes en las yemas de sus dedos.-Ah si, gracias, hace días que lo perdí.- le respondí seca, aun me sentía nerviosa un poco.

-No deberías de escuchar conversaciones que no te incumben.-me dijo sonriendo sarcástico.-¿De que hablas?-le dije sin siquiera mirarlo.-No te hagas, se que estabas detras de mi puerta escuchandome, eso explica tu arete frente a mi habitación.-Estas muy equivocado, yo llegue hace unos minutos, y aparte tus conversaciones sobre las zorras con las que te vas a acostar no me interesan, por favor retirate de mi habitación.

-¡Ajá! Ves que si me estabas escuchando.- dijo riendo teniendo toda la razón.-Ya te dije que no me interesa.- le dije sin mirarlo.-sentí que camino hacia mi, segundos después lo tenía frente a mi, estaba a la altura de su pelvis ya que yo estaba sentada en la cama, se me pusieron los nervios de punta.

-¿Estás celosa?-pregunto, y me imagine su sonrisa conqueta ya que no lo estaba viendo.
-Sigue soñando.- suspire y no le daba importancia a lo que me decía. Lentamente me quito mi teléfono de las manos.-¿Qué demonios te sucede?-le grite subiendo mi cabeza para mirarlo.-Tus mejillas están rojas, estas celosa.-empezó a reír.-me puse de pie y le dije.-Ya te dije que no, déjame en paz, quiero descansar. Además siento tanta lástima por Eliana, aún no sabe con el imbécil con quien se metio. -Lo aparte y me puse tras el para quitarle mi celular a lo que falle. Se voltio y me miró unos segundos, se acerco peligrosamente a mi, intentó besarme.

-Qué crees que haces?-le dije esquivando su beso.-No sere ni tu segunda, ni tercera opción, idiota.-No eres nada de eso.-me dijo poniendo su mano en mi mejilla.-Exacto, tu y yo no somos nada, exepto familia.-Tu sabes muy bien que quiero que seas más que eso.-se iba acercando.-No vengas a ilusionarme más, te lo suplico.-me sentí débil, cuando se lo sentía más cerca.-Me gustas tanto.-entreabrio sus labios y capturó mis labios, puse mis manos en su pecho, colocó sus manos en mi cintura, y me apegó más a el. Su costumbre de apretujar mi trasero no le faltó. Paso su lengua por mi labio, pase mis manos por su cabello, todo era tan apsionada, afuera estaba frio y en mi habitación sobraba calor.

De repente escuchamos dos toques en la puerta.

-Señorita _________, traigo su cena.-Mierda, olvidé que Amanda vendría.-puse una mano en mi frente.-Escondete, en mi armario.-le susurre a Christopher.-Ya voy.-grite atravez de la puerta. Christopher se metio a la habitación donde esta mi ropa, cerró la puerta y le dije a Amanda que pasara.

Amanda dejó la comida en una mesa y luego se fue.

-Ya puedes salir.-rodee los ojos. Christopher salió y vino hacia a mi.
-Uff, por poco. Ya podemos seguir.-se acerco dispuesto a besarme.-Christopher, casi nos descubren, y tu quieres seguir, estas loco.-negué con la cabeza. -Oh vamos, todos estan dormidos.- saqué mi teléfono y le marqué a mi padre.

-Hola papi, puedes venir a verme.-le sonreí a Christopher, colgué y luego lo mire. Me fulminaba con la mirada.
-Ahora no quieres estar conmigo no?-cruzó los brazos.-Eres un descarado, acabo de escuchar que te veras con una mujer, teniendo novia, y luego vienes a besarme, ¿Que mierda tienes en la cabeza?-le dije, pero se quedó callado, salió de mi habitación sin decir nada.

Me tiré a la cama, y pensando me quedé dormida.

Al día siguiente, hice mi rutina de siempre, baje a desayunar y me encontré a Christopher en el comedor con su teléfono.

Nos nos saludamos, sólo empecé a comer lo más rápido que podía, me sentía incómoda, Christopher no me miraba, como si no estuviera ahí, y a este que le pasa?

Lave mis dientes y fui al hospital. Hoy tenía una cita con Bruno por la noche,    hoy saldría temprano, tan pronto salgamos, iríamos a cenar.

Mi Hermanastro©  {Christopher Vélez}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora