THE LEGACY

CAPÍTULO 31

JAEMIN POV

Llevaba toda la hora de historia con la frente en la mesa y mirando mi móvil debajo de esta, mientras hablaba con YuNa, porque Jeno se había quedado dormido y JiSung tomaba apuntes de la diapositiva de la pizarra digital a través de la que el profesor explicaba, así que podía entender por qué Jeno se había dormido, si es que era un puto aburrimiento de clase.

-Buenos días – el director entró por la puerta y yo guardé el teléfono enseguida, cogí del pelo a Jeno y le levanté la cabeza para que se despertase – vengo a entregar algo a un alumno – dijo él enseñando un sobre blanco – varios centros están cediendo becas y nos han dado la oportunidad de elegir a un alumno para enviarlo al Reino Unido a estudiar el próximo año y hasta que acabe la carrera universitaria.

-Que fuerte, seguro que es para mí – bromeó Jeno a mi lado con una sonrisa irónica.

-No – contestó el – es para JiSung – dijo señalando con el sobre a nuestro amigo y toda la clase aplaudió.

-Ay el pollito – grité levantando los brazos mientras él se ponía en pie para ir a coger el sobre.

Estaba muerto de la vergüenza por convertirse en el centro de atención de toda la clase, pero yo estaba muy orgulloso, se pasaba el día estudiando, se lo merecía.

JiSung cogió el sobre y se sentó enseguida en su sitio.

-Muy bien, hermano – lo felicité yo pasando el brazo por detrás de Jeno para agarrar la nuca de JiSung y masajearla.

-¿Has visto que listo es, director? – Jeno le golpeó la pierna a JiSung repetidas veces.

-Sí, la verdad es que se ha llevado toda la inteligencia de la familia – bromeó señalando a Jeno y JiSung, supuestamente hermanos mellizos, yo reí – y de la amistad, claro está – dijo mirándome a mi.

-Como se pasa, director – le dije yo rodando los ojos.

Él se despidió de nosotros y salió por la puerta, la clase volvió a la normalidad enseguida, menos Jeno y yo, que estuvimos mofándonos de JiSung y su beca, lo echaríamos de menos, pero se lo merecía y seguro que le abriría millones de puertas al futuro, no como el de Jeno y el mío, que estaba bien negro.

-Disculpad – el director volvió a interrumpir en la clase y esta vez más serio.

-Cuanto tiempo, director – bromeé yo entrelazando las manos en la mesa.

-Se te había olvidado la beca mía y de JaeMin, ¿verdad? – preguntó Jeno pasándome el brazo por los hombros.

-Solo han suspendido ocho este trimestre y han aprobado educación física. Se lo merecen – dijo JiSung señalándonos sonriente.

-JaeMin – dijo el director con voz apagada y mirándome serio.

Sinceramente, en la primera persona que pensé fue en mis padres, en que podría haberles pasado cualquier cosa, era lo peor de esa vida que llevaba, que en cualquier momento, me podían dar una noticia así, y al ver a dos agentes de policía, aún tuve más miedo, porque la última vez que vino a verme la policía a casa, fue para decirme que mi padre pasaría tres años en la cárcel.

-Na JaeMin – me nombró el primero de ellos que se acercaba a mi sacándose las esposas de la cintura – queda detenido por el asesinato de Kim Taeyeon – dijo poniéndome en pie e inclinándome en la mesa.

-¿Perdón? – pregunté yo dejando que me esposaran y mirando a Jeno y JiSung.

-Tiene derecho a permanecer en silencio. Cualquier cosa que diga podrá ser utilizada en su contra en un tribunal. Tiene a la asistencia de un abogado durante su interrogatorio. Si no puede pagarlo, se le asignará uno de oficio. ¿Entiende usted estos derechos? – me dijo el agente y yo asentí con la cabeza, no entendía nada, pero no iba a montar un numerito en mi clase.