Segundo entrenamiento

1K 64 19
                                    

Eren

Como ya nos habían avisado antes que haríamos entrenamientos muy seguidos, hoy hicieron lo mismo, casi comenzando a comer, Hanji llegó y nos dijo que haríamos cuatro entrenamientos, o mejor dicho tres y medio ya que el cuarto era limpiar la Legión.

Nos apuramos lo más que pudimos en comer y salimos al patio, nos colocamos el equipo tridimensional y nos fuimos en dirección al bosque para seguir perfeccionando nuestras técnicas pero....casi empezando mi cabeza comenzó a doler, me aleje lo bastante y me escondí en una de las ramas más altas.    

« ¿Existe otro titán? »   no de nuevo..por favor

« Así es, es de un clan muy poderoso pero aquí no hay nadie así, entonces sólo consideraron 9, que son los que habitan aquí y el fundador que está en Paradis »

¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué ahora?

« ¿Ese titán tiene nombre? »
« Así es »
« ¿Cuál es? »
« El Titán d3/ [\€&?0 »

¿Qué?

Mi cabeza daba vueltas, no sabía que hacer, sentí que alguien había llegado hasta donde yo y así fue, era Annie

- ¿Qué haces ahí? ¿Te pasa algo? -

- No es nada...grave -  dije tratando de mantenerme estable

- ¿Seguro? Te ves muy mal -

- Solo pediré un descanso, gracias -

Me levanté y traté de caminar pero el dolor vivió lo que me hizo caer sobre la rama

- ¡Eren! -

- Estoy bien... -

- No, claro que no, no seas imbécil y procúpate un poco por ti mismo ¿Quieres? -

Annie me levantó y pasó uno de mis brazos sobre su hombro

- ¿Tenías que venir hasta acá? -

Annie no encontró forma de bajarme, me miró algo preocupada y me dejó en la rama

- Eres tan...agh, da lo mismo, pero si me pasa algo a mi, será tu culpa -

Ella saltó de donde estaba y se transformó en Titán, me extendió su mano y subí a ella con algo de dificultad, sentía que mi cabeza explotaría en cualquier momento.

Caminó algo veloz y llegó hasta donde estaban los demás

- ¡Annie! -  gritó Armin mientras ella solo me miraba seria, se inclinó y salió de su Titán   - ¿Por qué lo hiciste?, ¡no puedes transformarte aún, sigues algo dañada de tu espalda a pesar de tu regeneración! -

- Ya lo sé, pero no es mi culpa -

Me miró a mi que estaba aún en su mano y me puse de pie con algo de trabajo, no podía abrir bien los ojos, cualquier tipo de luz me molestaba.

- Fue culpa mía...lo siento Armin -  dije

- ¿Pero por qué? -

- Por alguna razón se fue a una rama lejana y se veía mal, así que lo traje, y como no pude bajar con el equipo...me transformé -

De inmediato llegó Mikasa y me miró preocupada....lo que no quería

- ¿Por qué seguiste si te sentías mal? Pudiste venir y parar -

- Lo sé, pero...-
- ¿Las memorias? -  esentí

- Existen más titanes...cambiantes - dije

- ¿¡Qué!? -  escuché de parte de toda la Legión

- ¿Cómo es eso? -  preguntó Hanji

- En otra parte del mundo...hay...más titanes como yo, como Armin y puede que también como Annie -

Todos la voltearon a ver a ella

- Annie...¿Tú sabías eso? -  preguntó Hanji mirándola

Annie solo bajó la mirada con apariencia estresada y me miró

- Sí...Eren tiene razón -  dijo con su mismo gesto

- ¡¿Y cómo por qué no dijiste nada?! -  preguntó el Capitán Levi

- ¡Porque estoy harta de las guerras estúpidas que siempre se planea para destruirse entre Mare y Paradis! -

Todos nos quedamos sorprendidos por la manera en la qua Annie respondió...al Capitán Levi

- ¿Qué más viste Eren? -  preguntó Hanji

- Contándome a mi, somos nueve Titanes Cambiantes -

- ¿Nueve? Al parecer son bastantes -

- ¿Solo eso? - preguntó Mikasa

- Bueno...en general solo se consideran 9, ya que el número 10 al parecer...ya no existe -

- ¿10? -  preguntó Annie sin entender lo que dije

- Sí, 10 -  reafirmé

- Bueno -  Hanji se levantó y miró a Mikasa  - Llevalo a su habitación o al comedor -  ella asintió   - Cuando te sientas mejor y estable continuas con el entrenamiento, es muy importante que lo cumplas -  me dijo a lo que yo asentí

- Bien, los demás...continúen -

Todos se retiraron y yo junto con Mikasa nos retiramos a los comedores

- ¿Cómo te sientes? -  preguntó al sentarme

- Confundido -

Mika me miró con una mirada preocupada y tomó uno de mis hombros, en ese momento mi mente recordó el diario donde mi padre escribió todo sobre lo de afuera y como era Mare...que había y esas cosas.

Me levanté de golpe y me quedé pensando...tal vez haya algo de ese Titán desconocido

- ¿Eren? -

- Mikasa....¿Recuerdas dónde quedaron aquellos libros de mi padre? -

- Sí, con el Comandante -

- Los necesito -

- ¿Por qué? -

- Tengo que saber algo - 

Salí del comedor y me dirigí a la oficina del Comandante, abrí la puerta y después la cerré encontrándome solo en el lugar, me dirigí a los cajones de su escritorio y comencé a buscar cuidadosamente, tenía intención de abrir el último de éste pero una mano me interrumpió

- ¿Qué crees que haces? -

- Mikasa...esto es urgente -

- ¿Acaso te quieres meter en problemas? -

- Te digo que esto es urgente -

- ¿Sabes que puedes pedírselos cuando quieras?, esos libros son de tu padre y estás en el derecho de pedirlos ya que que eres su hijo pero por favor Eren, vámonos de aquí -

- Bien -  dije convencido

Salímos de la oficina y nos dirigimos a mi habitación, me quedé pensando mientras esperaba que el poco dolor que tenía se fuera. Mikasa estuvo siempre conmigo, sentía sus caricias, sus besos, su voz al tararear una canción lo que me hizo dormir y tranquilizante un poco.

~ A..zumabito... ~  pensé en voz alta antes de caer dormido

¿Cambiar?  Sólo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora