Lucifer © (✔️Completa) #Wattys2020

Capítulo 16: 3am "2 Parte"

Post; Lucifer

Al fin, el perfecto y glorioso, Arcángel
San Miguel. Se muestra en todo su esplendor.

Se muestra como el héroe, que viene a rescatar a la dama en peligro. Espero el momento indicado para aparecer y siempre ser el bueno.

─ ¿Miguel? ─ escuche la voz de Elisa, preguntar.

Leviatán ya se encontraba fuera del coche, me dispuse a bajar y enfrentarme a él.

─ No te muevas Elisa. ─ le advertí. Ella solo lo miraba a él. Su cara de sorpresa, lo decía todo.

No me dio ni una respuesta.

Me acerque a Miguel, y él se acercó a nosotros, quedando frente a frente, de una vez por todas.

─ ¡Ya contaba las horas para volvernos a ver Miguel! ─ le grité.

─ Lucifer, Leviatán. ─ saludo, inclinando su cabeza al decir nuestros nombres.

─ Dime, ¿Qué es lo que quieres, un Arcángel no baja del cielo sin una razón importante?

─ Sabes perfectamente que es lo que quiero, más bien a quién. ─ soltó.

─ ¡Ella no te incumbe! ─ brame, dando un paso hacia él.

─ Vine a protegerla, ¿crees que no te estamos vigilando? ¡¿Crees que no sabemos el plan que tenías con esa chica?! ─ gritó, enfurecido. Era la segunda vez que me enfrentaba a él, la primera fue, cuando me desterró del cielo...

La ira y el coraje, que aún guardaba contra él, iban apareciendo lentamente, por primera vez me estaba controlando, porque a unos cuantos metros, estaba ella. Le lanzaba de ratos, miradas. Estaba preocupado, no se movía, no salía corriendo. Por primera vez no venía gritando a mi, pidiendo explicaciones. Miguel al parecer se dio cuenta...

─ Así estará por un rato, mientras hablamos. ─ comentó Miguel, lanzando una mirada en dirección a Elisa, continuó. ─ Siento en ti, algo diferente Lucifer. ¿Te enamoraste?

─ Ya te lo dije, eso a ti, no te incumbe.

─ Pues para alejarla de su destino, creo que eso lo dice todo... ─ miró de nuevo en dirección a Elisa, y vi su preocupación, algo sabía él, y también yo tenía que saberlo.

─ Tu lo sabes ¡¿verdad?! ─ le pregunté, su mirada volvió a mi.

─ Tu padre, ─ al decir eso, empecé a sentir un coraje, una repulsión a ese ser que me acogió, el ser más despiadado y horrible de este mundo. Ya me lo había imaginado, todo esto era plan de él. ─ mando al ángel de la muerte, por ella. Al parecer la quiere muerta de una vez por todas, pero aún no es su momento...Le quiere lejos de ti, y eso solo lo conseguirá si esta muerta, para así juzgarla y mandarla al séptimo círculo.

─ ¡¿Al...Al...Séptimo?

─ Pero mi señor, le dará una oportunidad. Por eso, aún no es su momento de morir, por eso vine. ─declaró.

─ Tú, tu sabes el motivo, tu sabes esa información, la razón por el cual peco de esa manera, ¡dime, dime ya!
─ le ordené, estaba enojado, sabía que todo esto lo tramo mi padre, pero solo yo tuve la culpa de todo. Voltee a mirar a Leviatán, pero él,  ya no estaba.

"¡¿En qué momento se largo?!"

─ Si yo lose. ─ aceptó, y los dos miramos nuevamente a Elisa.

─ ¡Entonces dímelo, Miguel!.

De pronto vi, que movió su brazo, hacia un costado y sacó una gran espada, me apuntó con ella, tan rápido que muy apenas pude reaccionar. Tenía la punta de ella, a unos escasos centímetros de mi garganta humana. Estaba indefenso, y si cambiaba, Elisa me vería.