Desayunamos en la cafetería de Bel, donde la primera vez que me trajo, y pasamos ahí un buen rato hablando mientras yo disfrutaba de, por un segundo, parecer vivir un anime shojo de los que se retrataban momento empalagoso con sentimientos que bien podrían ser latidos o infartos.
Pero de momento a mi no me estaba dando ningún infarto, así que supongo que era buena señal.
Cuando bajamos para despedirnos y salir a dar un paseo fue cuando todo se me arruinó de golpe.
–Mira por donde, Eider –Saludó de mala manera Cedric hasta poniéndose de pie–. Ya te vas? Mi presencia te incomoda tanto?
–Te vas a poner a hacer un espectáculo en mitad de una cafetería, de verdad? –Planteé tratando de mantener la calma.
Pero hasta yo note como el tic me volvía y se me aceleraba el pulso.
–Yo monto un espectáculo donde me da la gana putita –Contestó por lo bajo levantando la cabeza con orgullo y dando un paso al frente amenazante.
Pero yo ya no tenía ese orgullo que antes me permitía dominar a personas como Cedric, Alex o Inti.
–Que pasa? –Preguntó Azul metiéndose en medio haciéndome retroceder a mi.
–Hostias? Ahora trabajas de puta de verdad? –Soltó al ver a Azul de arriba a abajo–. Pasaste de adolescentes de tu misma clase social por placer personal a trabajar para cualquiera, ya te pueden pagar bien.
Azul mantuvo la compostura, yo no.
Agarré su bufanda pasando por encima de Azul si hacía falta para tirar fuera del local a esa zorra y montar la bronca fuera.
–Suéltame! –Trató de quejarse llamando la atención de todas las miradas.
Pero sabiendo como agarrar la bufanda para no ahogarlo lo tiré contra el suelo manchando su cara ropa de barro y tierra y colocando perfectamente mi pie sin miedo sobre su miembro dejándole el espacio justo para que pudiera moverse.
–Como vuelva a escuchar a una zorra masoquista como tu decir una sola cosa sobre mi o mi amigo te aseguró que hasta tus padres se van a enterar de cuantos pies te gusta que te metan por el culo mientras tienes los huevos atados –Amenacé tajante viendo como se ponía colorado y su expresión se descomponía.
Y lo solté hasta con asco sabiendo los dos que en su pantalón había cosas que ocultar.
–De verdad que no quieres volver? –Dudó por lo bajo mientras Azul me agarraba por el brazo.
–No! Ya no soy como vosotros! Ya... –Contesté sin pensar pero frenando mis palabras con miedo por los ojos de Azul.
Estaba desconcertado, como si no me conociera... y supongo que era así, no conocía la faceta que antes le dedicaba a todo el mundo y que gracias a él estaba dejando de lado.
–Ya no buscó solo sexo –Terminé la frase consiguiendo que Azul a demás aflojara en su agarre.
–Todo es por culpa de ese estúpido de Lionel! –Saltó Cedric necesitando tapar la erección que tenía ahora en los pantalones rompiendo la mirada que manteníamos Azul y yo para mirarlo–. Todo estaba genial hasta que salió ese escándalo! Dios! No me da la gana de que me mandes a la mierda!
–Vale, pues es problema tuyo –Aceptó Azul agarrando mi mano y tirando de mi.
Ni siquiera le dimos tiempo a responder algo con su rabieta.
–Que mierdas acaba de pasar? –Preguntó una vez ambos estábamos metidos en el coche.
–Lo siento –Me disculpé aún con el corazón alterado y notando aún el tic por momentos.
ESTÁS LEYENDO
Error (Yaoi/BL)
Teen FictionTras la abrumadora noticia de la boda de su madre y el completo desconocimiento de quien era el prometido a Inti solo le quedaba la opción de conseguir adaptarse a su nueva vida con Eider, el hijo del futuro marido de su madre. Lo que no esperaba e...