Limón y Sal // Anahug

XXXV

POV ANAJU

- Mamá toco yo el timbre -dijo cuando iba a apretar el botón

- Vale vale -levanté las manos mientras el orgulloso hacia la acción

- Hombre pero si habéis llegado -dijo Sam mientras abría la puerta- ¿Cómo estás guapo?

- Bien -le daba un beso en la mejilla- ¿Está el tío Flavio?

- Ya están todos esperándote -cuando su tía le soltó no dudo en irse corriendo hacia el interior de la casa

- Hola -saludé yo- ¿Están todos?

- Así es -me miró esperando a que dijese algo

- ¿Se lo va a tomar bien? -admito que estaba nerviosa

- ¿No se lo dijiste? -negué- bueno pues entra y lo averiguaremos, por cierto -me paré- no ha traído a la novia, según él es una comida de amigos y ella no tenía por que venir -asentí nerviosa y andé

Mientras iba hacia la sala ya podía oír la risa de Luís, estaba segura que ya era el centro de atención y es que así era él, el niño de los ojos de mis amigos.

- ¿Quién no te va a dejar comer muchas chuches hoy? -era la voz de Rafa

- Mamá -reí al oír como mi hijo me acusaba

- ¿Y dónde está mamá? -esta vez era Flavio con Luís en sus brazos

- Su madre está aquí -dije en cuanto aparecí, Nia vino enseguida a abrazarme

- ¿Por que no le vas a dejar comer chuches al niño? -me recriminó Flavio

- Porque después no se va a dormir -abracé a Jesús- cada día estás más guapo

- Anda que tú -me respondió

- Eso es un cuento chino que se dice -dijo Rafa refiriéndose a lo que había dicho hacia un momento

- ¿Estás seguro? -enarqué una ceja- ¿Te lo quieres quedar tú está noche cuando no se pueda dormir?

- ¿Me voy a dormir a casa del tío Rafa? -preguntó Luís

- No -negué enseguida

- Si te vinieses a mi casa comerías todas la chuches del mundo -exageró con los brazos haciéndolo reír

Seguí saludando a cada uno de los presentes hasta llegar a Hugo, que miraba a Luís sin entender nada. No le podía quitar la mirada de encima y es que sabía que eso iba a pasar, lo quería alargar pero me di cuenta que tarde a temprano tendría que hacer las presentaciones.

- Luís ven aquí que te voy a presentar a un amigo -bajo de los brazos de su tío

- ¿Ese viejo amigo que me dijiste? -asentí y llegó a mi lado- pues no es tan viejo como me pensaba, parece de tu edad -entonces Hugo al ver a mi hijo mirándolo reaccionó, parecía que estaba metido en un sueño cuando despertó

- Hola -se agachó para estar a su altura- me llamó Hugo -y le puso la palma para que le chocara

- Hola -le chocó la mano- yo me llamo Luís y tengo 4 años -indicó con sus dedos

- Ala que grande que eres -sonreí al ver como mi hijo no se daba cuenta de quien era- eres todo un hombre -mi hijo sonrió orgulloso

- Bueno ahora que ya se han hecho las presentaciones - apareció Sam con una tortilla- ¿Qué tal si vamos a cenar?

Todos nos sentamos en la larga mesa, en un lado tenía a Jesús y al otro tenía a mi hijo, delante mío se encontraba Hugo, sin quitar la mirada de Luís, sé que ahora mismo la mente de Hugo estaba formulando miles de preguntas sin respuestas.