Camisetas

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– ¿Y por qué se supone que están en estás fachas?– cuestionó una pelirroja mirándo a su novio y a los hermanos sin camiseta.

– Ustedes no contesten.– señalé a Butch y Brick– Boomer la verdad.– le pedí.

– Eh... bien, fue así.

{Flashback}

Los chicos estaban peleando con sus poderes, ninguno se rendía, pero cuando Brick se enojó porque Butch comenzaba a burlarse, le prendió fuego la camiseta y al hacerlo se le prendió fuego la de el. Butch se la sacó rápido para no quemarse y la tiró, al igual Brick.

– ¡Brick! ¡¿Acaso eres idiota?! ¡Mira lo que hiciste!– le señaló la camiseta que se quemaba en el suelo.

– ¡Fue tu culpa! ¡No parabas de burlarte!– frunció el ceño el pelirrojo.

– ¡Pero no tenías que prender fuego mi camiseta!– protestó el azabache a punto golpearlo.

– ¡Butch! No.– lo frenó su hermano rubio– Tranquilos, podemos buscar unas camisetas para los dos...– los intentó calmar.

Sus dos hermanos lo miraron serios, con malicia y el menor se asustó.

{Fin del Flashback}

{Narra. Bellota}

– Y... quemaron mi camiseta también.– hizo una mueca.

– ¡Qué malos hermanos!– los regañó Bombon.

– Vamos Bommy, te buscaremos una camiseta.– la rubia se lo llevó, subieron a un taxi y se fueron.

– No puedo creer lo inmaduros que son...– los señaló a ambos.

– Eh, Tris... ¿viste a esos chicos sin camiseta?

– Sí... son tan sexys...– se escuchó la conversación de dos chicas sentadas en una banca mirando a los chicos.

– ¡Brick!– lo empujó Bombon.

– ¿Qué? Yo no tengo la culpa de que me digan eso.– se encojió de hombros mientras se reía– Butch, puedes ayudarme..– le pidió.

– Sí, Bombon, toda la culpa es de Brick. Así que llevátelo antes de que una de esas chicas quiera hablarle.– le aconsejó.

– Gracias Butch...– le sonrió con falsedad.

– Sí, Butch.– le sonrió sincera– Vamos, Brick.– lo miró seria y se lo llevó.

Antes de que se metan al taxi Brick le hizo una seña de que lo iba a matar y Butch rió.

– ¿No vas a regañarme?– lo miré– ¿Qué te sucede...?– se puso serio.

– Tenemos que hablar.– comencé inquieta.

– Bueno...– nos sentamos en una banca– ¿y bien?– no respondí– Bellota, querías hablar, hazlo.– me pidió.

Estaba nerviosa, ni siquiera podía mirarlo, y que esté con el torso desnudo era peor.

– Bellota.– me llamó.

– Ya no te veo igual.– solté sin pensar.

– ¿Qué...?– frunció el ceño.

– Yo... ya no te veo igual que antes.– me quedaba callada, los nervios y lo orgullosa que era no funcionaban.

Butch y yo estábamos comenzando una relación, el se había declarado, pero yo no sabía lo que sentía por el. Le respondí que yo no sabía lo que sentía pero iba a darle una oportunidad.

– No entiendo... ¿dices que no sientes nada por mi?– frunció el ceño.

– Butch, yo no sabía lo que sentía...

– Me diste una oportunidad por lástima.– se levantó de golpe.

– Butch...

– Estabas jugando con mis sentimientos.– se alteró.

– Butch.– volví a llamarlo para que me haga caso.

– Yo en serio te amo.– pronunció apretando los puños.

– ¡Butch!– grité.

– ¡¿Qué?!– me miró.

– Te amo.– confesé de una vez.

– ¿Qué...?

– Me di cuenta... que sí te amo, en serio... siento ponerte así, y darme cuenta tarde.– me apene.

No respondió nada, se agachó a mi altura sentada y puso sus manos en mis mejillas. Juntó sus labios con los míos, besándome sin ninguna prisa.

– Tienes que decirme todo al principio, no me gusta reaccionar así.– sonrió y reí.

– Lo siento...– sonreí y me volvió a besar.

.....

One- Shot's ☆ VerdesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora