Limón y Sal // Anahug

XXIV

POV ANAJU

Ahora lo entiendo su mirada, ahora entiendo la unión tan fuerte con su madre, el por que de querer caer bien a mis padres, ahora entiendo el por que es tan agradecido. Después de estar paseando toda la tarde por Barcelona decidimos ir a un mirador donde se ve la ciudad, solía venir con mi hermana cuando decidíamos pasar tiempo juntas. No había mucha gente, había diferentes grupos de personas pero se podía estar tranquilamente, estábamos sentados todos en un banco, Hugo en el extremo derecho, seguido por mi, mi hermana y después mis padres, teníamos nuestras manos entrelazadas encima de su muslo, mi cabeza estaba apoyada en su hombro y noté un beso en mi cabeza.

- Perdón -se acercaron a nosotros un grupo de 4 chicas jovenes- ¿Eres Hugo Cobo?

- El mismo -dijo con una sonrisa mientras yo quitaba mi cabeza de su hombro y mi mano de la suya, se levantó y le dio dos besos a cada una, ellas le miraban con admiración y con nervios.

- Estuvimos en tu concierto del Palau Sant Jordi y la canción que cantaste tan solo con tu guitarra fue de las más bonitas que he oído nunca -dijo una de ellas

- La tienes que grabar en un estudio por favor -dijo otra

- Me lo pensaré -dijo él sonriendo

- ¿Nos podemos sacar una foto contigo? -preguntó una de ellas

- Claro, me hago una con cada una y después una todos juntos -ellas asintieron con entusiasmo- nos ponemos hacia aquí que se vean las vistas

Se acercó la primera nerviosa, y se puso a su lado, él la cogió de la cintura acercándola más a él y provocando una sonrisa gigante en la chica, se le veía cómodo y agradecido, hablaba con ellas y les hacía bromas. Las chicas cada vez se sentían más cómodas y ya no estaban nerviosas, hubo una que le pidió una foto haciendo el tonto y él no dudo en hacer una cara rara con una pose que acompañaba la cara. Mi mirada no dejaba de seguirlo con una sonrisa tonta, y ahí me acepté de que estaba enamorada de él, quería verlo conocer a sus fans, lo quería ver brillar en un escenario, lo quería ver recién levantado y lo quería e él.

- Anaju -me llamó- ¿Nos puedes hacer la foto? -ya estaban todas las chicas preparadas para la foto grupal y yo no dudé en hacerla, ellas se me quedaron mirando y hubo una que abrió los ojos, en ese momento supe que habían descubierto quien era

- Gracias -cada una de ellas le agradecieron haber estado más de 10 minutos con ellas, haciendo fotos y hablando, ninguna me dejaba de mirar con una sonrisa y yo les hacia el mismo gesto

- En persona es más guapa -oí como una le decía a su amiga, Hugo también lo oyó y me miró para guiñarme el ojo

- Espero veros en otro concierto -dijo el rubio

- Nosotras también -se rieron y ellas se fueron comentando todo lo que había pasado

- Lo siento por haberos molestado -dijo Hugo hacia nosotros

- No te preocupes -le dijo mi madre con una sonrisa

- ¿Así que eres más guapa en persona? -me susurró él coqueteando

- Se ve que sí -nos reímos- eres adorable cuando estás con tus fans

- ¿Eso es bueno? -enarcó una ceja

- Me encanta -y le besé yo, él se intentó separar pero no le dejé, Hugo dejó que lo besará, fue una beso tierno, sencillo y corto, pero no podía aguantar más tiempo si besarlo

- Anaju -me reprochó él con una sonrisa

- Hugo, me da igual -le acaricié la cara- a mis padres no les importa

- ¿Segura? -me reí, me tenía enamorada

- Sí -antes de besarle, nos miramos con una sonrisa tímida y me atreví- te quiero -su sonrisa creció

- Te quiero -me respondió él y nos volvimos a dar un pequeño beso

Después de casi una hora decidimos irnos de ahí, mis padres se fueron al hotel, mi hermana a su piso y nosotros a mi piso, decidimos que mañana iríamos a cenar todos juntos, ya que el Lunes se iban otra vez hacia el pueblo. Una vez que entramos en casa vimos a Flavio y a Samantha juntos en el sofá mirando una película, los dos nos quedamos en la puerta mirando la escena sorprendidos, al vernos Flavio se levantó enseguida y Samantha rodó los ojos.

- ¿Flavio? -dijo Hugo

- Hola -carraspeó con la voz

- No os esperábamos tan pronto -dijo Samantha

- Son las ocho de la noche -respondí yo, Flavio no dejaba de mirarnos- ¿Os quedáis a cenar? -le pregunté a los chicos

- Claro -dijo Hugo y miró a Flavio que sonrió y se volvió a sentar en el sofá pasando una brazo alrededor de Sam, mientras el rubio y yo nos fuimos a la cocina a preparar la cena

- Ya tenemos nueva pareja -me dijo abrazándome por detrás

- Ya te lo dije, Sam consigue todo lo que quiere -me giré y puse mis manos en su cuello- Te quiero -le volví a decir, necesitaba volver a decírselo

- Yo también te quiero -y me besó, esta vez no fue un beso como el de delante de mis padres, esta vez fue un beso necesitado, le apoyé en la encimera y yo quedé entre sus piernas, le morí el labio y salió un gemido de su garganta- me encanta cuando tomas el control -yo tan solo sonreí y le volví a besar