Dib y zim (parte 2)

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-zim, dime ¿que fue lo qué pasó?- pregunto dib mientras veía seriamente a su amigo.

-yo... tuve una pelea con el, no es un ambiente muy sano para gir- consto zim, mientras agachaba la
cabeza y apretaba sus puños.

-no se porque presiento que me estás mintiendo- contestó dib, mientras se sentaba.

-está es la verdad- dijo zim fríamente -entonces... ¿nos ayudarás?-

Dib se quedó pensativo durante un rato, lo que hacía que zim se pusiera más nervioso.

-está bien, hablaré con papá para que te dé empleo- sonrío dib mientras se acercaba a zim -aunque, para mí nunca serás un empleado más, si no mi mejor amigo ¿de acuerdo?- pregunto el pelinegro mientras tomaba las manos de su amigo.

-s...i- contestó zim, mientras un leve sonrojo invadió sus mejillas.

Los días pasaron, y zim junto con gir, se mudó a la mansión de los membrana, su trabajo era sencillo, era el encargado de la cocina y la limpieza.

-¡gaz hazme caso por una vez! -grito el pelinegro mientras intentaba peinar a su hermana.

-¡cállate estupido hermano!- respondió gaz sumamente enojada al sentir como jalaban su cabello.

-gaz, estoy a cargo de ti ¿bien? Le prometí a papá cuidarte- suspiró dib mientras se quitaba los lentes.

-¡suéltame y déjame sola!- grito gaz empujando a su hermano.

-¡lárgate a tu habitación mocosa odiosa!- grito dib, sumamente enojado.

-oye dib... ¿porque tu hermana parece que está enojada siempre?- pregunto zim mientras lavaba los trates-

-desde que murió mamá, ella está insoportable no se, tiene que entender que no fue culpa de nadie- contestó dib realmente fastidiado.

Zim no contestó, solamente se limitó a hundirse nuevamente en sus pensamientos, y terminó de hacer sus labores para ponerse a hacer su tarea.

Ya eran las 11 de la noche y zim estaba en el comedor terminado su tarea, gir esperándolo se quedó dormido en la mesa por lo cual zim, lo cargo hasta su habitación y lo arropo cuidadosamente, cuando escucho unos quejidos muy despacio.

-amm ¿hola?- pregunto zim, mientras se acercaba al sonido - ¿dib?.

Zim empezó a recorrer el largo pasillo que daba hacía las habitaciones de la familia membrana y vio una puerta entreabierta.

-amm ¿hola? ¿Todo en orden?- pregunto zim sumamente temeroso de encontrar algo.

-¿qué haces tú aquí?- contestó una pequeña voz.

-¡ahhhhh! Señorita Gaz - grito zim, mientras se hacía atrás- me diste un susto de muerte

-¡vete de aquí!- contestó gaz mientras se daba la vuelta.

-gaz... ¿estás llorando?- pregunto zim mientras se acercaba a la menor de los membrana.

-¡déjame tranquila! Eres igual que mi estupido hermano.

-oye, cálmate es solo que ... -zim no termino de hablar cuando vio el rostro de gaz lleno de lágrimas.

-quiero estar sola- contestó gaz

Zim no contestó y se acercó lentamente a gaz, abrazándola y acariciando su cabeza.

-no te obligaré a decirme que tienes, solamente desahógate- contestó zim mientras seguí acariciando el cabello de gaz.

Gaz estaba sorprendida, se aferró a la ropa de zim y escondió su cabeza en el pecho hasta que ya no pudo llorar más.

Luego de unos minutos ambos se separaron y reinaba un incómodo silencio entre los dos.

RaZr ~ Mi querido profesor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora