Capítulo 16.

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Subí a mi apartamento sin poder dejar de pensar en Nayeon... en lo tierno y lindo que había sido pasar estos 30 minutos a sola con ella...

No era incómodo, ni mucho menos molesto, disfruté cada uno de los malditos segundos a su lado...

Giré la manilla de la puerta con lentitud y una vez abierta, pude ver a Momo sentada en mi sofá con los brazos cruzados.

—¿Amor?—Pregunté extrañada. — ¿Que haces aquí..?

—¿Porqué no me contestabas?—Preguntó sin hacer caso a mis preguntas previas.

Toqué mis bolsillos buscando mi celular, estaba segura que lo llevaba conmigo cuando me despedí de Nayeon...

Nayeon... ¿lo debe haber tomado por equivocación?
Bueno da igual supongo... de tenerlo ella me lo llevará mañana..

—Se me quedó el celular en la sala...

—¿Y dónde estabas?

—Ensayando con las chicas, amor...

—T/n no me quieras ver la cara de estúpia... ¡El ensayo terminó hace más de una hora!

—Sí pero me quedé tiempo extra ensayando...

—¿Con quién...?—preguntó Momo con la voz algo quebrada... como si quisiera llorar.

—Con nadie bebé...—Me acerqué más a ella y la rodeé con mis brazos.

—Dime que no estabas con Nayeon por favor... —Soltó un pequeño sollozo, para luego recostar su cabeza en mi pecho.

¿eh...?

Esto ya era extraño, dos veces en un día que Momo se ponía así de extraña... y por ¿Nayeon..?
Hay algo que yo no sé..

—No, bebé. ¿Porqué piensas eso? No estaría con ella. —Mentí, mientras posaba una mano en su cabello para acariciarlo.

—Ella... Ella... —Murmuró Momo.

—Shhh amor... es tarde... hoy fue un día muy agotador, ¿Vámonos a dormir si?—Dije mientras aún acariciaba su cabello.

Momo asintió y tomo mi mano para guiarme hasta mi habitación. Ambas nos desvestimos y nos metimos a la cama simplemente en ropa interior.

Estuvimos un par de minutos besándonos y acariciándonos, hasta que caímos dormidas mientras nos abrazábamos.

-Nayeon Pov-

Luego de haber dejado a T/n en su apartamento no demoré mucho en llegar al mío. Ahora que sabía donde vivía mi amada, noté que no estábamos tan lejos una de la otra, como yo creía.

Una vez en mi hogar, me dejé caer en el sofá aún pensando en el tiempo que pasé a su lado.
Realmente era amor, ya no podía esconderlo más.

Quién diría que yo, Im Nayeon, inalcanzable, diva, hermosa, con miles de pretendientes detrás... me enamoraría de la única persona en la faz de la tierra que no tiene interés en mí.
Pero bueno, así está la cosa.... yo no podía dejar de pensar en ella.

Como me siento cuando estoy con ella no tiene explicación. Todos mis sentidos se activan, mis vellos se erizan y mi corazón salta sin control.
Cada vez que miro su rostro es como entrar en un trance,del cual no quiero salir jamás.
El escuchar su voz es como escuchar mi canción favorita... me gustaría escucharla
una y otra vez, sin dejar de repetirla.

—Ay....—Suspiré saliendo un momento de mis pensamientos por T/n.— Qué me hiciste t/n...— Dije mientras me giraba para alcanzar mi celular.

Juntémonos a ensayar. (Nayeon y tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora