Capitulo 14

448 39 4
                                    

Narra Pilar

Dos semanas pasaron desde la noche incomoda. Y hasta ahora todo estaba en orden. Purre y yo llevábamos la amistad perfectamente bien, aunque no voy a negar que ese sentimiento que crece entre nosotros, por mi culpa, hace más grande. Pasamos dos semanas juntos, bueno, también algunas veces con Facundo y Santi.
Pero había una sensación amarga en mi pecho, mis padres no habían llamado desde que he llegado y eso me tiene mal. Me decidí a llamar a mi madre.. Al tercer timbre contesto.
- Hola? Murmuró y pude notar en su voz lo prevenida que estaba.
- Mamá? Dije sin ocultar la emoción que tenía.
- Pili? Oh, Dios Pilar! Gritó de emoción.
- Sí mamá, soy yo! Hola mami, te he extrañado mucho.
Parpadee varias veces para alejar las lágrimas.
- Nosotros también mi pequeña, te amo mucho! Al parecer ella no se contuvo y estaba llorando.
- Por qué no me habían llamado? Le pregunte.
Pero soló escuchaba sollozos y una voz masculina alfondo.
- Mamá? Es papá? Está todo bien?
Pregunte presa al terror
Otros segundos de ruidos extraños antes de que ella reaccionará.
- Sí, mi amor! Todo está bien. Perdónanos, vale? Te amamos mucho y hemos estados ocupados y pensamos que querías tu espacio, te llamaré luego y jamás nos olvidamos de ti, Pili!
Su voz era cuidadosamente controlada.
Eso me ayudó a calmarme, pero no mucho.
- Mamá? Qué está pasando?
- Nada Pilar. Dijo con una voz neutral. - Te amo y cuídate, no hables con extraño, vale? Por más cercano que parezca una persona, siempre será un extraño.
Dijo y colgó.
Me quede helada. Con el teléfono en mano esas palabras parecían tener un significado. Un significado que no podía describir.

Reaccioné cuando Purre y Facundo salieron riéndose de algo de La Cocina, los ojos de Purre se encontraron con los míos y frunció el ceño en preocupación, rápidamente le di una sonrisa tranquilizadora y guardé mi teléfono en mi bolso con dedos temblorosos.

Crucé la habitación hasta llegar al sofá de la del apartamento de Purre. Santi ponía la película, Facundo estaba preparando las palomitas de maíz y algunos refrescos y Purre se dirigió hacia mi.
- Está bien?
Me pregunto Purre acariciando mi brazo
Le sonreí
- Muy bien.
Le respondí dulcemente
Él me miro triste
- Sé que no es verdad, pero no quiero insistir porque veo que te lástima.
Dijo sonando más inseguro que sus palabras. Le sonreí
- Gracias, Purre! Por todo.
Él me abrazo y yo escondí el rostro en su pecho amando como nos encajábamos. Purre era bastante tierno conmigo, sempre lo ha sido y no sé si cuando me toca como ahora lo hace pensando en su mejor amiga o pensando en..... Cállate Pilar! Me ordené.
- Vamos a sentarnos
Susurró acariciando su aliento en mi cuello.
Asentí y camine al sofá. En la izquierda del sofá estaba Purre, luego seguía yo, después Facundo y luego Santi.
- No me gusta estar en la mitad. Respondió Facundo con el ceño fruncido
Santiago rio
- Como no? Acaso eres una nenita? Bromeó
Todos reímos.

El transcurso de la película paso sin más, todos estaban concentrados en la película. Yo no, yo seguía deambulando en las palabras de mi mamá y en los ruidos extraños. Qué está pasando? Están bien? Eran solo alucinaciones mías? Y si no lo eran? Y si en verdad estaban en problemas? Y si pasa algo malo con mis padres? Estaba muy preocupada.
- Chicos, fue muy agradable pero me tengo que ir, me puse de pie.
- Claro Pilita, cuando quieras. Dijo Santi
- Adiós Ángel, dijo Facundo.

Miré a Purre que también me miraba con el ceño fruncido.
- Podemos hablar? Le pregunte nerviosa
Él asintió y se puso de pie
Tomé mi teléfono del sillon y abrí la puerta del apartamento de Purre, espere a que le la cerrará y habláramos en el pasillo.
- Ahora, ya mismo me dices que tiene a tu linda cara con ese ceño y esa mirada perdida.
Demando mirándome. Tomé una larga respiración.
- Llame a mi mamá está mañana, empecé. - Ella parecía nerviosa y prevenida, algo anda mal, Purre.
Me miró y proceso la información
- Algo como qué? Pregunte
Negué con la cabeza
- No sé, ellos no están bien, lo sé.. Algo anda mal, muy mal.
Dije sin evitar que mi voz se cortará en lo último.
Él me miró unos segundos, y me atrajo hacia sus brazos.
- Ya, Chaparrita! Susurró contra mi cabeza. - Esta todo bien, soló los extrañas y tal vez tú madre estaba ocupada. Te lo prometo que si vuelve a pasar algo extraño te ayudare pero por ahora no saquemos conclusiones, vale?
Asentí y temblé antes de sollozar
Él me apretó más fuerte.
- Dios! Mi nena no tiembles así que me vas a matar. Murmuró y se alejó para limpiar las lágrimas de mi rostro con caricias. - Vamos, te acompañaré.

~*~
- Ya casi llegan las clases, susurro. Purre mientras acariciaba mi cabello.
Asentí presa del sueño. Tanto llorar me había agotado.
- Te inscribirás? Preguntó
Asentí de nuevo.
- Puedo, por favor tener una conversación normal? Bromeó
Reí
- Pensé que no me quedaría tanto tiempo,y también pensaba terminar en México mi último año. Pero al parecer lo terminaré acá.
Dije sintiéndome de repente increíblemente sola.
Purre al parecer sintió lo mismo y me abrazo más fuerte.
- Me tienes a mi siempre, sea lo que sea. Sabes eso, verdad?
Dijo con ternura que hizo a mi corazón vibrar.
Asentí y me abracé más a él
- Y tú a mí, Purre. Siempre!

El momento íntimo que a veces se desarrollaba entre nosotros estaba ahí. A veces cuando estábamos así de tiernos el uno con el otro se podían ver y saborear. Siempre estaban allí presente desconcertándolos a ambos y poniendo todo más difícil.
De repente él se puse de pie de la cama.
- Ya estas durmiendo, descansa Chaparrita, te quiero mucho, beso mi frente.
- Te quiero más, le susurro

Él salió y sentí la puerta del apartamento cerrarse. Entonces mi celular sonó con una mensaje.

" Hola, bonita! Hace mucho no nos vemos, y me debes una salida. Lo recuerdas? Espero que lo hagas! Tú amigo, Diego"

Si claro, tu amigo.

Mi Suerte 🍀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora