El laboratorio de Evil Ghost era el lugar donde los demonios eran modificados, también servia como sala para recuperar partes o curar el cuerpo de los miembros de la asociación. A pesar de no ser usado constantemente por los integrantes, los demonios mismos creaban diferentes pociones para hacerse más poderosos y poder servir a su líder. Algunos llegaban a fusionarse y superar el poder mágico de los magos, solo se trataba de velocidad, fuerza y resistencia.
En una esquina del salón, Lucifer esperaba a uno de sus demonios más leales a que le trajera alguna poción para recuperar su cuerpo dañado de tal quemadura sufrida en batalla. Parecía un muerto viviente, el pelo de la cabeza y del resto del cuerpo se transformo en ceniza, la piel era negra y quebradiza, ardía como un carbón.
+ Apresúrate Reko... - Murmuro entre dientes dando una orden a su soldado.
- ¡Si mi señora! - Respondió el demonio regresando con una frasco pequeño con un liquido negro. - La poción de Reko la curará mi ama. - Se paro enfrente bien erguido y tendió su mano derecha para entregarle el frasco.
+ No puedo tomarlo idiota... - Abrió grande los ojos como si quisiera matarlo con la mirada.
- ¡Es cierto, no puede moverse! - Apresurado trato de corregir su error y le quito el tapón, luego le acerco con delicadeza a su boca y largo el liquido. - Cúrese jefa... - El cuerpo del demonio era temible, piel morada y una altura de tres metros, tenia todo su cuerpo marcado y arriba de su cabeza brotaban varias espinas muy puntiagudas. Sin embargo, ante su líder es miedoso e indefenso, pero contra sus enemigos es un asesino despiadado.
El cuarto quedo en silencio, el demonio retrocedió luego de darle la cura y espero a que hiciera efecto. La chica al igual que una víbora empezaba a mudar su piel, las escamas negras caían al suelo y se desarmaban. Pego un salto hacia adelante y volaron todas sus heridas. El cuerpo quedo como antes de la batalla a excepción de una pequeña cosa, Reko no había mencionado que dentro de la cura agrego una sustancia que usaban los demonios para mutar.
+ Bien hecho Reko... - Sonrió y con el cuerpo desnudo, avanzo hacia adelante hasta llegar a un gran espejo. - Mi cuerpo esta en excelente estado, me sorprendes pero... - Acerco la cara seria un poco sorprendida del color de sus ojos. - Explícame, ¿Por que mis ojos cambiaron? - Sin mirarlo lo regañó.
- Eh... - Suspiró y dio la vuelta asustado. - Quise probar en usted una segunda transformación como nosotros los demonios.
+ El color café en mis ojos eran mas hermosos, ahora tengo estas cruces blancas en el centro de mis pupilas y alrededor de ella es negro . - Volteo a verlo para escuchar una respuesta razonable luego de que modificara su cuerpo sin su consentimiento. - Espera, - Chasqueo los dedos y repentinamente volvió a vestir su ropa habitual. - mucho mejor... Prosigue.
- Es que esta nueva transformación implica el poder para transformar su cuerpo en mitad demonio y tener mas resistencia a los golpes y el fuego ardiente como nosotros, sin mencionar de que aumentara su velocidad y fuerza pero no la magia. - Cruzo los brazos tratando de impresionarla.
+ Sorprendente Reko... - Sonrió sabiendo que con una nueva transformación podía resistir al fuego, iba a poder vengarse de Fenix.
- Si mi señora, para activarlo solo debe bombear su corazón logrando que palpite cinco veces en un segundo. - Cerro los ojos y levanto su mano derecha. - De esta manera. - A gran velocidad se incrusto la mano justo en uno de sus seis corazones en el pecho y lo saco. - A diferencia de los humanos como ustedes ama, nuestro cuerpo va mas allá de los limites y con esto no la quiero ofender.
+ Interesante, pero ¿Cómo se supone que logre eso si mi cuerpo no es como el de un demonio? - Las cruces de su ojos giraban reaccionando a sus pensamientos asesinos.
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Los caminos de la magia
FantasyEn el siglo XVIII en el imperio de magos, nació un niño prodigio el cual poseía el poder del viento... Lamentablemente sus padres murieron cuando el solo era un niño y lo llevaron a un orfanato. Cuando cumplió los 14 años, maestros de todos lados...