Papá Soltero.

06

Después de la vergonzosa escena de Ranma en el alto voz del parque, Sasuke y Akane tuvieron que ir a buscar al adulto a la caseta de seguridad. Una vez de hablar con los policías y dejarles claro que no es una secuestradora de niños y casi golpear a Ranma por su estupidez, los tres pudieron seguir disfrutando los juegos.

-Eres un hombre ya mayor para que sigas haciendo tontadas. —Dijo Akane controlando su vocabulario enfrente del menor.

-Desaparecieron de pronto, no me puedes culpar. —Alzo los hombros el papá de Sasuke y le restó importancia. —Olvidemos eso y mejor vamos por un helado.

El niño de 5 años alzo sus brazos de acuerdo con la decisión de su papá, la doctora suspiro por enterarse que no estaba cuidando a un niño sino a dos. Sasuke agarro la mano de su papá, los dos sonreían caminando hacia el puesto de los helados mientras que Akane simplemente los miraba con una pequeña sonrisa.

-¡La vaca lola, la vaca lola, tiene cabeza y una cola!—Comenzó a cantar el papá del pequeño.

-¡Y hace muu!—Continuó el niño saltando por estar cantando una de sus canciones favoritas.

Las personas los miraban con ternura, los dos son muy parecidos y es como ver al mini del adulto. Aunque ninguno se daba cuenta de las miradas y seguían cantando la canción infantil, solo queriendo llegar al puesto para comprar su golosina y seguir paseando por el parque. Akane sonrió y los siguió, Sasuke volteo atrás y le extendió la mano, la chica la tomo y los tres caminaron como una familia feliz ante los ojos de los demás.

-¡Hace muu!—Cantaron los tres.

Después de comprar los helados y caminar a una banca para acabar el dulce frio, decidieron que subirían a la rueda de la fortuna para su acabar su visita, pues no hay tantos juegos que Sasuke pueda disfrutar a su edad.

-Mamá iba a venir conmigo pero se fue. —Le decía el niño a una sorprendida Akane, hace poco su papá fue al baño para luego ir a la última atracción. Dejándolos solos para que hablaran un poco. —Apa dice que no puedo verla por ahora.

-¿Por qué?—Preguntó con interés, sabe que no es su asunto pero el rostro del pequeño le dolió.

-Porque...Quiere más a ese hombre calvo.

Oh, entiende.

Acaricia con dulzura el cabello del niño, no sabe que más hacer por él pero al menos demostrarle que ella lo escucha.

-Bueno, la veras luego. —Sonríe.

-¡Sip! Aunque te tengo a ti. —El niño se queda pensando un poco. —Eres casi igual a mi mamá.

-Oh.

-No creo, campeón. —Ranma llega justo a tiempo al escuchar la última frase de su hijo. —La doctora Akane no se parece a tu mamá.

El niño de 5 años se encoge de hombros, lo dijo porque las dos bonitas pero su papá siempre tiene razón, así que le hará caso y no volverá a pensar de esa manera. El hombre se disculpa con su mirada con Akane, no quiere que piense que el pequeño está tratando de que sea su nueva mamá.

-Está bien. —Le contesta al entender el mensaje silencioso. —No me molesta.

Concluido con ese tema, los tres van a la rueda de la fortuna y esperan su turno. A los diez minutos puedes subir a una de las capsulas, Sasuke es el más emocionado pero también se queda dormido en las piernas de su papá, dejando a los dos adultos hablando mientras que ven el paisaje que les brindan al estar en la cima.

-Sasuke no ve a su mamá desde hace un tiempo, tal vez por eso te dijo que te pareces a ella. —Dice Ranma en un susurró, aunque Akane lo escucha perfectamente.

-No hay problema, el niño me cae bien. No me meteré en ese tema porque al final solo los conozco de días.

-Gracias. Mi bebé se encariña muy rápido con la gente, por eso lo cuido demasiado cuando conoce a alguien nuevo... Tenemos una mala experiencia con el tema.

-¿Se encariño con alguien que se fue?—Pregunto la doctora con curiosidad, no entendía muy bien las palabras de Ranma Saotome.

-Con la nueva pareja de su mamá. Digamos que él no es la mejor persona del mundo ni el más paciente. —Se puede notar la rabia contenida del hombre. —Aunque eso a ser está arreglando legalmente.

Akane puede sentir un escalofrió en su espalda al escuchar eso, tan solo imaginar que pudieron dañar al menor, entiende la protección de su padre.

Los dos suspiraran y solo observan el paisaje, tratando de controlar sus emociones.