Los caminos de la magia

Capítulo 21: El bastón de la naturaleza

El día parecía tan tranquilo, no solo por qué no había ruido, simplemente era por qué al fin podía sentir que mi sueño se estaba cumpliendo.

A pesar de que aún no era lo bastante fuerte, sabía que si yo mostraba mi fuerza de voluntad y entrenaba más duro estos días, podía subir mi poder y mi rango.

Caminando hacia casa del maestro, unas nubes empezaron a llegar de repente, como si quisiera llover. Los animales y insectos empezaron a ocultarse en lugares para refugiarse.

A lo lejos ya veía la casa, Aldair estaba en su terraza como siempre, pero esta vez, preparando una especie de hechizo. Decidí volar para mostrarle mi armadura lo más rápido posible.

+ ¡Maestro! - Podía sentir un leve viento fresco al volar. - ¡Traje la armadura!
- Owen, - paro de hacer su hechizo - veo que lo conseguiste en menos tiempo de lo que esperaba.
+ ¡Por supuesto! - Aterricé en su terraza - Me he vuelto más fuerte, puedo sentir que mi poder a elevado a 45%.
- Puedo sentirlo, - tomo su bastón - creo que ya estás listo para tu entrenamiento físico.
+ ¡Bien! - Levante mi brazo derecho como signo de victoria. - Pero dígame maestro, ¿Para que son esas pociones?
- ¿Esto? - Me miro sorprendido - Solo son pociones para en caso de emergencia.

Era la primera vez que podía sentir que el maestro me estaba engañando, algo ocultaba y no sé que era...

+ Dígame maestro, confíe en mí.
- Te lo diré, pero con una condición...
+ ¿Y cuál sería? - Un secreto del maestro... ¡Quizá sea la razón del por qué sea tan fuerte!
- Debes hacer mil flexiones de brazos y mil sentadillas.
+ ¡Eso será muy fácil! - Lo podía lograr en tan solo 3 días.
- Luego de eso practicarás unas técnicas de golpes con puños y patadas.
+ ¡Esta bien!

----------------------------------------------------------

Pasó un mes y apenas si pude completar este entrenamiento... El maestro jamás menciono que me pondría pesas en las piernas y los brazos.

Plena tarde y mi sesión terminó, estaba completamente agotado y sudado.

Entre a la casa y fui directamente al baño a ducharme.

Medite en la tina un momento acerca de lo que hice en estos últimos meses y me di cuenta que además de haberme hecho más fuerte, también desarrolle un pensamiento más maduro.

+ ¡Owen! - Gritó Aldair. - ¡Cuando salgas ven a la terraza y hablaremos!
- ¡Como usted diga! - ¿Al fin me contaría el secreto de cómo hacerse mas fuerte?

Me bañe apresuradamente y fui a mi habitación a cambiarme, colocándome mi armadura.

Subí la escaleras para llegar a la terraza, cuando estábamos allí, el cielo nuevamente estaba gris, me daba la sensación de que las nubes querían llorar.

+ Bien, ahora que estás aquí Owen, - cada que hablaba suspiraba - te contaré el secreto que he guardado desde hace tiempo y que nadie sabe.
- Valla, suena que es muy fuerte lo que me está por contar... - La expresión de Aldair no era normal, se lo veía triste de alguna manera.
+ Acerca de las pociones...
- ¿Es la razón por la que vive solo? - Lo interrumpí.
+ Esta bien, antes de contarte lo de las pociones te contare está pequeña historia del por qué vivo aquí.

Una gota aterrizó en mi brazo derecho, las nubes estaban por colapsar al parecer.

+ Hace tiempo, yo era el capitán de las tropas de magos clase B del rey Gervasio. Una unidad prácticamente que superaba a las de élite capas de derrotar a cualquier intruso o rebelde. - Suspiró - A la vez también me converti en maestro de un joven al igual que tú.
- ¿Como se llamaba? - ¿Tuvo un alumno antes que yo? Era sorprendente.
+ No puedo decirte, simplemente pasó lo mismo que a ti, sus padres fueron asesinados cuando el apenas era un bebé y fue mandado al orfanato donde se crió. Un día llego hacia mí todo triste y rechazado por lo demás, debido a su debilidad. - Bajo la cabeza - Yo vivía muy cerca del castillo del rey, donde tenía un enorme lugar donde podía entrenar discípulos. Ese pobre niño estaba cegado por su ira, deseaba la venganza y hacerse más fuerte. Tarde descubrí el motivo del por qué se quería hacerse el más poderoso, había logrado alcanzar un poder de 67%.
- Interesante, ¿Pero eso que tiene que ver con qué se vino para aquí? - La historia parecía de película, además tenía curiosidad por ese alumno.
+ Tranquilo, vamos de a poco. Ese sujeto que se hizo llamar mi discípulo, atacó primero a magos que protegían el imperio, los mataba para ponerse a prueba. - Cerro su puño derecho - Un compañero me informo sobre la situación pero ya era tarde, me negaba a aceptar que el hiciera tal atrocidad, por otra parte deje de enseñarle técnicas y nos empezamos a distanciar poco a poco. Una noche que estaba protegiendo la puerta de la entrada al castillo del rey, un sujeto con una máscara atacó a guardias rango C que estaban en la entrada del reino. Yo no podía hacer nada más que observar, debía cuidar mi puesto, mis compañeros fueron a atacarlo, era un tipo duro de matar... Sin nunca haberme lo imaginado note que esas técnicas yo le había enseñado a él.
- ¿Osea que su discípulo atacó el castillo? - No podía contener las ganas de saber su nombre.
+ Lamentablemente el traicionó mi confianza. - Suspiró nuevamente - Mis compañeros aún eran muy fuerte para él y le estaban dando una brutal golpiza. - Tocó dos veces con su bastón - ¡No podía seguir viendo cómo golpeaban a mi discípulo! - Gritó inesperadamente y la lluvia se largó.

Me quede callado, me sentía un poco triste por tremenda traición que le hicieron....

- Maestro... - Susurré.
+ No se que es lo que hice mal... - Hablaba despacio - Ataque a mis compañeros dejándolos inconscientes y lo rescaté. - Parecía que el cielo lloraba por su gran historia - Luego de eso, el rey furioso me desterro de mi hogar y me mandó a vivir en el exilio, donde actualmente estoy solo.
- Todo por culpa de él, ¿Pero usted nunca tuvo novia o se casó? - Quizás así buscaría una chica con quien vivir y ser feliz nuevamente.
+ Tu aura es muy pura Owen, sé que tú no me defraudaras como los demás. - Sonrió - Pues antes de tener el título de capitán y un discípulo, me la pasaba entrenando con mi hermano mayor llamado Bruce. Con él, siempre discutíamos y peleábamos.

- ¡Tu eres el preferido de mamá y papá! - Gritaba Bruce enojado.
+ ¡No hermano te equivocas!

Un hermano de Aldair, a pesar de que se peleaban suena bastante fuerte...

+ Jamás solucionamos nuestros problemas... Un tiempo después me presenté en el reino para conseguir un título como soldado o capitán de alguna tropa, donde conocí a una bella mujer llamada Cristal. - Al mencionarla su voz se ponía dulce y suave - Recuerdo que estaba completamente enamorado de ella, vivíamos primero en una casa que no tenía muchos lujos pero igual éramos felices. En ese entonces ya me había convertido en soldado de una tropa clase C. - El cielo empezó a tronar - Un día como éste, lamentablemente fui a patrullar en una zona muy alejada de casa, Cristal quedo sola, mi hermano se enteró de mi vida y comparada con la del él, no iba nada bien...
- ¿A que se refiere? - Tenía miedo el oír de que ella murió a manos de Bruce...
+ Se convirtió en un fugitivo muy poderoso que creaba posiciones letales que funcionaban para dar poder, envenenar y hacer el mal. Bruce envidio siempre mi vida, no se le ocurrió mejor idea que preparar una poción mortal que dejó dormida a Cristal en un sueño en el que a un no a despertado.
- ¿¿¿Está viva??? - Por eso era que estaba preparando pociones.
+ Si pero esta en un sueño largo, y solo despertara con un hechizo muy fuerte, lo intente, pero aún no he logrado conseguirlo.
- ¿Y dónde se encuentra ella? - Me sentía un niño preguntando todo esto. - ¿Que hizo contra Bruce?
+ Ahora mismo Cristal esta en una habitación de esta casa oculta donde nadie puede entrar más que yo... - me miró - No puedes entrar Owen... Y lo que pasó con Bruce fue una derrota brutal. Conseguí el bastón de la naturaleza con tres cuarto de poder, entrene todos los días para pelear contra él, examinaba sus técnicas y maneras de pelear.
- Le dio una golpiza seguro...
+ Más que eso, mi poder en ese entonces era 72% y el de mi hermano 75%. La batalla fue difícil, estaba perdiendo y el bastón empezó a brillar un aura amarilla.

+¡ Golems resurjan! - Mi bastón se dividió y se transformó en golems, ataque de manera que lo deje sin escapatoria. Eran 4 golems, uno de fuego, agua, roca y otro de madera, cada uno con un poder de 80% y una altura de 30 metros.

¡Una técnica super fenomenal del bastón de la naturaleza!

- ¿Osea que ahora también puede hacerlo? - Era realmente emocionante que tanto poder pudiese tener un maestro.
+ Ahora si, pero ese poder tiene sus consecuencias, al usar tanto poder el bastón desaparece cambiando de nombre a bastón del tiempo. - Lentamente se levantó de dónde estaba sentado - Al derrotar a mi hermano el siguió con su vida, pero juro que se vengaría. Es por eso que cuando tuve mi discípulo el nunca supo que tuve un bastón tan fuerte como ahora. Después de 10 años de que el bastón de la naturaleza se transforma en un bastón de tiempo, aparece una nuevo, que esta disperso en cualquier parte del mundo.
- ¡Y usted le encontró de nuevo! - Era grandioso, como si esa arma estuviera destinada para él.
+ Si, supongo... - Se dio a la vuelta y se metió adentro. - Debes seguir entrenando.

Me quede callado al oír esa dos historias tan geniales pero tan tristes.
Me sentía completamente inspirado a entrenar de nuevo y pensar bien en por qué es lo que luchó realmente.

----------------------------------------------------------

+ ¡No me mates te lo ruego!
- Pobre alma... - Susurró y le cortó el cuello con su espada.
+ ¡Amigo! - La sangre se esparcía en toda la habitación, su compañero estaba muerto.
- Ahora te irás con él. - Tomo su cabeza con su mano derecha y reventó su cráneo.
+ Me encanta como matas hermano, jajajaja.
- Y tu qué pareces un dios con tu espada.
+ ¡Aku, Jordan, se los necesita en el cuartel! - Apareció Bill en un portal.
- ¿Qué necesitan? - Dijo Aku.
+ Ese maldito de Gedeón... - Dijo Jordan enojado.
- ¡Cuida tus palabras Jordan! - respondió Bill.
+ Más bien serás tú si no quieres que te rompa el cráneo con mi mano...