THE LEGACY

CAPÍTULO 22

JAEHYUN POV

Llegué muy tarde a mi instituto, justo para la hora de antes del examen, uno para el que no había estudiado, pero mis amigos me ayudaron con las preguntas que les salieron a ellos y entré al examen almenos con algo que apuntar en el folio. Aunque tenía la cabeza en otra parte, las tenía en todas las partes del cuerpo de RyuJin y en toda la noche que pasé con ella, desde la cena hasta quedarnos dormidos, en el desayuno, que desayunamos más de lo normal y nos desayunamos más a nosotros que otra cosa, pero en el examen no, la verdad.

Lo acabé rápido, pero esperé a que sonase el timbre para entregarlo e irme a la última clase del día, caminé hacia el aula de historia y YugYeom levantó la mano para llamar mi atención y me sentase a su lado.

Yo caminé hacia él contestando algunos mensajes de RyuJin y me senté con él.

-Deja a la novia, anda – bromeó entrelazando las manos en la mesa – y cuéntame cómo ha ido la noche.

-No tengo nada que contarte, YugYeom – reí – pon el libro en medio, no le he traído – se lo cogí, lo abrí y lo puse entre los dos.

-Has insinuado que has follado esta noche.

-Yo no he hecho eso nunca – me encogí de hombros sonriendo.

-Sí, tío – dijo él con seguridad – has llegado muy contento y Bambam te ha preguntado si habías follado, te has reído, nos hemos reído y te has vuelto a reír. No necesito nada más para saber que has follado, para una vez que nos enteramos, ya estás explicándomelo.

Suspiré y lo miré sonriente, era increíble del buen humor que me había levantado.

-Bien, ha ido bien, imagínate a ti follando y ponle mi cara – dije yo cogiéndole la cabeza y girándosela hacia el profesor que entraba en clase.

-Eres desesperante – suspiró hastiado, apoyó los codos en la mesa para mirar a la pizarra y yo reí apoyándome en el respaldo.

Me crucé de brazos y disimulé mi distracción mirando hacia delante, mi móvil vibraba con los cientos de mensajes que me enviaba JaeMin, fantaseando él solito sobre mi noche con RyuJin.

-¿La vamos a conocer? – preguntó YugYeom mirándome de nuevo y yo fruncí el ceño – a TaeYong no lo conocimos, tío.

-No lo sé – me encogí de hombros y él rodó los ojos para volver la cabeza al frente.

Volvió a callarse, y se mantuvo así un buen rato, que ya era raro porque a veces podía hablar más que JaeMin y Lucas, era un logro que se callase.

Cuando salimos de clase el resto de mi grupo de amigos nos esperaron en la puerta para salir juntos del instituto.

-Esta tarde cachimba en mi casa y salimos a cenar, ¿no? – dijo Bambam en alto para que todos lo oyésemos.

-Claro, tío, ¿en qué momento lo has dudado? – preguntó JB ofendido.

-¿Vendrás? – preguntó YoungJae masajeándome los hombros.

-Iré a cenar, tengo entrenamiento por la tarde – les dije.

Ellos asintieron, creían que hacía boxeo, era la única escusa que se me ocurría para mi ausencia y los golpes de la cara y los nudillos. Aunque no pudiese ir por la tarde, iría a cenar con ellos, hacía unas semanas que no iba a pasar un rato con ellos, que era lo único que me mantenía los pies en la tierra y acordarme que aparte de ser el líder de la mafia más poderosa, era un adolescente normal.

-Wow – dijo Jackson golpeándonos el pecho a JinYoung y a mí mientras miraba hacia la salida del gran jardín que había fuera, delante de la enorme fuente - ¿la invito a mi fiesta de cumpleaños? – bromeó por la chica que estaba apoyada en su moto mientras miraba su teléfono.