El Policía

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Angela  

Angela, vamos a tener que hablar con ese chico....

Nose Pedro, algo me dice que cuando le contemos saldrá espantado y Erick me odiara cuando despierte...

Si es que no va y nos denuncia a todos...- agrega Marco y lo mire sorprendida, pero Pedro y Raúl lo miran mal, no les gusto nada que se meta con Dany, tendré que hablarlo después, aunque cabe la posibilidad de que no esté errado del todo, si me pongo a pensar, ni siquiera lo conocemos lo suficiente.

Yo aún no puedo creer que mi hijo haya hecho eso con un desconocido...

Yo si, si nos ponemos a pensar Dany no está nada mal y desde que se conocieron no le dio tiempo a reaccionar, lo digo porque todas las veces que lo vio lo beso sin previo aviso y de algún modo eso hizo que algo naciera en el....- Marco

Estás seguro que no te gustan los hombres?... - le pregunta Raúl y todos reímos.

Si seguro, que acepte cuando un hombre es atractivo no quiere decir que me guste...

Buen punto....- le digo.

- ahora ve a hacer lo que acordamos anoche y llévate a los que necesites...

Ok, hasta luego....- se levanta y se va, yo por mi parte me quede no solo mirando su cuerpo de espalda, sino que me quede esperando a que se despidiera de mí de otra forma, pero eso no paso tal vez sea porque aun no esta acostumbrado o porque también está mi hermana.

Volviendo a lo nuestro, tenemos que hacerle una visita sorpresa al señor Bustamante...- levanto mis cejas varias veces sonriendo y Pedro también sonríe, a él le encanta hacer visitas sorpresa.

Andando entonces.... - Raúl comienza a caminar hacia la puerta siendo seguido por todos y yo me voy hacia el cuadro secreto que tengo a un costado donde me coloco el cinturón porta armas, luego camine hacia ellas y metí dos en los bolsillos del cinturón, dos en mis espaldas, camino hacia los cuchillos donde también agarre dos y las tomo a mis bolsillos traseros con el clip, luego una de cada pierna y salgo.

Ok vamonos...- Pedro me abre la puerta de la camioneta, luego el se sube adelante en el asiento del acompañante y nos vamos.

.......

Una vez ahí entramos rompiendo el portón con nuestra camioneta provocando que de inmediato se arme una balacera, apenas pudimos corrimos para cubrirnos detrás de nuestras camionetas.

Cubramonos....- le grito a mis hombres.

Con Pedro y Raúl corremos hacia la casa sin dejar de dispararle a los malditos bastardos, al entrar fuimos recibidos por un tipo que parecía un maldito maestro del karate recibiendo muchos golpes, pero el al ser uno también se llevó muchos de nuestra parte, estábamos de lo más entretenidos hasta que a Raúl se le fue la mano con la fuerza y le rompió el cuello, nos dividimos para encontrar al maldito bastardo el cual encontré en su cuarto rodeado de los que supongo que eran sus tres mejores hombres, estaba cansada pero igualmente logre terminar con los tres malditos bastardos, pero el viejo se me a escapado, siento un grito y cuando salgo veo que Raúl lo tiene en el piso con su pie sobre su espalda, bajo con toda mi paciencia y puedo ver en su cara que está asustado, mas  cuando ve el gran cuchillo que traigo en mi mano.

¡¡¿QUE QUIERES PERRA?!!...- le pateo la cara logrando que su nariz sangre y que su sonrisa se borre, le hago seña a Raúl de que lo levante, lo coloca frente a mí y sonrio de forma cínica, Pedro se acerca y me pasa los papeles que traía dentro de su mochila para no perderlos.

Ahora tu, como buen amigo que eres, me firmaras estos papeles en los cuales me sederas todo...

¡¡Estas loca!!...- sonrio.

Dime algo que no sepa corazón...

No are lo que me pides...

Ok, Raúl encárgate de Melanie y de todo el que esté cerca...- lo suelta de forma brusca, haciendo que caiga, a mis pies, para ser mas especifica, lo mire sin borrar mi sonrisa y el me mira sorprendido, niega, lágrimas comienzan a caer por su cara, señal de que va a hacer lo que quiero.

Te daré todo, haré lo que tu quieras, pero por favor no le hagas nada...

Me encanta cuándo nos entendemos...- me bajo para estar a su altura.

Ves que la gente hablando se entiende Raul....- me mira con la misma sonrisa que yo y asiente.

Firma...- le doy los papeles, los toma de mala forma, al ponerse de pie para caminar hacia la mesa se sienta, firma todos los papeles sin leerlos y se los entrega a Raúl, este a mi y yo se los entregue a Pedro, los guarda y antes de irnos, le hago seña a Raúl de que ya sabe lo que tiene que hacer.

Matarlo.

Una vez fuera veo a mis hombres reunidos esperandonos.

Esta bien dama?....

Si tranquilos, ya saben lo que tienen que hacer....- asienten y se van dentro de la camioneta, Raúl, Pedro y yo nos vamos hacia las camionetas para volver a la casa, apenas me siento y la música de Adele hello comienza a sonar inundando todo el espacio y logrando que me relaje.

Angela...

Mmmm...

Pregunta Paula si queres algo en particular para la cena...

Cena?....

Si Ángela, son las seis ya...

¡¡Mierda!!... dile que cualquier cosa, Raúl vamos a la clínica...

Ok....- dicen ambos y vuelvo a tirar mi cabeza hacia atrás sobre el respaldo cerrando mis ojos.

Llegamos...- dice Pedro, me coloco las gafas porque aún hay sol y bajo sin esperar a que me abra la puerta, entramos a la clínica y no nos anunciamos al no es necesario, ya todos aquí saben que no soy cualquiera persona, no solo porque e puesto mucho dinero en mejorar esta clínica la cual prácticamente es mía, sino porque llama la atención que nunca vengo sola y siempre voy directo a la oficina del jefe de la clínica.

...........

Daniel 

Señores tienen que anunciarse...

El no lo necesita...

Dice Ricardo mirándola mal y  aunque lo mire sin entender, me quede callado y lo sigo, cruzamos varios médicos los cuales solo hacen un movimiento de cabeza y cuando llegamos al último piso solo hay dos puertas, los hombres que vinieron con nosotros van directo a sentarse en el living, Ricardo y yo entramos a un cuarto, al levantar la cabeza lo veo durmiendo, enseguida me acerco y lo miro, tiene unas pequeñas sopapas con cables en diferentes partes del cuerpo, tiene dos mangueras que van a sus brazos, me sequé las lágrimas que estaban deslizándose por mi mejilla y mire a Ricardo.

Puedes dejarme un momento a solas por favor...

Claro, cualquier cosa estoy afuera...- se va dejándome solo, me acomodo al lado de Erick y lo observe, es tan lindo como lo recordaba y se lo ve durmiendo tan tranquilo que me asusta.