Carraspeó a pesar de no lograr ver algo fuera de lo común, antes de partir miró a Dreun y Kayat sentados con rostro de imperturbabilidad, poder no hablar le provocaba un molesto cosquilleo de fastidio. Aunque quisiera decir algo, la inestabilidad de sus emociones era tan grande desde que se enteró ella debía dar el siguiente paso por órdenes de Nat le hizo replantearse si debió aceptar su trato con el señor Zeref.
—Te vas, Yui —afirmó Kayat.
La muchacha volteó para que no vieran su expresión y asintió con desaliento.
—Tan pronto —murmuró Dreun intuyendo algo extraño.
—Son ordenes de Nat —comunicó ajustando su correa—. Tengo que obedecer para ser libre.
—¿Ser libre? —cuestionó Dreun liberando una risotada—. Con Aedus éramos libres, eso creo.
—Esa es la libertad para ustedes —afirmó Yui virando para mirarlos seguramente—. Mi libertad es mucho más que eso y hoy la alcanzare.
—Yui... —balbució Kayat elevando sus cejas.
—Adiós. No se rindan, estoy segura que hallaran lo que deseen hacer, supongo que hay mucho más que solo bajar la cabeza ante alguien más.
Dreun y Kayat prestaron atención a la figura de Yui siendo recibida por los rayos solares del exterior. Dejaba la cueva que por muchos años ellos compartieron hablando ilusionados de las recompensas que les traería ser súbditos de Zeref.
Sin embargo, ahora, ambos estaban en silencio cuestionándose si sus pensamientos del pasado eran realmente acertados.
¿Lo era?
(...)
Levy sabia cuando Gajeel se perdía en sus pensamientos de pronto dejaba de sonreír y de molestarla hasta por respirar, en varias ocasiones caminaba frente a él buscando que pasara a su lado para llamarla "enana" o reír con su característica forma de hacerlo. Pero no ocurría, su atención entonces se centró en Aedus que caminaba al lado de Jellal, sus muñecas eran aprisionadas por unas esposas que le impedirían recurrir a su magia, de la misma manera el Ladrón de la Luna era responsabilidad de Erza.
«¿Qué habló con Aedus?»
Aquella incertidumbre en conjunto con la actitud fría de Gajeel despertaba en ella una angustiante preocupación.
—Lucy —llamó Allen con cautela—. Lamento haberte ocultado que el ladrón venía con nosotros.
Lucy dirigió su mirada al pelinegro y asintió en contra de su rabia experimentada hace un par de días.
—Creo que tus intenciones no fueron malas, pero de todas maneras no puedo fiarme de ese ladrón.
—Así es —intervino Natsu, con cierta molestia reflejada en su rostro—. ¡Dale las gracias Lucy que no te partí la cara!
—¡Aye sir! —exclamó Happy.
—Vamos, vamos, Lucy dijo que es mejor estar en paz —intercedió Eriol moviendo sus manos en gesto de calma.
—Tranquilo Eriol, yo confió en ustedes —Lucy les sonrió amablemente.
Eriol llevó su mano hasta su pecho y suspiró aliviado, sin embargo, notó en la mirada de la maga estelar cierta inquietud, desistió de continuar hablando para poder analizar con mayor deteniendo cada expresión de Lucy.
Erza estaba devastada, fueron tres días de intentar llegar a la buscada intercepción, lamentablemente ella debía lidiar con las constantes miradas de picada que el Ladrón de la Luna le proporcionaba, pero se animaba diciéndose que debía continuar luchando con sus molestias para mantener a ese ladrón sin posibilidad de escaparse.
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Manten tu vista en la Luna
FanfictionEl misterioso "Ladrón de la Luna" amenaza Fiore. Los magos de Fairy Tail serán los encargados de luchar contra él y restablecer la paz. Sin embargo, hay mucho más que una simple misión, un legado proveniente de años recae en Lucy y la reclama com...