Capítulo 7

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(Liam)

Julie y yo estuvimos cenando en un lujoso retaurante no muy lejos de mi casa, después fuimos a un bar a tomarnos "la última" que se convirtieron en  "las últimas". Llegó un momento en que mi cabeza no daba para más alcohol y le pedí a Julie que nos fuéramos.

-Bueno, dime dónde vives y te llevo - dije montándome en el coche e intentando centrar la vista en la carretera.

-Es en la calle Oxford, no está muy lejos pero no sé si tu deberías conducir, has bebido demasiado.

-Pf, ni que tú estuvieses mejor que yo. - arranqué el coche y me dirigí a la dirección que me había indicado.

A los tres o cuatro minutos, llegamos a su casa y paré el coche justo delante de la puerta. Ella se acercó a mí y me besó apasionadamente, yo le seguí el juego y la temperatura de nuestros cuerpos cada vez ascendía más.

-No me dejarás con este calentón, ¿verdad? -me dijo ella. Yo ni siquiera le respondí, abrí la puerta de mi coche y me bajé, me acerqué a su puerta y la abrí para que Julie saliera. Ella se encaminaba hacia la puerta de entrada de su casa y yo la seguía sin pensar realmente en lo que estaba haciendo. 

Cuando entramos, ella lo soltó todo y saltó a mi cintura colocando sus dos piernas a ambos lados de mi cadera. Yo puse mi mano en su trasero para sujetarla mejor mientras besaba su cuello. 

-Al fondo a a la izquierda - me dijo indicándome dónde estaba su habitación. Con ella en brazos, me dirigí hacia su dormitorio sin separar nuestros labios y la tumbé en la cama. 

Ella me comenzó a desabrochar los botones de mi camisa mientras yo seguía besándola, mi torso quedó al descubierto, la agarré de la cintura y le di la vuelta para que ella quedara encima de mí y pudiese notar mi virilidad, colocó mis manos en su espalda indicándome el lugar de la cremallera de su vestido y comencé a bajarla. Mi mente estaba completamente descolocada, una parte me decía que lo que estaba haciendo no estaba bien pero, por otra parte, no podía parar de hacerlo. Se quedó completamente desnuda sin precisar mi ayuda, se colocó en el lugar exacto y la hice mía...

A LA MAÑANA SIGUIENTE

(Diana)

El sonido del despertador interumpió mi precioso y relajador sueño. Fui a bajar de la cama pero un grito procedente del suelo me asustó.

-¿Theo? - pregunté extrañada al verlo tumbado en el suelo al lado de mi cama -¿Qué haces ahí? - dije agachándome a su altura.

-Anoche estabas teniendo una pesadilla, vine a ver qué te pasaba y me pediste que no me fuera. 

-¿Y por qué no te quedaste en mi cama? 

-No quería estorbar.... 

-Tú nunca estorbas... - dije acariciando su mejilla. Nos quedamos unos segundos mirándonos... ¿Diana qué haces? ¡Es tu amigo! -Eh, bueno, voy a ver a mi padre. -dije separándome

-Sí, yo... em.. voy a vestirme...

Intenté olvidar lo que había pasado o, mejor dicho, lo que podría haber pasaod y fui a la cocina para ver si mi padre estaba ya desayunando pero me encontré con la cocina vacía. Lo busqué en su habitación pero su cama estaba en perfecto estado, como si no hubiese dormido aquí esta noche... espera, ¿mi padre vino a dormir anoche? No pensaba esperar para averiguarlo y fui a mi habitación a por mi móvil. Lo cogí y llamé...

(Liam)

Mi móvil comenzó a sonar y me desperté exaltado.

-¿Dónde estoy? - fue lo primero que pensé, miré a mi derecha y vi a Julie completamente desnuda tapada hasta la cintura con una sábana. Me acordé de que el móvil estaba sonando y respondí.-¿Sí?

-¿Papá? Soy Diana, ¿dónde estás?- Mierda...

-Em... estoy... - Piensa Liam, piensa. - Estoy en el trabajo -Muy bien, Liam.

-¿En el trabajo? ¿Ya?

-Sí... es que... tenía trabajo atrasado de estos días y me he ido antes, siento no haberte avisado.

-Ya... ¿entonces no me llevarás al instituto?

-No, cariño. Hoy no puedo, lo siento.

-Papá, ¿estás con Julie?

-¡¿Qué?! ¿Yo con Julie? ¡No! No veo a Julie desde anoche - dije nervioso.

-Ya, en fin... nos vemos a la hora de comer. Te quiero.

-Y yo, pequeña. - colgamos.

-¿Quién era? -dijo Julie adormilada.

-Mi hija...

-Oh... claro... - dijo colocándose encima de mí mientras comenzaba a besarme de nuevo.

-No, Julie, tengo que irme.

-¿Ya?- se quejó.

-Sí, tengo que ir a casa a cambiarme e ir al trabajo. Luego te llamo -la besé y salí de la casa.

(Diana)

-Ay... - dije suspirando.

-¿Qué ocurre? -dijo Theo saliendo del baño con solo una toalla tapando su cintura y su pelo completamente mojado.

-Te.. te has duchado... - dije perpleja mirando el cuerpo de mi mejor amigo. ¿Desde cuando estaba así de bueno?

-Sí, espero que no te importe.

-No, no... para nada... emm bueno, que mi padre no nos puede llevar al instituto,¿llamas a tu padre?

-Claro... ahora le llamo -los dos nos quedamos parados, yo seguía perpleja... - em... ¿me dejas cambiarme?

-Oh, sí, claro... perdona- dije nerviosa - Em... avísame cuando acabes - salí de la habitación y cerré la puerta. ¿Cuándo me han cambiado a mi mejor amigo?

Cegado por amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora