My Hellsing Academia

I-Island y un encuentro con el pasado

Cuando Izuku despertó, se dio cuenta de que estaba en la enfermería y al lado de su camilla se encontraba Alucard, mirándolo serio, y Himiko, mirándolo preocupada. Izuku sonrió y se sentó.

—¡Izu-! —Toga se calló al ver como Alucard le dio un fuerte puñetazo en el estómago al chico.

—¡Agh! —Midoriya escupió saliva al recibir el golpe—. ¿¡Y eso por qué!?

—Por ser un imbécil —dijo Alucard, molesto—, te dije claramente que el Nivel 0 era para emergencias. Mientras que admiro que hayas tratado de vencerme, era un puto entrenamiento, no valía la pena usar un poder que iba a matar a todos.

—Pero creí que mantenía el control-

—Y así es, pero solo cuando todas tus almas hayan salido, mientras sigas expulsando almas, estas te protegerán y matarán lo que sea que tengan cerca y que no tenga relación contigo.

—O sea que-

—Sí, solo hubiéramos sobrevivido Himiko y yo.

—¡Pero no me dijiste nada de eso!

—Te dije claramente que lo usaras como última opción —Alucard estaba más decepcionado que molesto—. Bueno, ahora me voy, espero que no lo vuelvas a hacer, sino, vincularé el Nivel 0 a mí. —el vampiro desapareció en sombras.

Himiko se acercó y tomó su mano.

—Creo que solo no quiere que seas visto como un monstruo —dijo Himiko suavemente.

—Creo que tienes razón, se preocupa por mí, solo que no quiere decirlo —sonrió Izuku.

—Igual que yo me preocupo por ti —continuó Toga mientras acercaba sus labios a los del chico.

—Y yo me preocupo por ti también, Himiko —él también se acercaba a ella.

Estaban por besarse, cuando la cabeza de Alucard salió de un portal, asustando a ambos.

—Por cierto, All Might nos invitó a un viaje a una isla, preparen sus cosas, partimos mañana, y, nada de hijos aún —seguidamente, cerró el portal.

A la mañana siguiente, Alucard, Himiko, Seras e Izuku estaban en un avión junto al All Might desinflado.

—Bueno —dijo Seras—, al menos no estoy en la zona de carga encerrada en un ataúd esta vez —miró un poco feo a Alucard.

—Ya te dije que no me voy a disculpar, deja de tratar de hacerme sentir culpable —dijo Alucard, con lentes de sol y tomando una copa de vino mezclado con sangre.

—¿De qué habla, Alucard? —preguntó Himiko, Izuku y All Might también estaban confundidos.

—De nuestro viaje a Brasil. Sigo insistiendo que el Yisus quiere un abrazo. Por cierto, me pregunto si habrán podido soltar los nudos del cartel.

Una vez llegaron, Alucard, Seras y All Might decidieron visitar a un amigo de este último, mientras que Himiko e Izuku decidieron hacer una caminata.

—Oye Himiko, me he dado cuenta de que hasta ahora no hemos tenido ninguna cita. ¿Quieres pasear? —preguntó Izuku coquetamente en una plaza.

—No lo sé —dijo Himiko, también coqueteando—. Convénceme.

—Habrá helado de sangre- —Izuku se detuvo y luego hizo una sonrisa macabra— Siento que algunos de nuestra clase están aquí, ¿qué te parece si además del helado vamos a joder a nuestros compañeros?

—Me parece genial —Toga sonrió con malicia y felicidad.

Ambos vampiros entonces se desvanecieron en sombras y aparecieron en un pequeño café desde donde podían observar a sus compañeros, específicamente, eran Shoto, Kirishima y Katsuki, los tres competían destruyendo robots en una atracción. Ordenaron un helado neutro para dos y, cuando se sentaron, Izuku añadió el tipo favorito de sangre de cada uno en su correspondiente mitad. Curiosamente, Kaminari y Mineta eran los meseros, un trabajo de medio tiempo o algo así.