En Otra Vida. (Starker)

10

Peter abrió los ojos lentamente, despertando de el profundo, tranquilo y reconfortante sueño, por suerte las pesadillas no volvieron, y eso era todo un logro, se encontraba abrazado aún con Stark de una forma muy cariñosa y afectiva, Peter se avergonzo mucho de la posición en la que estaban, y aun más teniendo la mano en el cuerpo descubierto de Stark, pero Stark también lo estaba abrazando, era muy Lindo al fin sentir un abrazo del mayor.

El contacto que Tony hacia con Peter era muy reconfortante para Peter, con el rubor en sus mejillas sacó la mano de el cuerpo de Stark y la alejó un poco, aun tenía ganas de seguir durmiendo y tenía que aprovecharlo por que no siempre tendrá lindos sueños.

Se movió de nuevo no alejándose de Stark quedando muy cerca, pero esta vez sin abrazo, el sólo sentir una persona cerca, y además esa persona sea su querido mentor era un alivio tremendo para Peter, era muy ¿Lindo?
Dejó los pensamientos para después y con el calor que Tony emanaba quedó totalmente dormido de nuevo dejando sus ojos hinchados descansar luego de el mar de lágrimas que soltaron la noche anterior.

Cuando despertó de nuevo, Tony ya no se encontraba en la cama, se sentó en la cama, soltó un bostezo y restrego sus ojos para así despertar totalmente, se dirigió a el laboratorio de Tony, de seguro se encontraba ahí, y efectivamente, estaba con la música que adora a todo volumen, haciéndole alguna mejora a su traje o inventando algún elemento nuevo.

Peter entró y saludo a Tony.

—Buenos días señor— saludó.

—¿Qué tal Peter?— saludo Tony, sin alejar la vista de lo sé fuere que estaba haciendo.

—Pensé que no llegaría hasta hoy— dijo Peter.

—Pues acá estoy— sonrió —le pateamos el trasero a un tal taskmaster, entre todos fue fácil, aunque yo hice gran parte del trabajo— presumió Stark.

—Oiga, ehh... yo quería disculparme... por dormir en su cama— Peter bajó la mirada.

—¿Que sucedió Peter, son tus pesadillas de nuevo?— preguntó Stark preocupado, estaba preocupado por su... por Peter.

—Ehh... Si, y pues...—

—¿Por qué, pasó algo?— inquirió Stark.

—No fue un buen día...— se sentó en el sofá sin dejar de ver al genio que dejó lo que estaba haciendo para conversar con él.

—¿Qué sucede Peter?, puedes contarme—.

—Michelle... la chica de la que estaba enamorado... parece que ella no lo estaba de mi— confesó Peter un poco avergonzado y triste.

—Ahh, vamos Peter, mujeres hay muchas, muchísimas, no te enganches a una, eres joven disfruta... Pero ¡Eh!, protegete.
Ya llegará la indicada— Peter no sabía si era un buen consejo o malo, pero agradeció que estuviera preocupado por él y por su bienestar.

—Gracias señor— dijo un poco avergonzado, Tony le sonrió.

—¡Ten!— Stark gritó y lanzó algo por los aires.

—¿Qué es?— pregunto Peter.

—El desayuno y parte del almuerzo— dijo Tony volviendo a lo que sea que hacia.

Era una hamburguesa con mucho queso, como le encantan a Stark, el mejor desayuno que puede haber, no tan saludable, pero muy deliciosa.

Peter sacó la hamburguesa de la bolsa y comió como si no hubiese comido en años, no es recomendable dormir sin comer.
Luego pareces cavernícola comiendo, como parecía Peter.

—Ahora por una sonrisa, ve a ducharte, y vístete, iremos a una fiesta— dijo Stark.

—¿Qué... yo por que?— dijo Peter con comida en su boca, Tony sonrió con asco.