🥀 31. Flashbacks 🥀

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Capítulo dedicado con mucho amor para GoChi1998

CAPÍTULO TREINTA Y UNO... [Flashbacks].

J A Y D E N    P O V

Como una mierda. Me sentía exactamente así, completamente jodido.

—Estoy bien —mentí.

—¿Cómo te hizo sentir la muerte de tus padres? —Fije mi vista en la mujer y me encogí de hombros.

—¿No vas demasiado rápido? —apreté los puños suavemente y respire hondo, me miró con atención.

Era la primera vez que venía y la mujer me atestaba de preguntas sobre mi infancia y la muerte de mis... padres, no quería que me hablara sobre ese tema.

—Así trabajo yo —suspiré. La mujer me sonrió—. Por favor ayúdate, que estés aquí es un gran paso, pero necesito que seas sincero conmigo sobre como te sientes.

—Es que estoy bien, es todo —quería irme, tenía muchas cosas que hacer.

—No se tiene que estar mal para venir aquí —sonrió con paciencia. Revolví mi cabello—. Sin embargo, el paciente de mi colega ha dicho que necesitas ayuda.

No sé por qué razón Ian venía al psicólogo, solo sabía que su madre lo sobreprotegía demasiado.

—¿Él les ha dicho algo? —Confiaba en Ian a pesar de todo, sabía que jamás diría algo en mi contra, aunque a veces llegaba a dudarlo.

—Sobre tu familia —cruzó las piernas lentamente, vi como me coqueteaba sin parecer obvia.

Sonreí y mordí mi labio suavemente, me levanté y caminé hasta ella, me posicione detrás y puse mis manos encima de sus hombros, se relajó y echó la cabeza hacia atrás.

—Llevo 6 años lidiando con esto, puedo seguir así. —pasé mis dedos por su cuello sintiendo como estremecía, agarró una de mis manos apartandola.

—¿Fue un impacto para ti? —No respondí, ella continuó—. Entiendo que vives con tu hermana, ¿ella cómo ha sobrellevado este tema?

—Estamos bien —susurré, la mujer negó y escribió en un cuaderno—. Sí lo que quieres es follar, dilo.

—Quiero ayudarte, Jayden, Ian me ha comentado que no te has sentido bien últimamente —ignoró completamente lo que dije antes, me alejé con una sonrisa y me senté delante de ella, mirando a sus ojos.

—Ian es importante para mí, me encuentro aquí por él, pero créeme cuando te digo que estoy bien y que mi hermana está bien, no necesitamos ayuda, con los años hemos superado esto. Como todos a veces tenemos recaídas por estar sin nuestros padres; pero en general estamos bien —soltó un suspiro y sonrió de lado, pude ver lastima en su mirada y me dieron ganas de estrangularla. Después de todo lo que dije se atreve a mirarme así.

—Esto es un proceso lento, es claro que no me dices la verdad, y no tienes que contarme nada, solo intentar ayudarte a ti y ayudar a tu hermana.

Era mi mujer.

—Si eso es todo —caminé a la puerta y puse la mano en el pomo, la mujer se aclaró la garganta, volví a verla—. ¿Algo más, Sydney?

—Es un avance que me llames por mi nombre —asentí y pasé mi mirada de su rostro a su cuerpo, tragó saliva y la vi sonrojarse, negué con la cabeza y resoplé con gracia, de su bata saco una tarjeta y caminó hasta mí, me la tendió—. De verdad quisiera poder ayudarte, puedes venir con Helena un día y estoy dispuesta ha ayudarlos. Solo quería decirte eso, que puedes venir cuando necesites hablar con alguien.

JAYDEN "Tu deber como mujer" ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora