Viaje cancelado.

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Se encontraba el solitario norteamericano sentado en su balcón mientras veía el hermoso atardecer.

Tomo su teléfono para ver si el ruso le había contestado a los mensajes que le dejo, pero no vio nada.

Toco sus mejillas, estas tenian lagrimas marcadas.

—Usa me tengo que ir.. emm cualquier cosa me llamas— dijo el Canadiense un poco apurado, Usa asintió y luego vio a su hermano salir de la casa.

Ahora si estaba solo.

Usa se levanto de donde estaba sentado para entrar a la cocina.

De las alacenas sacó un paquete de galletas, estas eran de vainilla con un delicioso glaseado de chocolate y chispas de colores.

El ingles tomó un pequeño tazón para poner las galletas ahí.

Luego se dirigio a la refrigeradora y de esta saco una fría lata de Coca-Cola.

Se sento en su sillón, decidio ver la tele un rato, pero algo punzante en su pecho que no lo dejaba tranquilo.

No paraba de pensar en Rusia y debido a esto sentia como si un maldito cuchillo se encajara en su corazón.

—maldito ruso..— murmulló.

Su mano empezo a moverse sola, tomando su celular.

Luego supo que hacer, decidio llamar a Japón, ¿para que?, Ni siquiera el lo sabía, pero solo siguió sus instintos.

—konichiwa!! Usa-sempai- soltó la japonesa desde el otro lado de la línea.

—hey Japón— dijo Usa con voz nerviosa —ne- necesito que vengas a mi casa— soltó mientras jugaba con el cuello de su camisa.

—ahora mismo— dijo la nipona para luego cortar la llamada.

Después de exactamente 3 segundos de que la llamada se termino, se pudo escuchar a Japón tocando la puerta.

El de 50 estados se asusto un poco, —¿¡como rayos llego tan rápido!?— dijo en voz baja para luego abrir la puerta.

—ok para que me necesita Usa-sempai?— soltó mientras posaba sus manos en sus caderas.

—te quería hablar de..Rusia..— dijo un poco apenado, ¿que pensaria la japones de lo que habia dicho?

—que pasa con el?— preguntó la de ojos grises Oasis.

—No.. no lo se..— soltó algo confundido el de 50 estados.

—sentemosno y me explicas todo— dijo la japonesa mientras se sentaba en el grande y comodo sillón junto con el norteamericano.

~🌵~

Se encontraba Rusia en la bañera.

Estaba vez si se estaba bañando.

Solto un fuerte suspiro, el también empezo a sentir ese maldito dolor en su pecho.

Estaba empezando a molestarse, ya no lo soportaba más.

Con sus manos tapo su cara y solto un fuerte grito, este no se escuche debido a que sus manos tapaban su boca.

Luego de eso sumergio su cara al agua para soltar otro grito.

Después de eso, decidio salir de la bañera.

—estas listo hermano?— solto el ucraniano desde el otro lado de la habitación.

Luego salió Rusia, ya estaba listo para partir,—si..— dijo con un tono frió.

—ok entonces vamos!— dijo entusiamada la Bielorrusia mientras tomaba su maleta.

ℬ𝒆𝓪𝓾𝓽𝓲𝒇𝓾𝓵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora