CAPÍTULO 20

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 Christian se levantó bien tarde, había pasado la noche bebiendo en su estudio y aún se sentía borracho, fue a su habitación, se lavó los dientes, hizo algunos gargarismo con el vocal para quitarse el gusto de gatadero que tenía en la boca, luego su cuerpo le pidió de descargar sus intestinos. Cuando terminó se dio cuenta que faltaba el papel de baño, por un momento pensó de usar una toalla, pero sólo la idea le daba asco, entonces se sentó en el videt para lavarse y como el pico de la llave se movía para todos los lados, la apuntó para arriba así qué él no tenía que meter manos, le dio un par de vueltas a la rueda que estaba al final del pico de la llave para regular la intensidad del chorro y llegó bastante potente, cuando se sintió satisfecho de que no quedara tracha de su descarga, tomó un poco de jabón íntimo y se lavó el trasero que tan pronto el jabón lo tocó sintió quemar el hollo del culo, apuntó el agua fría ahí, pero el aldor no pasaba, entonces lleno el videt de agua fría y se quedó un buen rato esperando de calmar el aldor.

  Christian miró extrañado el pote que contenía el jabón íntimo, leyó la etiqueta y la fecha para ver si ya se había pasado, pero todo estaba en orden. 

  Con desdén entró en la ducha e inició el proceso, se lavó primero el cuerpo y al final su linda melena cobriza. 

  Era más de un hora que Taylor lo estaba esperando para andar al trabajo . Su jefe nunca ha hecho tardé aún suceda lo que suceda, salía de su ático a la 7:00 am, tampoco hizo ejercicio esa mañana. Sabía que había bebido casi toda la noche pero nada ni nadie lo detenía de su rutina. Taylor levantó la cabeza y tomó su abitual posición y características sería de soldado al sentir llegar su jefe y por pocos segundos su rostro impasible mostró sorpresa. 

  Christian no estaba vestido como de costumbre con su traje de saco y corbata, ese día estaba vestido con pantalones cómodos de estar en casa y una pollera, en los pies calzaba un par de sandalia marón oscuro. Fuero un regalo no sabía si eran de Mía o de Grace el hecho es que ese par de sandalia eran la última cosa que jamás en su vida se pondría, pero era lo único que tenía de meterse. 

  Con una expresión extrañada y pensierosa en el rostro Christian le habló a Taylor . 

-Taylor,  llama mi sastre y dile que todos mis traje están descocido, es un problema de la costura al parecer el hilo estaba podrido, dile que usé mejor hilo porque mucho le pago. - la última parte la dijo un poco enojado. - al parecer los zapatos los cocieron con el mismo hilo porque también ellos están desconocidos-. Christian se pasó una mano en la cabeza, enterrado al mismo tiempo las uñas en el cráneo. 

Taylor pensó si su jefe se había visto en el espejo esa mañana. 

- los que no están cocido se despegaron también.- continuó Cristian. 

  Por todo el tiempo Taylor no dejaba de mirarle el pelo, también estaba sorprendido de que su jefe, un hombre tan inteligente que no se había dado cuenta que el problema no era de las personas que fabricaron sus vestimentas sino  de alguien allegado a él, Taylor estaba seguro que todo eso era obra de la nueva esposa de su jefe, como también el color rubio que lucían en los cabellos. Taylor no sabía si decirle que probablemente su esposa lo hizo o dejar que lo entienda él solo. Al final decidió callar, pero le dijo del color que tenían sus cabellos. Christian le dijo de comprar todas las cosas de su igiene personal y votar todas las que estaban en el baño  y también de comprar sus perfumes y colonias porque todas tenían un mal olor como de pipí y de llamar a Franco para que lo encontrará en Grey Hause. Sin más salieron del apartamento, ninguno de los dos notó el diablillo que estaba escondido detrás de una puerta escuchando la conversación y tapándose la boca con las dos manos tratando de sofocar la risa que estaba por explotar . 

  Christian estaba aún tontito de la borrachera, se podía decir que estaba aún borracho, le hubiera gustado quedarse en la casa pero no podía, tenía una reunión muy importante. 

 Cuando Christian llegó a Grey Hause todos los empleados lo miraban sorprendido por el aspecto de su jefe. Christian decidió de ignorarlos, primero porque estaba atontido y segundo porque si abria la boca iba a cancelar a todos. 

  Cuando llegó a su oficina ya Franco lo estaba esperando y no pasó mucho tiempo en recuperar su color de cabello, se vistió con un traje de los que tenía en su oficina, era un clásico gris con corbata azul oscuro y zapato negro de cuero y partió para participar a su reunión. 

  Después de las 4:00 pm fue que pudo entrar en su oficina y pensar a todo lo que había pasado esa mañana. Después de una larga meditación se paró de golpe de su silla y salió de su oficina. 

  Puede ser extraño, pero Taylor lo estaba esperando con la puerta del ascensor ya abierta y podía casi ver el humo que le salía por la oreja a su jefe. "hoy explotara la tercera guerra mundial, no sé si escapar o quedarme para proteger la Señora Grey" Taylor miraba a su jefe de re ojo. 

  Anastasia se pasó todo el día curioseando por todo el apartamento, solo le fartaba una habitación y estaba cerrada a llave y eso levantó más su curiosidad. 

  Buscó por todos lados la llave sin encontrarla. - uffa!- esclamò cansada y desanimada, soplo para arriba moviendo los cabellos de la frente. - debe de ser algo de importante si la tiene cerrada.- Ya cuando estaba por rendirse vio una llave de color oro enganchada a un l porta llaves. La tomó y decidió probar.  Hasta ese momento ninguna llave habían abierto la maldita puerta, por lo tanto no tenía muchas esperanzas.

  Cuando ya estaba por abrir la puerta escuchó el ruido del ascensor, miró el reloj y vio que era temprano para que Christian volviera para la casa, así que continuó con lo que estaba haciendo. 

  - ANASTASIA- grito Christian enojado. 

  Anastasia se paro de golpe con los ojos redondos como platos y dijo con un poco de miedo. - me jodi- 

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Hola a todos, se que ha pasado mucho tiempon pero  han sucedido muchas cosas en mi vida, no quiero aburrirlos con mis problemas, quiero solo que se diviertan con mis historias. Deben d saber que aun no tengo una computadora, por lo tanto no publicaré regularmente, meteré en pausa la otra historia y continuaré después que termine esta. Le prometí que terminaría las historias que inició, y cumpliré mi promesa, deben solo tener paciencia porque no soy muy ágil a escribir con el celular. Besos y abrazos. 

ANASTASIA; MI PEQUEÑA TRAVIESA (THE GREY)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora