-- Serena, -- Inquirió Lita --¿Estás segura que Diamante aprobó que yo estuviera aquí?, digo, -- Señaló con la cabeza a la chica que circundaba el jardín -- Ella pareciera estarte cuidando.
-- Ella no me cae, es muy confianzuda con Diamante, pero él me pidió que la dejara hacer su faena.
Lita se carcajeó, luego tapó su boca con la mano.
-- Mejor di que estás celosa, Serena.
-- Para nada.
Lita contuvo otra carcajada porque Serena la miró mal.
Claro estaba que había dejado de pensar en Darien hacía mucho tiempo, él había sido efímero y las veces que conseguían estar juntos eran breves y sin ese "sazón" que complementa una relación. Probablemente casi igual con Diamante, a excepción de que Diamante parecía más humano, más inmerso en las cosas relacionadas con ella. Observador y atento, él había llegado a tocar fibras en su ser, fibras que estaban inexploradas.
-- Disculpa es que, es lindo.
-- ¿Lindo? -- Parpadeó Serena, saliendo de su ensimismamiento.
-- Te enamoraste de tu guardaespaldas, eso pasa.
-- No, lo que pasa es que él y yo acordamos
-- Lo que hallan acordado Serena, eso ya no existe. Estoy segura que ambos están muy enamorados, y eso está muy bien.
-- Lita, yo
-- Amiga -- Continuó, y puso ambas manos sobre las de Serena -- El hecho de que halla trabajado con Darien no quiere decir que sea su amiga, o que sea su perrito fiel. Él sólo era mi patrón y ya, además no creo ni sus argumentos, ni sus lágrimas de cocodrilo -- Explicó riendo con la rubia --. Yo vi, lo vi con estos ojos que se han de comer los gusanos cómo se fueron enamorando ustedes dos -- Encogió los hombros -- Darien sólo dejó que pasara por que es imbécil.
Serena encogió los hombros.
-- Lo que tengo muy claro es que nunca lo quise, y lamento mucho que hayas perdido tu empleo.
Lita sonrió con ternura.
-- No te preocupes amiga, soy perfectamente capaz de buscar mis caminos, y como no me gusta hablar de cosas no redituables, mejor distráeme contándome sobre cómo es que te enredaste con Darien., eso siempre causó extrañeza en mí.
-- Pues ... fue algo raro en realidad, probablemente por que Haruka me persuadió tanto, que terminé cayendo en sus argumentos. Esa Haruka, es una buena titiritera, moviendo aquí y allá a su antojo. Y por último la muy maldita terminó robando mi dinero -- Concluyó con sinceridad.
-- Bueno, no digo que él sea malo, en realidad creo que no se da a querer, siempre fué muy inmerso en sus negocios. Parecía que su iPad estaba fundido a su mano, ¿Será así en la intimidad?-Agregó riendo.
-- No, créemelo --. Soltó Serena riendo con ella -- Sería el colmo.
.
Serena estaba más relajada con Lita en casa, incluso la presencia de Tamara era menos engorrosa y sus intervenciones con su marido eran casi nulas. Ella parecía estar muy concentrada en su trabajo, claro, buen maestro había tenido.
Serena sonrió un poco volviendo a su charla con Lita. Se habían sincerado mutuamente y admiró su determinación a ser una luchadora excelente, pues vivir sólo con su madre enferma le había propiciado las ganas para seguir y buscar siempre oportunidades.
Caray, se estaban volviendo buenas amigas. Aún no se marchaba Diamante y ella se había ofrecido a acompañarle un día antes, incluso había estado gustosa de aceptar conocer al capitán amigo de Diamante.
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El Benefactor
RomanceLa gran artista de la música, Serena Diva T. se halla en gran predicamento al descubrir que su demasiado protector novio Darien Chiba le hace una imposición. Ella lo toma como una invasión a su libertad y por amor, o curiosidad, acepta al nuevo per...