Capítulo 16

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(Diana)

Cuando acabaron las clases, Theo y yo nos fuimos directamente a casa. Los dos queríamos que pasase la hora de la comida cuanto antes.

-¿Y si nos vamos a comer fuera los dos solos? Nuestros padres no tienen por qué enterarse - dijo tomándome del brazo antes de que yo abriera la puerta de casa.

-Pero entonces ella le dirá a mi padre que no he comido en casa y la tendremos otra vez. Los dos juntos podremos con esa bruja - dije acariciando su mejilla. Finalmente entramos en casa.- Hola - saludé.

-Hola-dijo Julie saliendo de la cocina - ¿Y Liam?

-Mi padre no viene a comer, tiene que quedarse en el trabajo

-Aaahh... ¿y este quién es? - dijo señalando a Theo.

-"Este" -dije haciendo las comillas con las manos - es mi novio, Theo

-Ah...así que este es el "afortunado" - dijo imitando mi gesto de las comillas. Se acercó a su oído y le dijo algo que yo alcancé a escuchar.- En verdad no sé qué ves en esta muchacha, no tiene nada...

-Tiene todo lo que a usted le falta, entre otras muchas cosas, madurez. - Theo habló bien alto para que yo le escuchara bien. Julie se separó de él.

-A comer. -dijo seca dejándonos solos.

-Te amo, Theo. - dije abrazándolo. Lo que ha hecho es de valientes, ni siquiera yo hubiese sido capaz de contestarle así.

Fuimos al salón donde Julie había puesto la mesa y, estoy segura de que la puso porque pensaba que vendría mi padre, si llega a saber que solo venimos nosotros dos no nos deja ni comida hecha. Nos sentamos a comer, yo en frente de Julie y Theo en el sitio de mi padre. Todos estuvimos en silencio durante la comida, ni una mosca se oía. Tengo que reconocer que Julie será una bruja, pero sabe cocinar, su comida estaba muy buena.

-Como sigas comiendo tanto te acabarás pareciendo a una foca. -¿¡perdón?! ¿¡He oído bien?!

-¿Cómo la has llamado?- dijo Theo

-Theo por favor, déjalo. - le dije, no quería ni siquiera contestarle ante lo que me había dicho. No se merecía mis palabras.

-¡Vuelve a repetirlo en mi cara si te atreves! - dijo levántandose de la silla y encarando a Julie.

-Fo-ca - repitió. Theo levantó la mano con intención de que ésta acabara en la cara de Julie pero al parecer ella no le temía. -¿Qué vas a hacer? ¿Pegarme? Ja, tú eres el que saldrá perdiendo. Le contaré a Liam que me has pegado y entonces no creo que vea tan bien eso de que estés saliendo con su pequeña... -Theo comenzó poco a poco a bajar el brazo al darse cuenta de que tenía razón, nos tenía pillados.

-Vámonos - le dije a Theo agarrándole del brazo y nos fuimos a mi habitación. Theo se sentó en la cama.

-Qué asco de mujer, tenía que haberle dado lo que se merecía.

-¿Para qué? ¿Para qué mi padre no acepta la relación porque has pegado a su novia?- pasé por delante del espejo y me miré. Comencé a mirarme el cuerpo en el espejo.

-No te creerás lo que te ha dicho Julie, ¿no? - dijo colocándose detrás de mí.

-¿Yo? No... aunque quizás...

-No lo digas ni en broma, Diana. Estás perfectamente, no te dejes engañar por lo que te diga ella.

-Lo sé, lo sé, tranquilo.

-Eres perfecta para mí, siempre lo has sido y siempre lo serás. No lo olvides. - Se fue acercando lentamente a mis labios, la separación entre nosotros cada vez era menor, podía notar su aliento sobre mi boca hasta que al final sucedió, nos besamos.

-Diana ya he... llegado... - dijo mi padre abriendo la puerta de la habitación e interrumpiendo el beso. Nosotros nos separamos e intentamos hacer como si no hubiese pasado nada, pero no lo podíamos ocultar, nos había visto.

-Oh, papá, ¿ya has llegado? -dije acercándome a la puerta. -Espérame abajo, ahora voy- le dije a Theo. -Gracias por interrumpir...- le dije irónica cuando nos quedamos solos.

-No soy adivino Diana. ¿Yo que sabía? Bueno, ¿qué tal la comida? ¿Todo bien?

-Sí, todo bien...

-¿Segura? -me dijo

-Seguuuura.

-Bueno, vuelve con tu chico que lo has dejado con las ganas.- me dijo y se fue.

Yo bajé las escaleras para reencontrarme con Theo y salir a dar una vuelta.

(Liam)

Iba a ir a la planta de abajo pero pasé por delante de mi habitación y algo me hizo frenarme. Retrocedí unos pasos y pude ver a Julie tumbada en la cama en posición povocadora.

-¿Julie?¿Qué haces aquí? Ahora iba a bajar a verte - dije entrando en la habitación.

-Te he echado de menos hoy en la comida - dijo agarrando mi corbata.

-Yo a ti también preciosa... -dije besándola. Un simple beso se convirtió en una lucha por ver qué lengua entraba primero en la boca del otro. Comenzamos a quitarnos la ropa, hasta poder ver nuestros cuerpos desnudos. No podía aguantar más y la hice mía.

-Li..-Liam - dijo entre gemidos.

-Sí...- dije sin dejar me moverme

-¿Me...amas? - preguntó entre gemidos.

-Como a nada en el mundo - dije de igual modo mientras mordía suavemente su oreja provocándole el máximo placer.

Cegado por amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora