CAPÍTULO 19

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LUCAS POV

Ir a clase el día después de salir de fiesta, debería ser ilegal, ni siquiera sabía por dónde conducía mi moto de camino al instituto, apenas había dormido una hora y aún sentía la resaca de por la noche.

Dejé mi moto en el aparcamiento y allí me encontré con TaeYong, que bajaba de su coche mientras fumaba, tenía cara de haber dormido incluso menos que yo y además, llevaba los nudillos reventados, otra vez.

-¿Qué coño has hecho? – le pregunté señalándole las manos cuando caminábamos juntos hacia los demás, que nos esperaban para entrar.

-Pelearme con la pared – contestó él llevándose el cigarro a los labios.

-Pues haber si te controlas, tío – dije mirando al frente y él alzó las cejas, como si me acusara de algo - ¿haces algo esta tarde?

-Viene DaHyun a mi casa – dijo negando con la cabeza y tirando el cigarro al suelo para luego pisarlo.

-¿Vais a follar? – le pregunté con ilusión.

-Pues no lo sé – se encogió de hombros – podrías quedar tú con Momo de una puñetera vez y dejar de taladrarme la cabeza, ¿no crees? – sonrió un poco y suspiré.

Debería, de hecho lo tenía pensado, porque desde que follamos con RyuJin solo habíamos quedado una vez para cenar, ahí nos liamos un par de veces sin llegar a nada más, y después la noche anterior, en la fiesta.

-Hola – ambos saludamos cuando llegamos con los demás y yo aproveché la cercanía para rodear los hombros de Momo con mi brazo - ¿y RyuJin? – preguntó TaeYong mirándolos a todos, porque ella siempre estaba de las primeras, jamás era la última.

-No sé, no ha enviado ningún mensaje – Momo miró su teléfono.

-Entremos, no creo que venga – dije yo señalando con la cabeza la puerta de la entrada al instituto.

Mantuve a Momo quieta y cuando todos avanzaron, caminamos juntos, así podía hablar con ella a solas.

-Tengo una propuesta para ti – le dije acercándola más a mi cuerpo.

-Y yo también tengo una para ti – sonrió cruzando los brazos y mirándome – pero tú primero.

-No, tú primera – le pedí sonriendo.

-Lucas – rió – no vamos a envolvernos en una pelea estúpida, habla.

-Bien – carraspeé y ella agarró con su mano la mía que caía por sus hombros - ¿tienes planes para esta noche?

-Iba a pedirte que vinieses a mi casa y pedimos unas pizzas, mis padres salen esta noche – propuso ella - ¿tú tienes algo que hacer?

-Pues ir a tu casa a pedir unas pizzas – bromeé y la miré desde arriba.

-Vale – sonrió dulcemente – pero nada de hacer combinaciones raras con las pizzas – me advirtió.

-Haré un esfuerzo – reí un poco y dejé un suave beso en su sien.

Ella sonrió más amplio y me cogió la barbilla con sus dedos, me bajó un poco la cabeza y me robó un beso que supo tan bien que se me había hecho corto.

-Hasta esta noche – me guiñó el ojo juguetona y antes de que la soltase para dejar que se fuera a su clase alguien corriendo casi nos atropella - ¿Jeno? – ambos fruncimos el ceño al ver y reconocer su figura alejarse hacia las clases.

-Vamos – agarré su mano y empujé de ella hacia la dirección dónde se había ido Jeno.

Por el camino recogimos a algunos más de los nuestros, que también lo habían visto y llegamos hasta la puerta de mi clase, que estaba cerrada, con Jeno tratando de abrirla y un par de compañeros de mi edad mirándolo confundidos.

THE LEGACYWhere stories live. Discover now