Limón y Sal // Anahug

XXII

POV ANAJU

La 01:30 de la madrugada, llevamos cantando y bailando todos desde que Hugo y mi madre empezaron la ronda de música, estoy sentada en el sofá viendo el panorama y no podría haber celebrado mis 28 de mejor manera. Le miro a él bailar con mi hermana, los dos riendo, Hugo le da todo el protagonismo a ella, Cristina ríe y me mira, se que ahora mismo está pensando "Ana no lo pierdas" y yo pienso lo mismo. Ni mi hermana ni yo habíamos conseguido que mi madre cantara desde que éramos pequeñas y él tan solo había necesitado dos horas con ella para ganarse su confianza y hacer que cantase delante de todos. Termina la canción y todos aplauden a Samantha y a Rafa por el dueto que nos acaban de regalar ellos como si fueran famosos dan las gracias.

- Ana -mis padres me llaman la atención- nosotros ya nos tendríamos que ir 

- ¿Tan pronto? -preguntó

- Sí, hija -mi madre me abraza- tus padres tienen una edad pero tu hermana se puede quedar

- Claro que Cristina se queda -ella está bebiendo junto a mis amigos 

- Os acompaño al hotel -dije decidida 

- No hace falta, es tu cumple y no queremos que vuelvas sola -apareció Hugo en acción

- Lo siento por escuchar conversaciones que no me incumben -se puso a mi lado- pero yo también os acompaño así la niña no vuelve sola -mis padres rieron ante su manera de decir las cosas 

- Ya está, arreglado -cogí mis llaves y nos despedimos de todos

Habíamos quedado que ellos se quedaban en el piso haciendo sobremesa como siempre hacíamos y Hugo y yo volveríamos una vez hayamos acompañado a mis padres. Íbamos andando por la calle y mi padre y Hugo nos cogieron 3 metros de distancia por delante hablando de Dios sabe que, yo mientras iba del brazo con mi madre en silencio observándolos. 

- Es un buen chico -mencionó ella

- Lo es -sonreí inconscientemente

- Nunca me hubiese imaginado que tu novio fuese un cantante famoso -la miré enseguida

- No es mi novio -mi madre me miró alzando una ceja

- Ana 

- Es verdad, tan solo somos muy buenos amigos -intenté sonar lo más convincente posible

- Aja, amigos que se besan -abrí la boca para negarlo pero no me dejo- salisteis en portadas de un montón de revistas besándoos -bajé la mirada- los amigos tampoco se pasan metidos en un baño solos, con uno de los dos desnudo, y saliendo con una sonrisa tonta y la falda medio girada colocándosela -la volví a mirar avergonzada- no te preocupes tu padre no se ha fijado 

- Bueno puede ser que tengamos algo pero no es nada formal -nos quedamos las dos calladas, mi madre sabía que no me podía agobiar

- No me imaginaba que tendría tan buenos modales -me miró sonriendo orgullosa

- Yo tampoco -las dos reímos- no me ha besado ni una vez delante de vosotros -dije incrédula 

- Ha sido muy tierno, eso a tu padre le ha ganado -nos volvimos a reír

- Y te ha hecho cantar -dije esa afirmación suspendida en el aire

- Me ha hecho cantar -dijo nostálgicamente y volvimos a callar- no me esperaba para nada que fuese así...  -volvió a hablar mi madre- Me imaginaba al típico cantante famoso mundial que se lo tiene muy creído, y él en ningún momento ha querido destacar

- Lo sé, él nunca quiere destacar -le miré sonriendo- siempre pone a los otros por delante suyo como si él nunca fuera un primer plato 

- Sus padres deben de estar muy orgullosos de él -hizo una pausa- ¿Los has conocido? 

- En el concierto de Córdoba conocí a su madre, a su hermano y su abuela pero nunca me ha mencionado a su padre -entonces la imagen de él mirando la escena de mis padres bailando como si fuese un niño pequeño apareció en mi mente

- ¿Nunca te ha comentado nada de él?

- Nunca, su madre cuando las dos estábamos paseando por Córdoba me dijo "Ojalá yo pudiese volver a besar a mi marido" pero ya está, no quise molestar y Hugo nunca me ha dicho nada -no dijimos nada más durante todo el camino

Tan solo le miraba la espalda, y veía como mi padre y él ser reían en la conversación que estaban manteniendo, me alegraba ver que se llevaban bien, al fin y al cabo Hugo y yo teníamos un nosotros y necesitaba que mi familia lo aprobase, era importante para mi. Llegamos al hotel, nos despedimos de mis padres, quedamos con mis padres para ir a comer mañana y mi padre por sorpresa de todos invitó a Hugo a comer con nosotros, la cara de Hugo fue de sorpresa pero cambió enseguida a una de alegría aceptando decididamente. El camino a mi piso fue tranquilo, íbamos cogidos de la mano y el silencio era nuestro acompañante pero era un silencio cómodo, a veces acercaba mi mano a su boca y la besaba o a veces tan solo me acariciaba con el pulgar. Antes de llegar al piso me pidió para sentarnos en el banco de delante del portal, no se porque pero no me podía negar y además quería pasar más tiempo junto a él, a solas. 

- Anaju -su brazo estaba por detrás de mis hombros y mi mano estaba entrelazada con su otra mano

- Dime -nos miramos y nos sonreímos sin saber porque, me acarició la cara 

- Lo siento por no haberte regalado nada, pero te prometo que mañana haremos algo por la noche especial 

- Hugo, no seas tonto, me has regalado el mejor regalo y era estar junto a mi -le besé di un pico- y voy en serio, ha sonado demasiado cliché -nos reímos y nos miramos sin quitar la sonrisa 

- Nos podemos quedar aquí toda la noche -nos volvimos a besar

- Ahora si que me besas eh -nos reímos- no has tenido cojones a darme ni un pico delante de mis padres -le reproché riéndonos 

 - La educación va primero siempre -me besó esta vez él- pero ellos ya no están delante así que ahora lo voy a hacer hasta que me duelan los labios -me cogió de la nuca y profundizo el beso, y la intensidad fue bajando para quedar con nuestros labios rozándose

- Perdón por la escenita que te monté el otro día -juntamos nuestras frentes- supongo que me da miedo sentir lo que estoy sintiendo -fue ha hablar pero no le dejé- no soy una chica que exprese con facilidad sus sentimientos, pero siempre voy a estar eternamente agradecida por todo lo que has traído a mi vida. Has hecho que mi control se desbordase pero te lo agradezco, la Anaju de hace unos años ha vuelto y es todo gracias a ti -me acarició la cara y me miró con esa media sonrisa tan típica suya- no se como lo haremos ni cuanto durará pero ahora mismo no quiero que se acabe esto que tenemos -le besé

- Anaju -le volví a cortar 

- No quiero que me digas nada por compromiso 

- ¡Ana Julieta! -me cogió de la cara- te quiero