Capítulo 4

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(Diana)

Tras las presentaciones, fuimos a sentarnos a la mesa para comenzar a cenar. Mi padre sirvió la cena, sus maravillosos sppagethi. Durante la cena, mi presencia pasó a ser tan importante como la de un cuadro que adorna la habitación. Mi padre y Julie hablaban entre ellos, rememoraban viejos tiempos y no paraban de sonreír. Esa sonrisa que le sale a mi padre cuando la mira no se la he visto nunca, es especial, se le ilumina la cara. Cuando mi plato quedó vacío, hice intención de levantarme de la mesa pero mi padre me lo impidió.

-¿A dónde vas,Diana? - me preguntó mi padre

-Pues es que como veo que ya vosotros dos os hacéis muy buena compañía pues no quiero molestar, así que yo mejor me subo a mi habitación... - intenté escabullirme de aquella situación que comenzaba a ser un tanto extraña para mí.

-Oh, no te vayas. Aún no me ha dado tiempo a conocerte. - dijo Julie.

-Normal que no te haya dado tiempo, no has separado la mirada de la de mi padre en toda la noche - dije para mí, aunque se me escuchó.

-¡Diana! ¡No seas impertinente! -me riñó mi padre.

-Lo siento - me disculpé.

-No te preocupes, en realidad tienes razón - me dijo Julie - ha pasado mucho tiempo desde que vi a tu padre por última vez y... bueno, las cosas ahora son más fáciles....

-Pues eso, que os dejo solos - me levanté de la mesa y me fui a mi habitación.

(Liam)

-Perdónala, es que hoy no es su día. Ella normalmente no es así. - Intenté cubrirla.

-No te preocupes Liam - Hubo una pausa -¿Sabes? Aún me parece increíble que tengas una hija. ¿Cómo ha sido eso de que el alocado Liam Payne que yo conocí asentó la cabeza?

-Bueno... no estaba planeado pero pasó y lo tomé como una señal de que era el momento de madurar.

-Y su madre es...Irene, ¿me equivoco?

-No, no te equivocas- dije mirando hacia abajo.

-¿Qué pasó?

-Hubo complicaciones en el parto y...

-Ya - la verdad es que no se la veía muy triste.

-Supongo que también habrá sido un duro golpe para ti enterarte de su muerte, érais muy amigas.

-La verdad es que hubo un tiempo en el que nos distanciamos y no volvimos a saber nada la una de la otra... hasta hoy.

-Pensé que estábais más unidas. ¿Discutísteis?

-Sí, bueno pero eso son cosas del pasado. Fue una fuerte discusión que nos separó de por vida pero bah, no tiene importancia. - dijo mientras se levantaba de la silla.

-Cuéntamelo, ¿qué ocurrió? ¿Fue por un chico? -dije con el rostro pícaro.

-Pues sí, has acertado. - me dijo

-Mmmm... ¿Eric Gale? ¿Él? Era el chico más adorado de todo el instituto. O... ¡Harry! Fue Harry Styles, ¿a que sí? Harry siempre ha sido un rompecorazones y lo sigue siendo jajaj.

-Es cierto, todas las chicas del instituto querían a Harry pero no, no fue por él... fue por ti.- Mis ojos se abrieron de par en par después de oír tal respuesta.

-¿Por... por mí? - me senté en el sofá. - ¿por qué?

-No lo sé... yo estaba enamorada de ti desde que te vi. - se sentó a mi lado -  Al principio Irene decía que no eras gran cosa, que los había mejores... pero para mí eras perfecto. Un día... conociste a Irene, ella al principio no veía nada en ti pero luego las cosas cambiaron, tú ni siquieras me dirigías la palabra. Un día, me enteré de que tú e Irene habíais pasado la noche juntos y que... pues eso. Discutí con Irene porque me había quitado al chico que me gustaba, desde ese momento no volvimos a hablar.

-Wow...no me esperaba nada de esto.

-Ya, ni yo. Para nada me esperaba volver a encontrarte... y menos con una hija.

El silencio volvió a surgir entre nosotros.

-Cuando...- dije empezando y pensando todo lo que iba a decir - Cuando leí tu nombre entre los clientes supe que te conocía de algo pero no era capaz de recordar de qué pero cuando te vi, todos los recuerdos volvieron a mi mente. Tú eras la chica de la que me enamoré.

-¿Qué?

-Déjame acabar. Irene me gustaba, me gustaba mucho pero a ti te veía... no sé... especial, cercana, tranquila...nunca te dije nada porque pensé que tú no sentías lo mismo, no me habías dado pie para pensarlo y sin embargo Irene, estaba dispuesta a todo. Esa noche en la que me acosté con Irene yo estaba súper borracho, no teníamos condones pero nuestros cuerpos no aguantarían más si no nos uníamos en uno en ese momento. Lo hicimos... desde ese momento dejé de verte, cuando salía con Irene ya no venías con nosotros, en los recreos apenas te veía dos veces, te alejaste y no sabía por qué, pensé que las cosas estarían mejor así y continué mi relación con Irene. Me enamoré de ella y ella de mi y me di cuenta de que mi vida estaba destinada a pasar junto a ella cuando me dijo que estaba embarazada. Me olvidé de ti... hasta que vi tu nombre. Hoy, ha sido la primera vez en 16 años que he vuelto a pensar en amor, y no en un amor muerto si no en uno nuevo que aún puede florecer.

Creo que mis palabras dejaron a Julie un tanto perdida ya que ella se lanzó contra mis labios y los presionó fuerte contra los suyos sin apenas pensárselo un segundo.

Cegado por amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora