CAPÍTULO 28

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CHAERYEONG POV

Salí del baño de la habitación de Jeno atándome el pelo en un moño alto y lo observé tumbado en la cama, con la espalda apoyada en la pared, solo con sus bóxers negros puestos y acabando de liarse el porro.

Caminé hacia él e inmediatamente abrió sus piernas para que me colocara entre ellas, me tumbé ahí, piel con piel, yo solo llevaba mi ropa interior y era la primera vez que hacía eso con un chico, pero en el último mes me había sentido cómoda con Jeno, él me estaba haciendo sentir muy bien con mi cuerpo y me gustaba como lo miraba, así que tampoco me sentí incómoda tumbándome en ropa interior con él y me agradaba sentirme así.

-Toma – Jeno le dio la primera calada y observé como el humo salía de sus labios hacia el techo - ¿quieres? – acercó la boquilla a mis labios y yo lo cogí con mis dedos.

-Jeno, me estás llevando por el mal camino – bromeé yo dándole una calada y dejando que sus brazos me envolviesen.

Rodeó mi cuello con un brazo y hundió la cabeza en mi piel, la otra mano la pasó por mi abdomen tatuado hasta dejarla en el interior de mi muslo.

-¿Yo? – sonrió en mi cuello y acarició mi pierna con su pulgar.

-Campana todo el día y porros – dije yo dándole otra calada – el mal camino.

-Pero hemos follado – encogió los hombros y dejó un suave beso en mi cuello – eso compensa las clases, ¿o no? – preguntó él apretando mi muslo.

-Lo que tú digas – dije en un suspiro y él mordió mi piel.

Yo dejé que me besara el cuello con lentitud, una lentitud acorde a como estaba después del sexo, se anulaba, llegaba a un punto de relajación que era de admirar, él era un chico más bien nervioso y movido, pero después de acostarnos todo su cuerpo y su mente quedaban relajados, una calma que me transmitía y hacía que yo estuviese igual que él.

-Uy – dijo él separándose de mi cuello – me he pasado un poco – rió mirando la marca roja de mi cuello – lo siento – apartó la saliva y dejó un suave beso en la marca.

No me importaba, la verdad, que lo hubiese hecho incluso me gustaba, como si así quisiese que todos lo viesen, sin vergüenza a que supieran que estábamos juntos.

-Toma – le devolví el porro después de otra calada y me moví entre sus piernas, me di un poco la vuelta y rodeé su cuello con mis brazos, apoyé la cabeza en su pecho, con los labios en su mandíbula, doblé una pierna y la pasé por encima de la suya, él me acarició la espalda hasta dejar su mano en mi culo.

Me relajaba tanto Jeno, me daba una calma.

-Esta noche saldré a cenar y de fiesta – me dijo él - ¿quieres venir?

-No, tengo cosas que hacer, Momo, Lucas y yo tenemos clase por la noche con ChanYeol – le dije yo acariciando su nuca.

-Que capullo, os la ha puesto por la noche – dijo él en un suspiro y yo asentí con la cabeza.

Cuando Jeno salía de fiesta, me creaba mucha inseguridad, no me importaba que saliese, lo que me daba miedo era que cualquier chica se le acercase, bailase un poco con él y Jeno cayese en la tentación, siendo realistas, la fuerza de voluntad de Jeno era mínima y no hacía falta mucho para superar a alguien como yo.

-Te has callado de golpe – dijo él dejando el porro en la mesita de noche - ¿qué te pasa?

-Nada – negué con la cabeza trazando el fénix de su pecho con mis dedos.

-No hace falta que intentes mentirme – dijo en un suspiro - ¿qué te pasa? – repitió dando un par de suaves apretones en mi culo.

-Nada, Jeno – dije yo riendo un poco y mirando la hora en su móvil, que estaba en la cama, al lado de Neko, que dormía plácidamente.

THE LEGACYWhere stories live. Discover now