17.

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Capitulo 17. 


 "Detesto esta noche, quiero respirar

Detesto mis sueños, quiero despertar.
Me siento atrapado, me puedo asfixiar.
No quiero estar solo.
Solo quiero ser tuyo."
BTS, SAVE ME.








IRATI.

Gruesas lágrimas bajan por mejillas. La sangre se desliza desde mi cabeza y corre por mis mejillas revolviéndose con las saldas lágrimas, hasta formar un charco en el suelo. Desde arriba lo veo, mis brazos también sangran. Las espinas han perforado mis venas.

Quiero bajarme.

Quiero gritar.

Quiero pedir ayuda.

Pero ya es muy tarde. He perdido el control.

Estoy muriendo de forma lenta y dolorosa. Sola.

Un grito desgarrador se escapa de mi garganta, el dolor solo aumenta.

Voy a morir. Quiero morir. Me lo merezco. Soy mala.

Pestañeo. Mis ojos amenazan con cerrarse. No quiero morir.



ASTER.

Mis pies no se detienen ni cuando abro la puerta de golpe y abro los ojos con absoluta sorpresa.

—¿Qué mierda? Por las diosas... —jadeo del asombro.

Una gran planta de rosas sale del suelo de la habitación, sus espinas están manchas de sangre y las hojas de sus flores gotean la espesa sangre, subo mi mirada en busca de Irati y al encontrarla una punzada de dolor perfora mi corazón. Ella se encuentra en la cima, siendo levantada por la gran planta, sujetada y siendo lastimada por las espinas, su largo cabello rubio se encuentra adherido a su rostro y el antes brillante rubio es ahora es teñido de un intenso rojo, manchado por su misma sangre.

Sus ojos parecen perdidos mirando ningún punto en específico, como si estuvieran sin vida. La marca en mi brazo comienza a sangrar con mayor fuerza goteando hasta el suelo. Una mala señal. Sacó una daga del bolsillo de mi pantalón y cortó con cuidado la imponente planta. En algún punto, el cuerpo de Irati comienza a ceder y la tomó en brazos desenredando las espinas de su cintura, cuello y brazos.

Sin saber qué hacer ante esta situación, salgo de la habitación en busca de Dakota o del grupo. Camino con rapidez sin ser capaz de correr temiendo golpear a Irati. Dakota aparece en medio pasillo reprendiendo a Drake en el proceso, pero ambos palidecen al observar nuestro estado, recayendo su atención en la chica.

—Yo no sé qué hacer... —admito en un susurro bajo la mirada escandalizada de Dakota.

—Drake, lleva a Aster a la laguna, yo iré por sus amigos. —ordena y me lanza una mirada de enojo.

Bien, aceptaba que parte de todo esto debía de ser mi culpa. Drake golpea mi brazo llamando mi atención y me hace una señal para que lo siga.

Caminamos en total silencio y apuro. Cada paso que doy, es una mirada preocupada que le lanzó al pálido rostro de Irati. Una sensación de impotencia se posa en mi cuerpo al no poder hacer nada y estar a la espera de ver que nos dirá la reina, caminar a una laguna en lo más profundo de este gigante castillo y con suerte de que Irati no muera con tanto caminar.

Drake abre unas viejas puertas de acero, en gran parte de la habitación, una laguna de agua cristalina y brillante bajo la luz que entra por pequeños agujeros del techo. ¿Cómo está agua podría ayudar a Irati? Miro a Drake en busca de una explicación, pero no dice nada mientras gira su rostro al grupo que corre hacia nuestra dirección.

Irati: El Libro Perdido (Guarrenclow #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora