Un fuerte sentimiento.

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La mañana estaba muy soleada, más de lo común, las nubes apenas si se podían ver, los árboles se sacudían con algo de fuerza.

La ventana estaba abierta, dejando pasar ese aire fresquito, enfriando toda la sala, donde se encontraban apachurrados Usa y Canadá.

Frío ellos no tenían, pues al estar tan pegados su cuerpos sentían el calor del otro.

El sillón era lo bastante grande como para que a Canadá no le colgarán los pies, y era lo bastante ancho como para que ambos cabieran juntos.

Usa frunció el ceño aún con los ojos cerrados, pues la luz del sol que provenía de una pequeña abertura en la ventana le daba directo a los párpados.

Se pudo oír un bostezo proveniente de la boca de Canadá, dando señal a que ya había despertado.

-Good morning..- Dijo con voz tenue el de 50 estrellas, Canadá repitió la oración para luego quedarse hipnotizado viendo los ojos de su hermano.

-Que satisfacción despertar y ver tus ojos.-Soltó el amante del maple, Usa se sonrojo y frunció el ceño mientras dibujaba una sonrisa divertida en su rostro.

Canadá tomó al menor de los cachetes y este hizo lo mismo, empezaron a masajear las mejillas del otro mientras hacían sonidos raros y sacaban la lengua.

-¿Que están haciendo?-Dijo Ucrania, haciendo que los otros dos se asustaran, Canadá por instinto, empujó a Usa, y este como estaba en el filo del sofá se terminó cayendo.

-¿¡Co - Como mierda entraste!?-Exclamó el canadiense mientras se sentaba en el filo del sillón.

-Pues la puerta del patio trasero siempre está abierta, debería cerrarla alguien puede meterse a la casa-Dijo mientras acomodaba sus corona de distintos tipos de flores.

Usa, quién estaba sentado en el suelo, ignoró por completo a los otros dos, tomó su celular y vio que tenía un mensaje de Rusia.

Sus pómulos se tornaron de un color cereza, sus pupilas se dilataron a tal punto que solo se podia ver un círculo muy delgado azul alrededor de ellas, tenía una sonrisa de bobo enamorado, su corazón latió con fuerza y su respiración se volvió errónea.

Corrió hasta su habitación para encerrarse ahí y poder hablar con aquel chico que lo volvía loco.

Abrió el chat y sus corazón latió tan rápido que hasta sus hombros se tornaron de color carmesí.

-💫-

Rusi💕

Hey Usa!

Hi!

Oye ayer vi que estabas triste y también estresado

¿Que te parece si salimos?

¿Es una cita?

Puedes decirlo así si quieres

Okey ¿A qué hora nos vemos?

¿Que tal a las 3?

Me parece bien

Bien, yo iré a recojerte

Okey


Te iubesc💕❤️

I'm too💞💖

-💫-

El norteamericano sintió como sus mejillas empezaban a arder, se encojió de hombros mientras soltaba un suspiro, igual que una muchacha enamorada.

Se sentó en la cama, vio a los lados para luego sacar una extraña caja debajo de su cama.

La abrió y en ella había una camiseta blanca de rayas azules, y debajo de está había una foto que estaba volteada.

Sacó la prenda de aquel cubo, y empezó a olfatearla, miró la etiqueta, en esta decia Rus, la camiseta era de Rusia entonces.

Sacó la fotografía qué estaba en el fondo, en esta salían el y el ruso, al parecer era de noche y estaban en un parque, por que detras de ellos habían unos columpios. Volviendo a las personas que salían; Rusia estaba besanda la mejilla del ingles y casi el labio de este, este estaba sonriente, con el ceño fruncido y con un sonrojo por la parte donde sobresalian sus pecas.

-Bro, iré con Ucrania y Mex a comer no me esper-Solto Canadá, quién calló al ver a su hermano con una muy sonrojado sosteniendo una foto y al lado de el una camiseta.

Usa escondió las cosas rápidamente, aunque era inútil, pues su hermano ya había visto que eran aquellas cosas.

-O - Okey, si no estoy en casa no te preocupes-Dijo Usa haciendo que su hermano se olvidara de lo que acababa de ocurrir

-Okey, Bye-Dijo sin más para luego irse.

Usa miró al reloj que estaba en su pared, apenas ya había acabado la mañana, tenía tres horas para alistarse.

Usa miró una última vez aquella foto tan tierna para luego volver a guardar las cosas e irse a preparar para su cita.

Aún no sabía por qué se sentía así, se sentía nervioso y entusiasta, no era la primera vez que Rusia lo invitaba a salir, en fin, estaba entusiasmado a que llegara la hora, pero también nervioso por eso.

















Recorta la wea
Ndeah,
multimedia
perrona¿ weno
espero y les
haya gustado
Los amodoro❤️

ℬ𝒆𝓪𝓾𝓽𝓲𝒇𝓾𝓵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora