Capítulo 15

2.2K 221 47
                                    

—P-Perdón por la tardanza...—Levanté mi cabeza y ahí estaba ella.
Nayeon me observaba desde la puerta con nerviosismo, puesto que poseía sus manos casi a la altura de sus rodillas y en forma de puños. Se podía ver que los estaba apretando con fuerza.

Pero no fueron sus manos lo que más llamó mi atención...

Nayeon no llevaba su ropa normal para ensayar... ni pantalones holgados, zapatillas, no , nada de eso. Esta vez la chica llevaba un vestido rojo corto junto con unos zapatos negros.
Y... dios...

Se veía realmente hermosa.
El rojo se ve muy bien en ella.

—¿T-Te gusta...?—Preguntó con nerviosismo sin soltar sus propias manos, ni dar ni un solo paso para acercarse.

—S-Sí...—Respondí loca por ella.

Me encanta..—Pensé.
No podía dejar de mirarla. Se vería realmente maravillosa. Sus piernas lucían tan bellas y delicadas, que pude haber estado horas mirándolas.

—Te ves muy...muy...—Intenté hablar mientras daba unos pasos para acercarme a la pequeña chica que aún no avanzaba desde el marco de la puerta.

—¿Muy..?—preguntó ella mirándome fijamente con sus ojitos rasgados y tiernos.

—¡Muy hermosa!— Respondí con nerviosismo, por lo cual mi respuesta salió con más volumen de lo que esperaba. Casi grité las palabras.

Ante mi torpe actuar, Nayeon soltó una leve risita, la cual hizo que se asomaran sus dientecitos de conejo. —Gracias...—Dijo una vez terminó de reír.

—I-Igualmente...—Le devolví la sonrisa.

—¡¿IGUALMENTE?! —Repitió Nayeon para luego echarse a reír. —Hahahahaha....

¿DIJE IGUALMENTE?
DIOS ESTOY PENDEJA O QUÉ
COMO ES POSIBLE

ES COMO CUANDO UN MESERO TE DICE QUE DISFRUTES TU COMIDA Y LE DICES IGUALMENTE

T/N QUE PASA CONTIGO

—¡L-Lo siento!— Sentí como mis mejillas se tornaban de un color rojizo ante la estupidez que acababa de decir.

Nayeon se acercó más a mi y puso una de sus manos en mi mejilla.
Sus manos estaban tibias y suaves, fue como si un ángel me hubiera tocado.

—No te preocupes...—Acarició mi mejilla con su pulgar.— Fue gracioso... y tierno— Volvió a enseñar sus dientecitos al sonreír.

No pude evitar dirigir mi mirada a sus carnosos labios...
El color de estos combinaban a la perfección con su vestido...

Me relamí los labios inconscientemente al observar los de la joven frente a mi. Subí mi mirada a su rostro y esta se había sonrojado, por lo cual quitó su mano de mi mejilla.

—¿N-No íbamos a ensayar...?—Pregunté intentando recomponerme de ese "extraño" momento. —No puedes ensayar con vestido, haha...—Intenté bromear, pero Nayeon no respondió con una risa, si no que bajó su mirada al piso.

—Eh....sí.. Bueno...—Dijo jugueteando con sus manos nerviosas.—No vine para ensayar....

—Pensé que eso haríamos...—La miré extrañada.—Si no es así, perdón pero tengo que irme... Momo debe estar esperándome.

—Oh...—Pude sentir como su cuerpo se tensaba al oír el nombre de Momo.— ¿V-Viven juntas ya...?—Preguntó con voz temblorosa.

—¿Disculpa..?

—¿Viven juntas?— Volvió a preguntar, está vez con la voz un poco más firme, pero aún sin mirarme.

—No. —Respondí sin darle importancia.
Pude ver como ante mi respuesta el cuerpo de Nayeon se relajó.

Juntémonos a ensayar. (Nayeon y tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora